El episodio de “La familia Ingalls” que presagió cómo la muerte alcanzó a Michael Landon

Uno de los episodios más conmovedores de La familia Ingalls, la clásica serie de los años setenta y ochenta protagonizada y dirigida por Michael Landon, terminó adquiriendo un significado inquietante con el paso del tiempo.

Se trata del capítulo titulado “Remember Me” (“Recuérdenme”), emitido durante la segunda temporada, en el que una mujer enferma de cáncer debe tomar la desgarradora decisión de encontrar un nuevo hogar para sus tres hijos antes de morir.

Décadas después, esa historia ficticia resonaría de forma dolorosa en la vida real del propio Landon, quien falleció a causa de un cáncer de páncreas apenas tres meses después de anunciar su diagnóstico.

En el episodio, escrito y dirigido por el propio Landon, el personaje central —interpretado por la actriz Patricia Neal— deja una frase que se convertiría en una de las más memorables de toda la serie:

“Recuérdenme con sonrisas y risas, porque así es como yo los recordaré”.

Aunque muchos la atribuyen erróneamente a la escritora Laura Ingalls Wilder, fue el propio Landon quien la ideó y escribió para ese guion.

La línea volvió a cobrar vida en julio de 1991, cuando Melissa Gilbert —la actriz que interpretó a Laura Ingalls en la TV— la citó en el funeral de Landon como parte de sus palabras de despedida.

Dean Butler, quien interpretó a Almanzo Wilder, esposo del personaje de Gilbert en la serie, compartió este recuerdo en el pódcast Little House 50.

“Esa línea fue escrita por Michael para este capítulo. Melissa la repitió en su funeral, y fue uno de los momentos más bellos que he presenciado. Ella, que es increíblemente elocuente, estuvo espectacular en esa situación”, relató Butler.

“No puedo escuchar esas palabras sin llorar. Era tan Michael. En el episodio ya era desgarrador, pero cuando se convirtió literalmente en su epitafio… fue como clavar un cuchillo en el pecho”, agregó Alison Arngrim, quien encarnó a Nellie Oleson.

El capítulo es una exposición conmovedora de cómo uno enfrenta la cercanía de la muerte. El personaje, la Sra. Sanderson, no desea que le tengan lástima, sino que entiende el proceso como el llamado divino a la eternidad. Y a pesar que el tiempo se le acortó drásticamente, procura dejar un recuerdo agradable a sus hijos antes de la despedida final.

La vida de Landon reflejó trágicamente aquella historia que él mismo había escrito años antes. No hubo mucho tiempo para asimilar lo que pasaba entre los más cercanos a él.

Fue diagnosticado con cáncer de páncreas en abril de 1991, apareció públicamente en The Tonight Show with Johnny Carson en mayo para hablar de su enfermedad, y murió el 1 de julio del mismo año, con apenas 54 años. Un desenlace fulminante para quien fue, durante años, una figura paternal en la televisión de millones de personas.

Melissa Gilbert quedó muy afligida por su muerte. Ella conoció el diagnóstico a través de Leslie Landon Matthews, hija de Michael y amiga cercana de la actriz desde la infancia. “Me llamó porque quería que lo supiera antes de que se hiciera público. Me dijo que su papá iba a dar una conferencia de prensa. Me quedé destrozada”, confesó la actriz a Fox News en 2024.

“Mi primer pensamiento fue: ‘Esto es horrible – voy a perder a un mentor y figura paterna’. Ya había perdido a mi propio padre por suicidio cuando tenía 11 años. Estaba enfrentando la pérdida de otra figura masculina importante en mi vida. Me sacudió muchísimo”, agregó.

Durante la mayor parte del proceso, Gilbert eligió mantenerse a distancia para no invadir la privacidad de la familia, pero finalmente decidió visitarlo. Ese encuentro resultó ser apenas una semana antes de la muerte de Landon.

“Fue muy difícil. Había estado toda mi vida evitando el proceso de duelo. Pero era importante tener ese tiempo para despedirme, algo que no pude hacer con mi padre. Fue un regalo para mí misma poder decirle todo lo que necesitaba decirle”, relató.

A pesar de lo duro del momento, también hubo espacio para el humor, una característica esencial del actor que se mantenía intacta a pesar de su enfermedad.

“Mi hijo Dakota tenía unos dos años, y uno de los caballos de Michael lo mordió en el dedo. No quería que Michael se enterara hasta saber si era grave. Cuando entré a la habitación, me preguntó: ‘¿Uno de los caballos mordió al niño?’. Le dije que sí, pero que estaba bien. Y él dijo: ‘Gracias a Dios que no fue peor. Me sentiría terrible. Espera… estoy muriendo de cáncer de páncreas. ¿Cómo podría sentirme peor?’”.

Gilbert admite que ella no se sintió funcional por un buen tiempo después de la muerte de Michael y que solo con la ayuda de amigos y familiares pudo atravesar el duelo.

Además, se comprometió con la causa del cáncer de páncreas y actualmente colabora con la organización PanCAN, lanzando iniciativas desde su marca Modern Prairie para recaudar fondos destinados a la investigación y apoyo a pacientes.

“El dolor se suavizó con el tiempo”, expresó. “También me ayudó mucho dedicarme a apoyar a la familia de Michael. El dolor se volvió más llevadero”.