Casi la mitad de los hospitalizados por coronavirus son menores de 54 años

Muchos de los contagiados por el nuevo COVID-19 se encuentran en la franja etaria que va de los 20 a los 44 años

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Los spring breakers ignoraron las medidas de seguridad para prevenir contagios por COVID-19 (Foto: Pixabay)
Los spring breakers ignoraron las medidas de seguridad para prevenir contagios por COVID-19 (Foto: Pixabay)

Estados Unidos se encuentra en una etapa crítica debido al coronavirus, sin embargo, a la población joven parece no importarle en lo más mínimo, esto debido a que muchos de los spring breakers están ignorando la petición de sana distancia para evitar los contagios.

Sin embargo, el nuevo coronavirus no discrimina por edades, y según un reporte que el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) publicó el pasado miércoles, mucha gente joven está enfermando gravemente.

De los 508 pacientes que fueron hospitalizados en Estados Unidos por el COVID-19, el 20% de ellos estaban en la franja que va de los 20 a los 44 años de edad. Mientras que otro, el 18%, estaban entre los 45 y los 54.

Aunque el estudio reafirmó que el nuevo virus es mucho más dañino para pacientes mayores, puesto que el 80% de las muertes asociadas con el nuevo virus han ocurrido en personas que superan los 65 años de edad.

La policía cerró las playas con cinta de precaución (Foto: Reuters/ Carlos Barria)
La policía cerró las playas con cinta de precaución (Foto: Reuters/ Carlos Barria)

Menos del 1% de las muertes por coronavirus fueron en pacientes del rango de 20 a 54 años, y cero pacientes menores de 19 han perecido, según el reporte de la CDC.

Pero, esto no significa que la gente joven deba dejar de cuidarse, ya que aunque ellos tengan menos probabilidades de fallecer, el virus puede transmitirse a sus familiares y amigos, y así contagiar a gente mayor.

Y aunque esta polémica siga, muchos estudiantes ignoraron las órdenes de las autoridades estatales en Florida, y cientos de universitarios en Miami celebraron el Spring Break -o vacaciones de primavera- en South Beach, uno de los puntos más visitados del país.

El sábado pasado, un día después de que el presidente Donald Trump declarara en Estados Unidos el estado de emergencia nacional por el avance del coronavirus, Dan Gelber, alcalde de Miami Beach, se dirigió a los estudiantes para anunciar que los días de estas famosas vacaciones de primavera se habían acabado. A las 16:30 horas, se cerró gran parte de South Beach y exigió a los jóvenes que regresaran a casa. Sin embargo, la mayoría ignoró la instrucción del edil.

Universitarios siguieron con las fiestas a pesar de las amenazas por contagio (Foto: Reuters/Steve Nesius)
Universitarios siguieron con las fiestas a pesar de las amenazas por contagio (Foto: Reuters/Steve Nesius)

Los universitarios simplemente movieron la fiesta a otra parte de la playa. Sin utilizar ninguna medida de protección, desafiaron a las autoridades y siguieron bailando y bañándose en la orilla, subiendo imágenes que han despertado en las redes sociales gran indignación.

A pesar de los carteles colocados para advertir a los bañistas del riesgo de las reuniones masivas, las playas se encuentran completamente abarrotadas por grupos de estudiantes que no respetan la distancia de seguridad de un metro recomendada por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

“Miami Beach es un destino popular para los estudiantes durante el Spring Break, pero con el cierre de escuelas y la expansión de las vacaciones de primavera, el flujo de visitantes es muy alto. Sería irresponsable por nuestra parte no limitar las multitudes en estas áreas públicas. No solo por nuestros residentes y visitantes, sino por la salud y la seguridad de nuestros sanitarios. No podemos continuar poniéndolos en riesgo y pidiéndoles que se expongan a sí mismos a la posibilidad de contagiarse del virus”, explicó el gestor municipal Jimmy Morales.

Por lo pronto, el estado se acerca a los 400 contagiados, pues este jueves se confirmaron 62 nuevos casos, sumando un total de 390 dentro de Florida. Según el departamento de salud, ocho personas han fallecido.

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