Tensión en Palacio: revelan que Eduardo Arana y Juan José Santiváñez se enfrentan por poder e injerencia en nombramientos clave

Según un informe de Cuarto Poder, Santiváñez habría impuesto decisiones clave desde fuera de la PCM como un “primer ministro en las sombras”, lo que ha debilitado la autoridad del jefe de Gabinete

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Fuente: TV Perú

Una silenciosa disputa de poder se desarrolla al interior del Palacio de Gobierno entre el jefe de Gabinete, Eduardo Arana, y el exministro del Interior, Juan José Santiváñez, quien actualmente dirige la Oficina General de Monitoreo Intergubernamental. Ambos mantienen comunicación directa con la presidenta Dina Boluarte, pero sus posiciones lucen cada vez más enfrentadas, según un informe difundido este domingo por Cuarto Poder, que cita fuentes oficiales.

Aunque ya no ocupa una cartera ministerial, Santiváñez ha acumulado una influencia significativa en decisiones clave del Ejecutivo. Varios nombramientos se produjeron luego de visitas a su despacho, sin el aparente conocimiento ni aprobación del primer ministro.

El caso más representativo ocurrió con Mónica Tiburcio, nombrada como secretaria de prensa del Despacho Presidencial y obligada a renunciar menos de 24 horas después. El entorno de Palacio lo identifica como un “primer ministro en las sombras”, al articular decisiones que, por ley, deben pasar por la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM). Analistas dijeron al dominical que esta dinámica sugiere la existencia de una estructura paralela de poder dentro del Ejecutivo.

El patrón se ha repetido en otros casos. Alejandro Oviedo fue designado jefe de la Dirección Nacional de Inteligencia (DINI) después de permanecer casi tres horas en la oficina de Santiváñez. Aunque la resolución fue firmada por la presidenta y el premier Arana, fuentes del Ejecutivo aseguraron al programa que la decisión se impuso desde fuera de la PCM.

Fotografía de archivo del presidente
Fotografía de archivo del presidente del Consejo de Ministros de Perú, Eduardo Arana, antes de una rueda de prensa, en Lima (Perú). EFE/John Reyes

Situación similar ocurrió con Carlos Malaver, actual ministro del Interior, quien asumió el cargo tras reunirse con Santiváñez. Al día siguiente, Erick Caso, exasesor de Malaver, fue nombrado secretario general del ministerio. Estas maniobras han generado incomodidad en la PCM, donde se percibe que Arana ha perdido protagonismo en la toma de decisiones.

El exdirector de inteligencia Juan Carlos Liendo ha alertado sobre el rol que Santiváñez desempeña dentro del gobierno. Lo describe como un operador sin límites ni mecanismos de control, cuya influencia amenaza con consolidarse aún más para blindarlo legalmente frente a posibles cuestionamientos o investigaciones, siempre según su mirada. “Parece ser el modus operandi de este Gobierno”, dijo.

El analista Iván García consideró, por su parte, que “hay un desorden” en Palacio de Gobierno. “Entran y salen como un carrusel funcionarios de entidades donde el señor Santiváñez no tiene poco o nada que hablar”, afirmó. Según lo reseñado por el dominical, una vez instalados en las jefaturas, algunos de estos funcionarios regresarían a su oficina, acaso para rendirle cuentas.

El Ejecutivo estaría considerando asignarle un nuevo portafolio, el de Justicia, que irónicamente fue encabezado hasta hace poco por Arana, con el propósito de protegerlo frente a posibles investigaciones. De concretarse, este nombramiento consolidaría el ascenso del exministro.

Santiváñez es investigado por presunto
Santiváñez es investigado por presunto abuso de autoridad relacionado con un intento de control sobre un periodista

Solo días atrás, consultado por el canal estatal TV Perú, Arana negó cualquier conflicto en el Ejecutivo y afirmó que mantiene una coordinación “permanente y cordial” con Santiváñez, por lo que calificó las versiones de fricciones como chismes o trascendidos. “(Él) es un gran profesional con quien he coordinado frecuentemente como ministro y ahora como jefe de un área muy importante”, dijo.

El Ministerio Público investiga al exministro por el delito de abuso de autoridad, luego de que se denunciara que presuntamente realizó gestiones con el capitán de la Policía Nacional Junior Izquierdo (conocido como ‘Culebra’) para intentar ‘controlar’ al periodista Marco Sifuentes.

En relación con este caso, la Fiscalía solicitó a Santiváñez la entrega de su teléfono móvil. Sin embargo, él entregó un equipo formateado, lo que motivó que se le requiriera acceso a su cuenta en la nube. Santiváñez se negó y respondió a la fiscal de la Nación, Delia Espinoza, que si deseaba “enterarse” de su vida privada, debía enviarle una citación y “preguntarle” directamente.