Aprendió karate en Ecatepec, uno de los lugares más peligrosos de México, ahora es una promesa de MMA

David Martínez creció en Ecatepec -una de las ciudades más peligrosas de México– bajo una rígida disciplina inculcada por sus padres. Hijo de maestros de karate, aprendió esa arte marcial desde los dos años, lo que le sirvió para alejarse de las pandillas y grupos delictivos de su barrio, y de paso, convertirse en uno de los grandes prospectos de las Artes Marciales Mixtas de su país.

Tanto a David como a su hermana Melissa les enseñaron desde temprana edad a hacer de sus cuerpos peligrosas máquinas de golpes. Fue en la escuela de karate do de sus papás, Toshinkai Kan de Ecatepec de Morelos que entraron al mundo de las artes marciales, en una localidad donde el 92% de sus habitantes consideran sentirse inseguros, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana de marzo de 2019.

"Ahí donde entrenamos van muy buenas personas y con muchos valores, respeto y disciplina, pero siempre hay bandas, personas que son malas, que quieren llevarte por malos pasos. Pero siempre es la decisión de uno saber para dónde va, como el karate y MMA dan valores que puedes llevar no solo en el arte marcial sino en la vida diaria, entonces eso me ha llevado por un buen camino", dice el peleador de 20 años a Infobae México.

Tanto Mely como él hicieron de la escuela de sus padres -Ricardo Martínez y Raquel Aceves- su segunda casa, saliendo de la escuela era un acto casi religioso asistir al Toshinkai Kan, hábito que lejos de serles tedioso se convirtió en el mejor pretexto para mantenerse unidos como familia y crecer de la mano en el deporte.

"De chiquitos nos peleábamos muchísimo, pero siempre nos hemos querido bastante; nunca nos hemos peleado más de un día, nos enojamos unas horas. Tenemos una amistad muy cercana, somos amigos, confidentes, somos todo mi hermana y yo; somos compañeros de entrenamiento y me ayuda a prepararme y yo le ayudo cuando ella va a pelear y ahorita todo es cotorreo y risas, es un apoyo que nos damos en los entrenamiento", narra entre risas el apodado "Black Spartan".

"Súper Mely" fue la primera de la familia que despuntó en las Artes Marciales Mixtas y fue reclutada por Combate Américas, una de las ligas de mayor crecimiento en este deporte de contacto y donde su éxito fue clave para el arribo de su hermano.

"Mi hermana fue la primera que debutó en la empresa, de ahí me dieron la oportunidad de debutar en Monterrey en abril del año pasado, para mí significó mucho porque mi hermana prácticamente me abrió las puertas para este nuevo reto, una empresa en ascenso, muy grande y que sigue creciendo más y más. Es una responsabilidad grande y quiero dar lo mejor de mí", explica David, quien a los 15 años comenzó a practicar formalmente MMA.

Martínez tiene récord de 2-0, pero el reto de enfrentar en Perú al peleador local William Sánchez, quien hará su debut en esta liga, luce como una afrenta peligrosa de cara a la primera visita de Combate Américas a Sudamérica.

"Es una oportunidad muy grande, es la primera vez que Combate Américas va a tierras tan lejanas, pero es también una gran responsabilidad. Voy a representar a mi país, voy a representar a México en otras tierras y me siento listo para este reto", afirma.

Para ello, Martínez Aceves se prepara tanto física como mentalmente, sabedor de que William es bueno con los pies y es bueno en pelea de piso, pero sobre todo, es un peleador que llegará con hambre de triunfar ante su gente y en su debut en Combate Américas.

"A veces es difícil ir contra el de casa porque normalmente todas las localidades van a apoyar a su representante, pero es un extra que te inyecta no estar en casa, porque a México siempre lo llevamos en el corazón", asegura. "Hemos estado trabajando todas las partes, como tal hemos trabajado jiu-jitsu, lucha, box, kick boxing. En MMA no se puede solo una modalidad entonces el reto de cualquier peleador es ser fuerte en todas las partes. Eso estamos trabajando, fuerte en cada parte".

Pese a que lleva cerca de 18 años familiarizado con deportes de contacto, el nerviosismo sigue siendo uno de sus más grandes enemigos. A pesar de que ha trabajado mucho en el aspecto mental, sabe que el ambiente hostil puede jugarle una mala pasada.

"A mí me dan nervios antes del pesaje, es mi máximo boom de nervios, siento que el corazón se me sale, palpita mucho mi corazón y respiro muy rápido. Debo trabajar mucho mi respiración para que no me gane el nerviosismo, también antes de la pelea me dan nervios, pero eso lo sé manejar un poquito mejor, ya cuando entro a la jaula se van", puntualiza.

Combate Perú se llevará a cabo en el Coliseo Manuel Bonilla en Lima, la capital del país peruano, el próximo 31 de mayo, cuando David Martínez intente demostrar que sus padres hicieron de él una verdadera máquina de las artes marciales hecha en Ecatepec.