Ella es la mexicana que acudió a la Corte de Texas sólo para ver a a García Luna esposado

Una mujer mexicana fue a ver a Genaro García Luna en la Corte Federal de Texas. Se trata de Cynthia Rosales de 23 años, quien llegó al reciento con un solo objetivo: ver al secretario de Seguridad Pública durante el gobierno de Felipe Calderón esposado y vestido con su uniforme color naranja de reo.

De acuerdo con una nota de Dallas Morning News, Cynthia llegó temprano a la sala de audiencias donde el martes pasado compareció el llamado súper policía ante David L. Horan, magistrado de la Corte Federal del Distrito Norte de Texas.

“Vine porque soy mexicana y lo que hizo (Genaro García Luna) es una falta de respeto a los mexicanos, mucha gente murió por su culpa”, dijo Rosales a la reportera Imelda García, de ese medio.

Cynthia es originaria de Toluca, Estado de México. A los siete años emigró con su familia a Dallas y ahora también es ciudadana estadounidense, por lo que tiene doble nacionalidad.

En esa ciudad texana, Rosales estudia Ciencias Computacionales en El Centro College, y el martes al salir de clases se fue directo a la corte para ver aparecer a García Luna, el otrora poderoso funcionario mexicano.

A pesar de que afirmó no tener familiar alguno que haya sufrido directamente por las acciones de la delincuencia organizada ni por las llevadas a cabo por Genaro García Luna, Rosales afirmó que le da tristeza lo que ocurre en México.

“Mucha gente vivió cosas traumatizantes cuando él fue funcionario y a mí me da tristeza porque yo nací ahí”, afirmó.

Rosales dice que tenía apenas 10 años cuando García Luna tomó a su cargo la seguridad pública de México bajo el gobierno de Felipe Calderón Hinojosa, del Partido Acción Nacional (PAN).

Sin embargo, recuerda claramente el caso de la ciudadana francesa Florence Cassez y cómo se hizo el montaje televisado para hacerla aparecer como secuestradora de la supuesta banda Los Zodiaco.

“Cuando le dije a mi familia que iba a estar él (Genaro García Luna) en la Corte, me dijeron que sí fuera porque les interesa lo que pasa en México”, explicó.

Cynthia Rosales se dijo confiada de que en Estados Unidos habrá justicia en el caso del ex secretario de Seguridad Pública de México.

“Suena mal, pero en México todo mundo tiene su precio y aquí es casi imposible comprar a un juez”, sostuvo.

Para la joven, México sólo va a cambiar cuando su gente deje de guardar silencio sobre los males que afectan a su país.

Durante la audiencia del pasado martes, que duró menos de 10 minutos, García Luna se reservó su derecho a declarar y aceptó ser trasladado a Nueva York en donde comparecerá ante el juez Brian Cogan, el mismo que juzgó y sentenció a Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera.

En la llamada gran manzana sólo existen dos prisiones: el Centro Correccional Metropolitano de Nueva York y el Centro de Detención Metropolitano de Brooklyn, por lo que la situación del ex funcionario mexicano se reduce a estados dos opciones para ser encarcelado.

La primera se trata de la cárcel donde fue recluido por dos años “El Chapo” Guzmán, quien en varias ocasiones se quejó de las duras condiciones del penal, también conocido como “El Guantánamo” de Nueva York.

Y es que las celdas de esta prisión son de escasos 18 metros cuadrado, tiene una ventana por la que se puede ver poco, cuentan con una cama, un escritorio, baño, lavamanos y una biblia. Su fama es la de un penal seguro y estricto, sin embargo, el pasado 10 de agosto, el asesor financiero acusado de delitos sexuales, Jeffrey Epstein, se suicidó, lo que levantó las dudas sobre la honestidad de las autoridades que dirigen dicho penal.

En esta prisión también han estado delincuentes famosos como: John Gotti, jefe de la familia criminal italiana Los Gambino; Abu Anas al-Libi, Khalod al-Fawwaz, Omar Abdel Rahman y Ramzi Yousef, acusados de terrorismo, el narcotraficante Frank Lucas, y el estafador Ponzi Bernard Madoff.

En tanto, el Centro de Detención Metropolitano de Brooklyn está ubicado a unos 15 minutos de donde se encuentra la Corte a la que deberá presentarse García Luna y también alberga a presos de alto perfil, pero sus condiciones no son tan estrictas.

La mayoría de los delincuentes ahí recluidos tienen casos pendientes en el Tribunal de Distrito para el Este de Nueva York, y prisioneros que cumplen sentencias menores.

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