Pese a las altas cifras de COVID-19, crece la cantidad de turistas que vuelve a Miami

Hoteles con mayor ocupación, un aeropuerto muy transitado y calles repletas de automóviles. Así se vive el fin de año en medio de la pandemia en el sur de la Florida

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Miami-Dade, que con unos 2,8 millones de habitantes es el condado más poblado de Florida, sigue siendo el más afectado por el covid-19 en este estado (EFE /Giorgio Viera /Archivo)
Miami-Dade, que con unos 2,8 millones de habitantes es el condado más poblado de Florida, sigue siendo el más afectado por el covid-19 en este estado (EFE /Giorgio Viera /Archivo)

Miami está atravesando uno de los peores momentos de la pandemia de COVID-19, con cifras récord de contagios y hospitalizaciones. El estado de Florida ha reportado un promedio de entre 8 y 10 mil casos de a diario a lo largo de diciembre. Y el martes se confirmaron otros 12.075, lo que eleva la cantidad de positivos a casi 1,3 millones desde marzo.

La mayor parte de ellos han tenido lugar en Miami-Dade, el condado más densamente poblado del estado sureño, donde ya se han superado los 293 mil contagiados, con 2.825 nuevos casos confirmados ayer.

Sin embargo, las elevadas cifras no parecerían amedrentar a los turistas, que después de meses sin verse por la ciudad, parecen haber vuelto en cantidades significativas a Miami.

El turismo es la principal industria del sur de la Florida, por lo que su virtual paralización durante la pandemia ha dejado un impacto visible en la región. Pero con la llegada de las fiestas de fin de año, cuando la mayor parte de los Estados Unidos registran a temperaturas gélidas, el calor de Miami parece haber sido atractivo para muchos.

En primer lugar, por primera vez desde marzo las calles registran niveles importantes de tránsito. A todas horas las autopistas van cargadas de automóviles y encontrar lugar para estacionar en las calles ha vuelto a ser una tarea imposible, sobre todo en zonas turísticas como Miami Beach, Brickell, Wynwood o el Design District.

Pero no se trata sólo de una percepción. Hay números duros que confirman la tendencia. El aeropuerto de Miami ha recibido un promedio de 68 mil pasajeros al día en la semana del 24 al 27 de diciembre, con un récord el pasado domingo de 84 mil en un día. Los números están muy por encima del promedio de 40 mil pasajeros al día que se vieron durante los meses previos. Y el flujo sigue creciendo. Aún sin los números de la última semana del año, se espera que todos los días de este fin de diciembre vean cifras similares.

Personas sentadas en el restaurante Il Giardino en Ocean Drive en South Beach en Miami. Foto: REUTERS/Zachary Fagenson
Personas sentadas en el restaurante Il Giardino en Ocean Drive en South Beach en Miami. Foto: REUTERS/Zachary Fagenson

La industria hotelera, que tan damnificada se ha visto por la pandemia, obtiene un respiro. Los últimos datos disponibles del buró de turismo de Miami y sus playas indican que la semana del 19 de diciembre ha sido la de más alta ocupación de hoteles desde el comienzo de la pandemia. Se espera que esos números sean superados por los de las dos últimas semanas de diciembre, aunque aún los números son un tercio de lo que fueron en Miami en diciembre de 2019.

Si bien los turistas son más que bienvenidos en una economía en estado de coma, las autoridades piden cautela a la hora de salir. Florida, por disposición del gobernador Ron DeSantis, no tiene reglas estrictas para quienes quieran salir de sus hogares, pero en Miami-Dade las autoridades siguen exigiendo el uso de máscaras y distancia social, al punto que los restaurantes que no cumplan con la distancia entre mesas se exponen a una clausura temporal. Además, el condado mantiene un toque de queda a la medianoche, que sólo se extiende a la 1 de la mañana para la noche del 31 de diciembre, previendo que muchas personas querrán festejar.

A su vez, los CDC (Centros para el Control de Enfermedades, por sus siglas en inglés) mantienen su recomendación de evitar viajar en esta temporada.

“La manera más segura de celebrar las vacaciones de invierno es en casa, con quienes viven junto a nosotros. Los viajes y las reuniones con familiares y amigos con quienes no compartimos el hogar aumentan el riesgo de contraer o transmitir el COVID-19 y la gripe”, señala la página oficial del CDC.

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