Martín Santos se quejó por los $30.000 que tuvo que pagar por botella de agua y una chocolatina en aeropuerto El Dorado: un detalle en la factura generó polémica

El Aeropuerto Internacional El Dorado, principal terminal aérea de Bogotá, vuelve a estar en el centro de la polémica por los elevados precios de sus productos.

En esta ocasión, la queja provino de Martín Santos, hijo mayor del expresidente colombiano Juan Manuel Santos, que expresó su inconformidad tras pagar $30.000 pesos por una botella de agua con gas y una barra de chocolatina.

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El hecho ocurrió el martes 11 de marzo, y Santos compartió su molestia a través de su cuenta en la red social X, donde publicó una fotografía del recibo y escribió: “¿Hasta cuándo?”

De acuerdo con la factura publicada por Santos, el desglose del cobro muestra que la botella de agua tuvo un costo de 10.990 pesos, mientras que la chocolatina alcanzó los 16.990 pesos.

Este incidente reavivó el debate sobre los precios en los establecimientos comerciales del aeropuerto, un tema que ha generado críticas recurrentes por parte de los usuarios.

Ante la queja de Santos, una de las primeras en pronunciarse fue la periodista y precandidata presidencial Vicky Dávila, que no dudó en lanzarle pullas al Gobierno nacional por la tercerización de la administración de las terminales aéreas del país.

“Absurdo. Eso pasa cuando los políticos entregan en concesión los aeropuertos. Se generan monopolios, y cuadriplican los precios a los viajeros. Nadie los controla”, comentó Dávila.

Sin embargo, hubo un detalle en la factura publicada por Santos que generó polémica entre los internautas de la red social X.

Aunque el hijo del expresidente denunció haber comprado una sola chocolatina, el cobro que se le aplicó en el comprobante corresponde a una caja de 24 unidades.

“Chocolatina Jumbo Maní 24 und X 35 Gr”, es la descripción que aparece en la factura del establecimiento comercial.

Ante ese detalle, los usuarios criticaron a Martín Santos, acusándolo de no revisar el documento, además de hacer compras sin verificar antes su valor con los empleados del lugar.

“Entiendo que UD está acostumbrado a pedir y pagar sin preguntar precios, porque siempre tiene con que pagar. Ha viajado mucho y sabe que en los aeropuertos eso es normal. Los que no tenemos sus privilegios y tenemos que medir la billetera sabemos que se pregunta el precio antes (sic)”; “Martín, esa chocolatina no te hace bien” y “La gente es víctima de su propia estupidez, si saben que en El Dorado las cosas son caras, pues compre lo que va a consumir afuera antes de entrar al aeropuerto, así se evita estar haciendo el oso en redes sociales “denunciando” algo que ya todo el mundo sabe”, fueron algunos de los comentarios en redes.

La denuncia de Martín Santos no es un caso aislado. Numerosos pasajeros han manifestado su descontento en redes sociales por los altos costos de alimentos y bebidas en el Aeropuerto El Dorado.

Otro caso destacado ocurrió en septiembre de 2024, cuando un usuario compartió que su cuenta ascendió a $190.000 pesos tras consumir cinco cafés, cuatro panes y dos aguas saborizadas.

De hecho, ante las quejas, se sabe que dichos valores responden a varios factores. Entre ellos, destacan los altos arriendos que deben pagar los locales comerciales, los gastos operativos asociados a operar en una terminal aérea y la exclusividad de algunos productos ofrecidos en estos puntos de venta.

Estos elementos, sumados a la libertad de los comerciantes para fijar sus precios, han llevado a que los costos de alimentos y bebidas en el aeropuerto sean significativamente más altos que en otros lugares de Bogotá.

En el pasado, el Aeropuerto El Dorado emitió comunicados para responder a las críticas por los precios en sus instalaciones. Según consignó la terminal, tras la polémica generada por el costoso desayuno reportado en 2023, la administración del aeropuerto aclaró que los locales comerciales dentro de la terminal ofrecen una amplia variedad de marcas nacionales e internacionales, lo que permite a los consumidores elegir productos que se ajusten a sus necesidades y presupuestos.

El comunicado también destacó que todos los establecimientos están obligados a exhibir sus menús y precios en la entrada de los locales, con el objetivo de que los clientes puedan tomar decisiones informadas antes de realizar sus compras.

Además, la administración del aeropuerto, gestionada por la sociedad Opain, subrayó que no tiene injerencia en la fijación de precios de los productos. Según explicó en su declaración, “los tenedores de espacios comerciales del aeropuerto son los únicos encargados de fijar los precios de sus productos sin que pueda existir por parte de Opain injerencia alguna”.