Esta es la razón por la que el mismo producto puede costar hasta 23% más en una app de compras

El uso de algoritmos de inteligencia artificial para ajustar los precios según cada usuario ha creado disparidades relevantes incluso en productos básicos durante una misma visita virtual

Guardar
Los clientes pueden ver diferencias
Los clientes pueden ver diferencias de más del 20% en el mismo producto sin motivo aparente. (Imagen Ilustrativa Infobae)

Una investigación de Consumer Reports y Groundwork Collaborative ha revelado que Instacart, la principal plataforma de supermercados en línea en Estados Unidos, aplica experimentos de precios dinámicos habilitados por inteligencia artificial que generan diferencias de hasta un 23% en el costo de productos idénticos para distintos clientes. El análisis, realizado entre septiembre y noviembre de 2025, muestra cómo los algoritmos de precios influyen en el valor de bienes esenciales, con un impacto potencial de hasta USD 1.200 anuales en el gasto de una familia promedio, según estimaciones de la propia plataforma.

Hallazgos principales de la investigación

De acuerdo con Consumer Reports, aproximadamente tres cuartas partes de los productos revisados en Instacart presentaron precios distintos según el usuario, con diferencias que oscilaron entre 7 centavos y USD 2,56 por artículo. Las pruebas, que involucraron a 437 voluntarios en ciudades como Seattle y Washington D.C., consistieron en la compra simultánea de cestas idénticas de entre 18 y 20 productos en cadenas como Safeway y Target.

En un caso concreto, el precio total de una cesta en un Safeway de Seattle varió entre USD 114,34 y USD 123,93, una diferencia del 8,4%. Solo el 8% de los participantes accedió al precio más bajo. Entre los productos con mayor variación se encontraron la mantequilla de cacahuate Skippy (23,4% de diferencia), las galletas Wheat Thins (22,6%) y el pavo Oscar Mayer (22,6%). Otros artículos, como las galletas saladas Premium, el kétchup Heinz y la pasta Barilla Farfalle, mantuvieron precios uniformes para todos los usuarios.

Cómo funcionan los experimentos de precios de Instacart

Instacart es una popular aplicación
Instacart es una popular aplicación que permite realizar el supermercado en línea. (REUTERS/Dado Ruvic/Illustration/File Photo)

Según la investigación de Consumer Reports, Instacart utiliza algoritmos avanzados y herramientas de aprendizaje automático para segmentar a los consumidores y ajustar los precios en función de su “sensibilidad al precio”. Una táctica identificada, denominada “smart rounding”, consiste en modificar los precios de ciertos productos en incrementos de 10 centavos, lo que permite a la plataforma experimentar con diferentes niveles de disposición a pagar entre los usuarios.

Un correo electrónico interno de Instacart, obtenido accidentalmente por los investigadores, describe el “smart rounding” como una herramienta que ayuda a los minoristas a mejorar la percepción de precios y aumentar las ventas incrementales. De acuerdo con la empresa, esta estrategia ha generado millones de dólares en ventas adicionales para algunos de sus socios.

El objetivo de estos experimentos es maximizar los ingresos estimando cuánto está dispuesto a pagar cada cliente por un producto específico. Así, mientras un consumidor muy leal a una marca puede pagar hasta USD 7 por unas patatas fritas, otro menos interesado podría pagar solo USD 3. Al personalizar los precios, el minorista puede captar una mayor parte del “excedente del consumidor”.

Impacto en los consumidores y percepción pública

Recientemente, la aplicación ha implementado
Recientemente, la aplicación ha implementado algoritmos con inteligencia artificial para personalizar precios. (Imagen Ilustrativa Infobae)

La reacción de los usuarios ante estas prácticas ha sido mayoritariamente negativa. Una encuesta nacional realizada por Consumer Reports en septiembre de 2025, con 2.240 adultos estadounidenses, reveló que el 72% de quienes usaron Instacart en el último año rechaza que la empresa cobre precios diferentes a distintos usuarios por cualquier motivo. Además, la mayoría de los compradores desconocía que participaba en experimentos de precios y consideró la práctica manipuladora e injusta.

Expertos consultados por Consumer Reports advierten que la combinación de algoritmos, inteligencia artificial y grandes volúmenes de datos personales podría evolucionar hacia estrategias aún más invasivas, como el “precio de vigilancia”, donde las características personales y el historial de compras determinan el precio individual de cada producto. “Cada paso que damos como consumidores se agrupa en enormes bases de datos y se analiza para que, la próxima vez que enfrentemos una decisión de compra, todo lo que hayamos hecho influya en el precio que vemos”, explicó Len Sherman, profesor adjunto de la Columbia Business School.

Reacciones de expertos y advertencias sobre el futuro

El uso de precios dinámicos en bienes esenciales como los alimentos genera inquietud ética y social. Laura Smith, directora legal de Truth in Advertising, señaló a Consumer Reports que los “descuentos fantasma”, que inflan los precios originales para simular rebajas, “perjudican a los consumidores y distorsionan la competencia en el mercado”. Por su parte, Errol Schweizer, consultor de la industria de supermercados, advirtió que “estas maniobras de precios buscan seguir el ritmo de la competencia y exprimir unos centavos más de la gente”, y anticipó que la situación podría volverse “más complicada y fuera de control para el cliente”.

Respuesta de Instacart y de los supermercados

La aplicación aseguró que este
La aplicación aseguró que este experimento sólo está realizándose con pocos clientes, pues la mayoría ve los precios estándar. (REUTERS/Cheney Orr/File Photo)

Instacart reconoció ante Consumer Reports la existencia de estos experimentos de precios, aunque afirmó que solo 10 de sus socios minoristas utilizan su software de precios y que la mayoría de los clientes ve precios estándar. Sin embargo, la investigación detectó pruebas de experimentación en cadenas como Target, que niega tener relación comercial con Instacart, y en otras como Albertsons, Costco, Kroger y Sprouts Farmers Market. Instacart explicó que, en el caso de Target, recopila los precios públicos y añade un recargo para cubrir sus costos operativos y tecnológicos.

La empresa sostiene que los experimentos no implican un aumento generalizado de precios para los consumidores, aunque los datos de Consumer Reports muestran diferencias promedio del 7% en el costo total de la compra. Safeway, Costco y Kroger no respondieron a las consultas sobre estas prácticas, mientras que Sprouts declinó hacer comentarios.