Madrid, 12 dic (EFECOM).- El consejero delegado de la hotelera Meliá, Gabriel Escarrer, ha dicho este jueves que ha tenido conversaciones con la secretaria de Estado de Turismo, Rosario Sánchez Grau, y le ha avanzado que trabaja para que la nueva norma de registro de viajeros sea modificada y suavizada.
La secretaria de Estado, según el máximo ejecutivo de Meliá, le aclaró que en la orden ministerial de desarrollo del real decreto habrá una aclaración, de forma que muchas de las obligaciones actuales de recogida de datos, se convertirán en "sugerencias".
En una jornada sobre turismo organizada por Forbes, Escarrer ha explicado que Rosario Sánchez estuvo ayer en uno de sus hoteles para comprobar cómo funciona el nuevo registro de viajeros, que hasta la norma hacían en 3 minutos y ahora lleva en torno a 10.
Ha explicado que las empresas hoteleras han desarrollado sistemas informáticos que les permiten agilizar los procesos de registro ('checking') en los establecimientos para que sea lo más rápido y cómodo posible y ahora la nueva norma echa atrás el trabajo.
Escarrer ha defendido que el nuevo real decreto, que obliga a registrar a los viajeros en los diferentes establecimientos alojativos y en los alquileres de coches y es obligatorio desde el pasado 2 de diciembre, es "un disparate".
Este tipo de normas "nos resta competitividad", según el CEO de Meliá, para quien la intención del Ministerio del Interior -el impulsor de la norma- sobre control de terroristas a través de estos datos es dudosa: "me gustaría saber si algún terrorista se ha alojado en un hotel en los últimos cincuenta años".
En el mismo foro, el presidente de la Mesa del Turismo, Juan Molas, ha saludado la disposición de la secretaria de Estado, porque el ministro de Industria y Turismo no se ha pronunciado sobre la cuestión. EFECOM