Cómo es el plan científico para almacenar células de especies en peligro de extinción en la Luna

Un equipo interdisciplinario impulsa la construcción de un biorrepositorio en el polo sur lunar, con el objetivo de resguardar material biológico clave frente al avance de amenazas como el cambio climático y los desastres naturales

Guardar
La propuesta científica plantea almacenar
La propuesta científica plantea almacenar tejidos de animales amenazados, polinizadores y especies clave para los ecosistemas en un cráter lunar de alrededor de seis kilómetros de profundidad, donde la temperatura permanece estable a -196 °C y las muestras quedarían resguardadas bajo la superficie

La idea de resguardar la biodiversidad terrestre en un entorno extraterrestre ha dejado de ser un concepto de ciencia ficción.

Mary Hagedorn, criobióloga de corales del Instituto Smithsonian de Biología de la Conservación, lidera un equipo interdisciplinario que ha presentado un plan para construir un biorrepositorio lunar en el polo sur lunar. El objetivo es preservar muestras biológicas de especies en peligro de extinción y prioritarias, como un seguro ante posibles catástrofes.

Hagedorn busca una solución que trascienda los riesgos terrestres y garantice la supervivencia de la vida animal más allá de nuestro planeta, según detalla Nature.

Para la experta, la propuesta plantea la creación de un “arca de Noé lunar”. El plan inicial contempla almacenar tejidos de animales amenazados, polinizadores y especies clave para los ecosistemas, como los castores. La motivación de Hagedorn y su equipo surge de la urgencia por proteger la biodiversidad frente a amenazas como el cambio climático, la sobrepoblación y los desastres naturales.

“Queríamos algo que pudiera actuar como Svalbard”, explica Hagedorn en declaraciones recogidas por Nature, “pero no hay ningún lugar en la Tierra que sea lo suficientemente frío por naturaleza”.

El plan de almacenar muestras
El plan de almacenar muestras biológicas en la Luna nació por la dificultad de encontrar un lugar en la Tierra con condiciones suficientemente frías, según explicó Hagedorn, quien se inspiró en el modelo del banco mundial de semillas de Svalbard pero quiso llevarlo a un entorno extraterrestre (Imagen Ilustrativa Infobae)

Criopreservación y trayectoria de Mary Hagedorn

La trayectoria de Hagedorn en la criobiología y la conservación marina ha estado marcada por la perseverancia y la innovación. Tras doctorarse en biología marina en el Instituto Scripps de Oceanografía, su carrera dio un giro tras un accidente en la Amazonía peruana. Decidió entonces enfocar sus esfuerzos en los efectos del calentamiento oceánico, lo que la llevó a especializarse en la reproducción y criopreservación de corales.

“En ese momento no se había hecho nada con la criopreservación de corales”, recuerda Hagedorn. Su trabajo pionero ha permitido desarrollar técnicas para conservar embriones y fragmentos de coral, una experiencia que ahora traslada al proyecto lunar.

El depósito lunar propuesto se ubicaría en un cráter de unos 6 kilómetros de profundidad en el polo sur de la Luna, una zona permanentemente en sombra donde la temperatura se mantiene estable a -196 °C.

Estas condiciones criogénicas naturales superan cualquier entorno terrestre y ofrecen protección frente a fluctuaciones térmicas, radiación y amenazas humanas o ambientales. Las muestras, almacenadas bajo la superficie lunar, podrían recuperarse mediante robots similares a los exploradores marcianos.

Las muestras biológicas, una vez
Las muestras biológicas, una vez criopreservadas en la Luna, podrían recuperarse gracias a robots similares a los exploradores marcianos, lo que permitiría en el futuro transformar células almacenadas en células reproductivas e intentar la reintroducción de organismos en sus hábitats originales (Imagen Ilustrativa Infobae)

El proceso comenzaría con la criopreservación de fibroblastos extraídos de piel, que posteriormente se transformarían en células reproductivas para, en el futuro, reintroducir organismos completos en sus hábitats originales.

Desafíos técnicos y pruebas en la Estación Espacial Internacional

No obstante, el proyecto enfrenta desafíos considerables. La financiación es el principal obstáculo, como reconoce Hagedorn. “Este proyecto abarcará diversas áreas, desde la ingeniería espacial hasta la ética, y habrá muchos cambios y avances científicos”, dijo.

El equipo, formado en 2015 y consolidado durante la pandemia por el COVID-19, busca pequeñas subvenciones para avanzar paso a paso. Además de los retos económicos, la iniciativa debe superar barreras técnicas, éticas y logísticas, así como la competencia por los cráteres polares, cada vez más codiciados para la investigación, la minería y futuros asentamientos humanos, según advierte Mehmet Toner, ingeniero biomédico de la Universidad de Harvard y coautor de la propuesta.

Como parte de las pruebas de concepto, el equipo planea experimentar en la Estación Espacial Internacional con el gobio estrellado (Asterropteryx semipunctata), un pez de arrecife. El objetivo es criopreservar aletas pélvicas y analizar su resistencia a la radiación y la microgravedad, además de perfeccionar los materiales de almacenamiento y estudiar el impacto de la congelación espacial en el ADN y la viabilidad celular.

Los autores del proyecto consideran
Los autores del proyecto consideran fundamental la colaboración internacional y multidisciplinaria, convocan a expertos de distintas áreas a sumarse a un esfuerzo de décadas que avance en la protección de la vida terrestre y siente precedentes para futuras estrategias de conservación en el espacio (Imagen Ilustrativa Infobae)

Una vez superados estos ensayos, la intención es ampliar el trabajo a otras especies, en colaboración con la Red Nacional de Observatorios Ecológicos, financiada por la Fundación Nacional de Ciencias de Estados Unidos (NSF), que recolecta anualmente 100.000 muestras biológicas en diversos hábitats.

Toner, con más de tres décadas de experiencia en el campo, destaca la complejidad de preservar la vida a temperaturas extremas y el progreso alcanzado en las últimas décadas: “Ahora es mucho más predecible y factible”, afirma en entrevista con Nature.

Perspectivas y colaboración internacional

La propuesta de un biorrepositorio lunar se enmarca en un contexto de creciente interés por los recursos y la investigación en el polo sur de la Luna. Toner señala que “esa parte de la Luna se está volviendo muy popular”, con científicos y agencias espaciales proponiendo cráteres polares para minas, telescopios y asentamientos temporales.

La iniciativa busca proteger la
La iniciativa busca proteger la biodiversidad global frente a amenazas como la sobrepoblación y los desastres naturales, bajo la premisa de que garantizar la supervivencia de la vida animal requiere soluciones que trasciendan los límites del planeta y apuesten a instalaciones fuera de la Tierra (Imagen Ilustrativa Infobae)

En este escenario, Hagedorn y su equipo insisten en que la protección de la vida en la Tierra debe ser una prioridad en la carrera por establecer infraestructuras lunares.

El proyecto también invita a la colaboración internacional y multidisciplinaria, dada la magnitud y el alcance de la iniciativa. Los autores del artículo en BioScience, muchos de ellos autodenominados “astronautas frustrados” o aficionados a la ciencia ficción, convocan a expertos de diversas áreas a sumarse a este esfuerzo de décadas.

Las declaraciones de Hagedorn y Toner, recogidas por Nature, subrayan tanto la ambición como la viabilidad de la propuesta. “No creo que haya nadie más en el mundo que conozca la biología de los corales y la criobiología como ella”, afirma Toner sobre la líder del proyecto. Hagedorn, por su parte, responde a las dudas sobre la recuperación de muestras con optimismo: salvo un apocalipsis, “viajaremos al espacio regularmente en el futuro”.

Últimas Noticias

Desde el estrés hasta el deterioro cognitivo: cinco formas en que los microplásticos dañan el cerebro

Un análisis de la Universidad de Tecnología de Sydney detalló cómo afecta la exposición continua a pequeñas partículas sintéticas presentes en alimentos, agua y objetos de uso diario

Desde el estrés hasta el

Las pruebas genéticas podrían anticipar insuficiencia cardíaca en niños con miocarditis, según un estudio

Una investigación en los Estados Unidos y Canadá sugiere que analizar el ADN de los pequeños con inflamación cardíaca permite detectar a tiempo a quienes necesitan controles especiales. Cómo facilitaría el acceso a los tratamientos personalizados y evitaría complicaciones

Las pruebas genéticas podrían anticipar

Cannabis terapéutico: en qué tres enfermedades hay evidencia y por qué alarma la automedicación

Científicos de la Universidad de Harvard y otras instituciones de los Estados Unidos advierten sobre el uso creciente de productos derivados del cannabis sin supervisión profesional. Alertaron que faltan estudios contundentes que avalen muchos de los beneficios atribuidos a estos compuestos

Cannabis terapéutico: en qué tres

Por qué el cambio climático podría producir grandes sequías en los próximos 15 años

Nuevas simulaciones climáticas revelan que las condiciones de escasez de lluvias en todo el mundo pondría en riesgo el agua y la agricultura necesaria para 750 millones de personas

Por qué el cambio climático

La proteína clave que podría ayudar a conservar la fuerza en los músculos a edades avanzadas

Investigadores de Estados Unidos demostraron en ratones que restaurar la tenascina-C reactiva la reparación muscular. Cuáles son los desafíos para transformar el avance en una terapia efectiva y segura

La proteína clave que podría
MÁS NOTICIAS