Después de más de nueve meses sin marcar en partido oficial, Rodrygo reapareció en el marcador y reivindicó su papel en el Real Madrid en un momento clave de la temporada. La sequía, que se remonta al 4 de marzo, llegó a su fin con un tanto frente al Manchester City en Champions, club ante el que ya ha sido protagonista en el pasado y que se ha convertido en uno de sus rivales favoritos en Europa.
Han pasado 281 días desde aquel último gol contra el Atlético de Madrid, obra que llegó después de un pase de Fede Valverde en los compases iniciales de aquel duelo de Champions, famoso por el llamado “doble toque de Julián”. Durante este extenso período, Rodrygo experimentó una serie de altibajos en lo personal y lo deportivo, perdiendo peso específico en la plantilla de un Real Madrid que experimentó diversas variaciones en su frente de ataque.
El papel de Rodrygo en el club madrileño ha experimentado un giro significativo a lo largo de la presente temporada. De ser titular habitual la campaña pasada, el brasileño fue perdiendo minutos mientras emergían nuevas figuras y se producía el esperado desembarco de Kylian Mbappé. El regreso del futbolista al once titular se produjo por la baja circunstancial del atacante francés, aunque fue Gonzalo quien ocupó la posición natural de Mbappé, desplazando nuevamente a Rodrygo de su ubicación preferida, aunque dándole una nueva oportunidad para demostrar su valía.
La confianza de Xabi Alonso, entrenador del Real Madrid, en el exjugador del Santos fue clave en la decisión de alinearlo de inicio ante el conjunto de Pep Guardiola. La prensa deportiva destaca que este gesto fue relevante para el brasileño, que apenas había contado con oportunidades durante la temporada. De hecho, en fases iniciales del curso perdió la titularidad frente a Mastantuono y en algunos partidos fue relegado al banquillo para dar paso a Vinicius Junior.
El gol ante el Manchester City tuvo un peso simbólico que va más allá de la estadística. Rodrygo se reencuentra con el gol en Europa casi diez meses después, y lo hace en un escenario y ante un rival con particular significado. Fue precisamente frente a los ingleses que vivió “su mejor noche como madridista”, al firmar un doblete en la histórica remontada que permitió el pase a la final de la Champions League de 2022. Aquel desenlace inolvidable, que incluyó una prórroga definida por Karim Benzema y una actuación estelar de Thibaut Courtois en la final de París ante el Liverpool, todavía permanece en la memoria colectiva del madridismo. El medio AS recuerda que esa actuación fue considerada “uno de los grandes milagros de la historia reciente del club”.
Rodrygo y la confianza de Xabi Alonso
Para el equipo dirigido por Xabi Alonso, el tanto supone una doble satisfacción: recuperar a un delantero importante y sumar confianza en un periodo de exigencia máxima. La celebración de Rodrygo no fue menor. Abrazó al técnico y mostró en el rostro su alivio y gratitud, consciente de lo que implica retomar la senda del gol tras meses de espera y dudas. El delantero fue el protagonista de distintas oportunidades blancas, al igual que su compatriota Vinicius.
El escenario actual en el Real Madrid obliga a aprovechar cada oportunidad y a redescubrir recursos dentro de la plantilla. El resurgir de Rodrygo frente a un rival de la talla del Manchester City devuelve optimismo al entorno blanco y plantea nuevas alternativas ofensivas para Xabi Alonso de cara al tramo definitivo de la temporada. De esta manera, la sequía de Rodrygo se convierte en un recuerdo y su gol, en un argumento ilusionante para los aficionados y para el vestuario merengue.
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