Restos óseos encontrados en un caño de Bogotá son de animales y no corresponden a los de la pequeña Sara Sofía

Autoridades llegaron en horas de la tarde a un caño que se ubica en inmediaciones del barrio Tintal y Patio Bonito, tras un reporte de la misma comunidad.

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Unidades del laboratorio móvil de criminalística de la Policía Nacional, Sijín, Policía de Infancia y Adolescencia, llegaron, este miércoles 24 de marzo, hasta un caño en inmediaciones del barrio Tintal y Patio Bonito, donde la comunidad de la zona reportó haber hallado los restos de un menor.

Las autoridades analizaron los restos óseos y aseguraron que son de animales y no corresponden a un cuerpo humano. Según fuentes de la Policía que consultó El Tiempo, “en la zona acordonada se hallaron dos perros muertos y, de momento, no se encontraron restos humanos”, pero en el lugar continúan los agentes en labores de búsqueda.

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Según informaron las autoridades, aunque la búsqueda finalizó en el río Tunjuelito, la investigación continuará haciendo una pesquisa en el río Bogotá y en el Salto del Tequendama, donde, de acuerdo con la Policía, el cuerpo de Sara Sofía pudo haberse desplazado, teniendo en cuenta el amplio margen de tiempo en el presuntamente la menor fue arrojada al cuerpo de agua.

Entre los otros factores por los que las autoridades consideran que el cuerpo de la menor de edad puedo haberse desplazado a tan larga distancia del punto inicial donde supuestamente fue lanzada, esta directamente relacionado con el clima, pues las fuertes lluvias que se han registrado en la ciudad en los últimos días pudieron incrementar las corrientes del afluente de agua, trasladando así a Sara Sofía hasta el río Bogotá o el Salto del Tequendama.

Sin embargo, las autoridades tampoco descartan la posibilidad de que la pequeña Sara Sofía siga con vida, pues la madre de la menor también entregó otra versión. De acuerdo con un comerciante, Carolina Galván le había dicho que había regalado a la niña. “Me dijo que regaló la niña en Patio Bonito, por detrás de la Biblioteca El Tintal. Se la entregó a una de las personas en un carro rojo”, contó el hombre.

Este mismo día la Interpol radicó una circular amarilla en la que deja en manifiesto que la menor de edad también será buscada en territorio extranjero.

“La oficina central de Interpol, en Colombia, acaba de emitir una circular amarilla de búsqueda en todo el mundo; 196 países están siendo notificados para que sus autoridades nos ayuden a encontrar a Sara Sofía. Hay unos países priorizados, que son los fronterizos, en donde estamos pidiendo que se sumen. El objetivo de esta circular es cerrar todos los círculos posibles para ubicarla”, expresó el mayor general, Jorge Vargas.

“Se dan garantías de que la desaparición de la persona ha sido notificada a la policía, de que su paradero es desconocido y de que su anonimato o privacidad no están amparados por ninguna legislación nacional en vigor. En caso de localizarla, tómense las medidas adecuadas de conformidad con las leyes nacionales. Si la persona es adulta, pregúntesele si se puede dar a conocer su domicilio”, reza el apartado de medidas que se deben tomar, de la circular amarilla.

El documento también recopila los datos más importantes del caso de Sara Sofía, mencionando que la madre de la niña, Carolina Galván Cuesta, le solicitó a su hermana, Xiomara —quien tenía la custodia provisional—, que le diera permiso para compartir tiempo con ella, el pasado 15 de enero; petición a la que accedió. Un mes después, le preguntó por el paradero de su sobrina y le confesó que murió y la botó a un caño.

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