El curioso motivo por el que Ansu Fati no puede ser elegido la figura de la cancha en los partidos del Barcelona

Brilló contra el Villarreal con dos goles y hoy volvió a destacarse en una nueva victoria del Barcelona. Su víctima fue el Celta de Vigo. Y su participación fue clave para que el Blaugrana termine con una sequía de 5 años sin victorias en Balaídos. Ansu Fati abrió el marcador ante el conjunto gallego y su destreza confirma la hipótesis que plantea la posibilidad de que sea el heredero de Messi.

Sin embargo, la estrella naciente no puede recibir el premio al mejor jugador del partido por una insólita medida. Es que el que entrega el galardón después de cada compromiso es la compañía cervecera que auspicia La Liga y las leyes no permiten relacionar la imagen de menores de edad con bebidas alcohólicas.

Ansu Fati tiene 17 años recién cumplidos y deberá aguardar hasta el 25 de agosto de 2021 para poder recibir el reconocimiento adecuado. Contra el Submarino Amarillo el mundo del fútbol se rindió a sus pies, pero las normativas vigentes no permitieron que sea elegido el protagonista estelar en el Camp Nou. Y hoy ocurrió lo mismo en Galicia.

No en vano el Barcelona fijó una cláusula de salida de 400 millones de euros cuando el adolescente firmó su primer contrato profesional con el club catalán. El delantero nacido en Guinea-Bisau, que representa a España en la selección por su nacionalización, heredó el número 22 que dejó el volante chileno Arturo Vidal, quien fue transferido a Inter de Milán. Entre los jugadores más recientes que llevaron ese dorsal en el Culé se recuerdan al Conejito Saviola, el francés Eric Abidal y el brasileño Dani Alves.

El compañero del astro rosarino Lionel Messi batió varios récords de precocidad con el Culé, como convertirse en el goleador más joven del club en La Liga y en la Champions League, como así también con el representativo ibérico conducido por Luis Enrique.

A sus 17 años, lleva once goles en 35 partidos con el primer equipo del Blaugrana y su futuro es prometedor.

Rápido, con muy buena capacidad técnica y versatilidad para moverse por todo el frente de ataque, el guineano también tomó una determinación que lo llevó a distanciarse un poco de la familia Messi. El juvenil era representado por Rodrigo, el hermano de Leo. Sin embargo, a mediados de agosto, decidió romper el vínculo para cambiar de apoderado: de ahora en más será representado por Jorge Mendes, quien maneja la carrera de Cristiano Ronaldo.

Según informó Mundo deportivo, Fati firmó con Gestifute, la empresa de representación que conduce el portugués y que también tiene en su grupo de clientes, entre otros, a Bernardo Silva, a Ángel Di María y a Joao Cancelo, entre otros.

No hubo un comunicado oficial argumentando la ruptura: en su corta carrera, Ansu ya cambió tres veces de representante: comenzó con Junior Minguella, estuvo bajo la tutela de su padre, Bori Fati, trabajó con Rodrigo Messi, y ahora pasó al staff de Jorge Mendes.

En el juego, al menos, la determinación no influyó en absoluto. Messi, que en su momento apadrinó a Fati al momento de su irrupción en la élite, saludó al juvenil en cada una de sus conquistas, y lo mismo hizo el canterano cuando el argentino cambió el penal por gol. Además, cuando el juego lo pidió, se combinaron. Los sueños de reinvención de Barcelona se cimentan en lo que puedan ofrecer la estrella experimentada y la naciente.

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