La razón por la que Felipe VI no ha ido a la boda de su primo Nicolás de Grecia

El príncipe Nicolás de Grecia y la empresaria Chrysi Vardinogiannis se han dado el “sí, quiero” este viernes en una ceremonia privada celebrada en Atenas. El evento ha contado con la presencia de tan solo 50 invitados, entre los que había familiares cercanos, amigos íntimos y miembros de la familia real griega. Este enlace marca el inicio de un nuevo capítulo en la vida del príncipe, quien se divorció de Tatiana Blatnik hace apenas nueve meses.

La boda, que se ha realizado bajo el rito ortodoxo, ha tenido lugar tras una breve relación que se hizo pública hace semanas. De acuerdo con la Revista Lecturas, la pareja ha visitado la archidiócesis del arzobispo Ieronimus II antes de la boda para recibir su bendición, un requisito indispensable para que la iglesia helena permita matrimonios entre personas divorciadas. La ceremonia ha sido precedida por un ensayo que se celebró el miércoles, y al que asistieron varios de los invitados para garantizar que todo transcurriera según lo previsto.

A pesar de la relevancia del evento dentro del círculo familiar, la boda ha estado marcada por la ausencia de figuras clave de la realeza española. Ni el rey Felipe VI ni su hermana, la infanta Elena, han acudido a la celebración. Ausencias que no cuadran con la estrecha relación que el monarca ha mantenido con sus primos griegos y sus tíos, el fallecido rey Constantino II y la reina Ana María.

El principal motivo de la ausencia del rey Felipe VI ha sido su agenda oficial. Durante el mismo día de la boda, el monarca ha recibido al primer ministro de Albania, Edi Rama, en el Palacio de la Zarzuela, donde han conversado sobre temas relacionados con las relaciones bilaterales entre ambos países. Además, Felipe VI ha presidido una reunión con representantes de la World Jurist Association (WJA) y ha entregado el premio Español Universal 2024 a su presidente, Javier Cremades. También ha tenido una audiencia con los presidentes de las 17 Academias Iberoamericanas de Gastronomía, en el marco del 15º aniversario de la Academia Iberoamericana de Gastronomía (AIBG).

Al final, como jefe de Estado, Felipe VI suele tener que priorizar sus responsabilidades oficiales, lo que a menudo limita su participación en eventos familiares, teniendo en cuenta, además, que el enlace se anunció hace pocas semanas y el tiempo no jugaba a favor del monarca para poder reajustar su agenda.

Por su parte, la infanta Elena, quien suele asistir a este tipo de eventos familiars, tampoco ha estado presente. Y es que la hermana mayor del rey sí asistió el septiembre pasado a la boda de la princesa Teodora, hermana de Nicolás, acompañada de la infanta Cristina y sus hijos, a la que tampoco asistió el Rey. Sin embargo, en esta ocasión, su ausencia ha sido igualmente notoria. La boda de Nicolás podría haber sido una oportunidad para reunir a los tres hermanos junto a su madre, la reina emérita Sofía, quien también mantiene una estrecha relación cercana con sus familiares griegos.

La relación entre las familias reales de Grecia y España ha sido históricamente cercana, en gran parte debido a los lazos familiares que las unen. Felipe VI y Nicolás de Grecia son primos, ya que la reina Sofía es hermana del fallecido rey Constantino II. Desde su infancia, el monarca español ha compartido momentos significativos con sus primos griegos, lo que hace que su ausencia en este tipo de eventos sea especialmente destacada.