Tensión entre Techint y el Gobierno por el ingreso de tubos chinos y una licitación clave que se aproxima

En medio de una competencia internacional por el suministro de insumos, preocupa al grupo que lidera Paolo Rocca el ingreso de tubos chinos a precios bajos y el daño a la industria local

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Paolo Rocca se mostró preocupado
Paolo Rocca se mostró preocupado por el avance de las importaciones chinas y la afectación local (Fuente)

Una licitación por el suministro de caños para un gasoducto destinado a exportaciones de GNL desde Vaca Muerta mantiene en vilo al Grupo Techint ante el riesgo de que el negocio quede en manos de empresas chinas u otros proveedores extranjeros.

El conglomerado que lidera Paolo Rocca viene advirtiendo ya desde hace varios meses acerca de la competencia desleal que implican los productos provenientes del gigante asiático y el mes pasado, lo que era una preocupación pasó a ser un hecho: llegaron a Río Negro las primeras 5.000 toneladas de caños de acero chino revestidos de concreto para conectar 15 kilómetros en tierra (onshore) entre el gasoducto San Martín y San Antonio Este, así como 2 tramos de 6 kilómetros submarinos (offshore) cada uno entre la costa atlántica y el sitio donde se instalarán los barcos de licuefacción Hilli Episeyo y MK II.

Lo que inquieta ahora a Techint es la posibilidad de que China gane una licitación para fabricar los caños de acero del primer gasoducto dedicado a las exportaciones de Gas Natural Licuado (GNL), que recorrerá unos 480 kilómetros entre Vaca Muerta, en Neuquén, hasta las costas de San Antonio Este, Río Negro.

El proceso de selección, liderado por el vehículo de proyecto único San Matías Pipeline y presentado ante el Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI), cuenta con la participación de firmas de China, India, España, Colombia, México, Japón, Grecia y Turquía. La elección se basará exclusivamente en el precio y la competitividad, aspecto que pone en desventaja a la industria local por diferencias de hasta un 25% en los valores presentados.

Tenaris produce tubos con costura utilizados para los gasoductos en una planta ubicada en Valentín Alsina, Buenos Aires, y además el grupo cuenta con otra fábrica de tubos con costura (usados para otros fines) en Villa Constitución, Santa Fe. Estas instalaciones actualmente están produciendo normalmente, con unos 250 trabajadores, pero el riesgo es que el crecimiento de las importaciones comience a afectar fuertemente la producción y la compañía tenga que reducir personal. La preocupación del sector está latente, aunque aún no hay motivos concretos más allá de la inquietud por compras de tubos chinos que ya sucedieron.

El antecedente que preocupa

El consorcio Southern Energy (SESA), integrado por Pan American Energy (PAE), YPF, Pampa Energía, Harbour Energy y Golar LNG, es el que impulsa la construcción del gasoducto de 480 kilómetros entre Neuquén y la costa de Río Negro, con la meta de exportar 2,45 millones de toneladas por año de GNL a partir de 2027. En ese contexto, el antecedente de una compra previa beneficiando a proveedores chinos encendió las alarmas de los fabricantes nacionales.

Tenaris produce tubos con costura
Tenaris produce tubos con costura para gasoductos en su planta de Valentín Alsina, provincia de Buenos Aires

La licitación para entregar caños destinados a tramos offshore y onshore ya incluyó el arribo de 5.000 toneladas de productos chinos, lo que generó una reacción directa de Techint. Representantes del sector sostienen que el diferencial de precios responde, en parte, a la calidad del acero nacional. Además, señalan que parte de los insumos importados registra un nivel considerable de fallas técnicas, con eventuales costos operativos por reemplazo y control de calidad.

El debate involucra también a grandes operadoras como YPF, que optó semanas atrás por adquirir un lote de válvulas con 85% de componentes importados, pese a la capacidad productiva y tecnológica de proveedores locales. La Cámara de Proveedores de Bienes para Energía criticó esta tendencia, subrayando que la industria argentina reúne certificaciones internacionales y emplea a cerca de 50.000 trabajadores en el sector de válvulas, equipos y componentes clave.

El proceso licitatorio todavía no concluye. Techint buscó reducir su oferta para acercarse a los precios internacionales, aunque las condiciones siguen siendo menos competitivas que las de Asia. Voces de la industria alertan que la competencia global, sumada a la presión por los márgenes mínimos del negocio del GNL, limita las alternativas para proteger a la industria local sin afectar la viabilidad de nuevos proyectos de exportación.

Mientras tanto, la advertencia de Rocca circula en diferentes niveles del Gobierno y genera tensiones con parte de la conducción de YPF y el sector energético, que celebró la utilización de insumos chinos pese a los reclamos por el cierre potencial de empresas nacionales. En ese entorno, se reaviva el debate sobre el equilibrio entre competitividad, empleo y desarrollo tecnológico frente a la apertura de la cadena de proveedores globales para la energía argentina.