
Cuando se habla de los hechos heroicos de la campaña libertadora de Simón Bolívar y Francisco de Paula Santander, la memoria colectiva del pueblo colombiano recuerda con gran anhelo dos gestos fundamentales: la batalla en el Pantano de Vargas - el 25 de julio de 1819 - y la batalla en el Puente de Boyacá - celebrado el 7 de agosto de 1819. Sin embargo, antes de estas fechas, las consecuencias de la travesía por el Páramo de Pisba permitió que las gentes del común de los municipios boyacenses, como es el caso de Tasco, reavivara la llama de la libertad de los soldados sobrevientes del ejército patriota.
En ese contexto, la participación estratégica y humana del municipio de Tasco fue clave para el triunfo de la campaña libertadora. Este territorio no solo ofreció recursos materiales y hospitalidad, sino que se convirtió en un punto de reorganización, atención médica y abastecimiento fundamental para el avance patriota, como lo documenta el Boletín del Ejército Libertador de la Nueva Granada del 12 de julio de 1819.
Ahora puede seguirnos en Facebook y en nuestro WhatsApp Channel
La geografía de Tasco, situada sobre el margen derecho del río Chicamocha y a 2.530 metros sobre el nivel del mar, determinó tanto su historia como su economía. Con una extensión de 167 kilómetros cuadrados y una temperatura media de 15 ℃, el municipio se caracteriza por su riqueza hídrica, reflejada en lagunas y quebradas, y por su proximidad a varios páramos.

El origen del nombre Tasco es motivo de debate, de acuerdo con la Gobernación de Boyacá. Una corriente lo atribuye al vocablo muisca Tescauen, que alude al tamo o tomento, la pelusa desprendida del cáñamo durante la producción de hilaza. Otra versión lo relaciona con Taxco, en el estado mexicano de Guerrero, también conocido por su tradición minera y fundado a inicios del siglo XVI. La fundación hispánica de Tasco data del 15 de octubre de 1577.
El protagonismo de Tasco en la independencia se consolidó tras la Batalla de Corrales el 11 de julio de 1819. Según la documentación archivada por la enciclopedia del Banco de la República, el Libertador llegó a Pisba el 1 de julio y, tras una noche de descanso, emprendió la travesía del páramo, donde las condiciones extremas cobraron la vida de numerosos soldados. La ruta patriota, aunque suele omitir a Socotá, reconoce la importancia del páramo de Pisba, jurisdicción de este municipio, como escenario de sacrificio y valor.

Después de cruzar el páramo, Bolívar y sus tropas acamparon en la vereda de Quebrada. El descenso hacia la provincia de Tunja, por los repliegues de la cordillera hasta el río Chicamocha, condujo a los soldados a Socha el 4 de julio, donde la comunidad, bajo la dirección del presbítero Juán Tomás Romero y el alcalde José Ignacio Sarmiento, entregó sus ropas a los combatientes. Algunos soldados, vestidos con prendas femeninas, participaron en la Batalla del Pantano de Vargas.
El 6 de julio, los batallones continuaron llegando por el camino de Quebradas hasta reunirse en Socha-Viejo, donde aguardaron la llegada de la Legión Británica. El 8 de julio, Bolívar partió hacia Gámeza para enfrentar a un destacamento realista. En el trayecto, se produjeron enfrentamientos en “la Chivatera” entre el 7 y el 10 de julio, donde varios patriotas, incluidos prisioneros y la mencionada Juana Escobar, fueron ejecutados.
Durante los días 8 y 9 de julio de 1819, el ejército libertador se reagrupó en tierras de Tasco. Allí se venera la memoria del coronel Antonio Arredondo, herido en la batalla de “Aposentos de Tasco”, quien organizó los primeros hospitales y acogió a las tropas granadinas y venezolanas.
Numerosos voluntarios locales se sumaron a la causa. En este periodo, Bolívar recibió 500 caballos del general José Antonio Valderrama en una molienda de Tasco, donde el propietario sacrificó bueyes para alimentar a los soldados. Sobre el puente del río Gámeza, se libró una de las batallas más intensas entre patriotas y realistas, motivada por la ejecución de prisioneros en la Ramada.

Los aportes de Tasco a la campaña libertadora se resumen en tres frentes: servicio hospitalario, provisión de vestuario y abastecimiento de caballos. Estos hechos quedaron consignados en el Boletín del Ejército Libertador y en la placa de bronce del Parque Antonio Valderrama, que destaca:
“El pueblo y las autoridades de Tasco acogen con patriótico entusiasmo al Ejército Libertador. Aquí se organizan los primeros hospitales de sangre y las tropas granadinas y venezolanas tienen la oportunidad de reorganizarse. Se les ofrecen ropas y alimentos y numerosos voluntarios ingresan entusiastas a la gran marcha de la libertad. La Campaña Libertadora de la Nueva Granada se ha convertido en empresa de todos los pueblos de la región”.
El paso por Tasco también dejó constancia de la muerte del mayor coronel Antonio Arredondo, comandante del Batallón Cazadores, y de la labor de los alcaldes de Soatá y Tasco, junto al patriota Joaquín Leal, quienes recorrieron el páramo en busca de soldados y recursos abandonados. El desgaste sufrido por el ejército en el páramo de Pisba fue tan severo que, según palabras de Barreiro, los escuadrones de Bolívar eran “un enemigo despreciable por sí mismo, por la desnudez y miseria en que se halla por su cobardía de sufrir los rigores del clima y las armas del Rey”.
En el ámbito residencial y patrimonial, la hacienda Aposentos Tasco, ubicada en la vereda de Santa Bárbara, destaca como centro de memoria histórica. Construida a finales del siglo XVIII por encargo de Pedro Ignacio Valderrama a Jerónimo José Gutiérrez, la propiedad contaba con amplias habitaciones, corrales y una capilla.

Durante la campaña libertadora, Aposentos Tasco funcionó como cuartel general y hospital militar, recibiendo a las tropas de Santander, Bolívar y la Legión Británica. El 8 de julio de 1819, Bolívar dirigió desde allí al ejército hasta el 12 de julio, fecha en que se trasladó al centro del municipio. La estadía en la hacienda permitió a los combatientes recuperarse antes de la confrontación final con Barreiro.
La relevancia de Aposentos Tasco fue reconocida oficialmente: en 1990, la casa fue declarada patrimonio nacional mediante la resolución 041 del 31 de julio, con código M-00360. El inmueble, situado en Vega del Higo, vereda Santa Bárbara, posee un área total de 25 hectáreas y 6.999 metros cuadrados, con 320 metros cuadrados construidos, distribuidos en nueve habitaciones y hasta tres plantas. Para la comunidad tasqueña, este lugar constituye un punto de encuentro social y cultural, y su valor histórico ha sido resaltado en múltiples publicaciones con motivo del Bicentenario.
Es importante señalar que esta noticia se construye a partir de las investigaciones documentadas, archivadas y publicadas por el Banco de la República, la Gobernación de Boyacá y la Alcaldía del municipio de Tasco. Estos textos valoran y acreditan la relevante participación de los tasqueños en la campaña libertadora del ejército patriota, que se registraron a lo largo del año de 1819.
Más Noticias
La Dian anunció remate judicial desde los $10 millones en todo el país: así puede participar en la subasta
Propiedades embargadas con valores de partida bajos aparecen en el catálogo de remates judiciales para diciembre, una oportunidad para los colombianos en diferentes zonas del país

Stuttgart vs. Bayern Múnich EN VIVO, fecha 13 de la Bundesliga, siga el minuto a minuto del partido de Luis Díaz
Los dirigidos por Vincent Kompany siguen invictos en el campeonato alemán, y quieren alejarse del RB Leipzig y Borussia Dortmund en la tabla de posiciones
Así fueron las honras fúnebres de Jean Claude Bossard, en Bogotá: el último adiós de su familia fue el mismo día de su cumpleaños
La familia de la víctima viajó desde Barranquilla para celebrar su cumpleaños, enfrenta el dolor de su pérdida tras un intento de robo en el barrio Chicó Navarra

Daiky Gamboa explicó la razón que él tiene sobre por qué las personas critican y tiran ‘hate’ en las redes sociales
El creador de contenido habló claro sobre por qué muchas personas se dedican a hablar mal de las personalidades desde el anonimato y cómo la felicidad personal influye en la forma de interactuar en Internet

Katherine Vélez revela los secretos y desafíos de 25 años de amor con Ernesto Benjumea : “Yo al lado tengo un tipazo”
La actriz detalló cómo el humor, los piropos y la admiración diaria han sido fundamentales para mantener viva su relación con el también actor


