Taekwondista asiste a la Basílica de Guadalupe para “jurar” tras no clasificar a París 2024

En un reciente comunicado difundido por Claudia Ruiz, titular de la agencia Atletas MX, se ha expresado una profunda consternación por las decisiones de la Federación Mexicana de Taekwondo que, según sus palabras, han marginado injustamente al taekwondoísta César Rodríguez, impidiéndole competir por un lugar en los próximos Juegos Olímpicos de París 2024.

La controversia se centra en la elección de Brandon Plaza sobre Rodríguez, a pesar de los logros previos de este último, incluyendo una plaza olímpica en Río 2016.

La representante denuncia un sistema de selección que califica de injusto y perjudicial, no solo para la carrera deportiva de Rodríguez, sino también para su salud física y mental.

“Ha subido y bajado de peso muchas veces sin importar el daño al cuerpo”, señaló, reflejando la exigencia y el sacrificio detrás de su preparación. Esta situación se agrava con la revelación de que las disputas por las plazas para los juegos olímpicos han estado marcadas por decisiones cuestionables por parte de la federación y los entrenadores.

Los criterios de selección han sido un tema de debate, ya que Rodríguez fue dejado de lado por una mínima diferencia en el ranking mundial con Plaza, “.17 que tenía en el ranking mundial”, lo que ha levantado cuestionamientos sobre la transparencia y equidad del proceso de selección.

La falta de apoyo y reconocimiento a Rodríguez se vio simbolizada en un evento donde incluso el premio recibido tenía errores en su nombre, un detalle que Ruiz interpreta como una muestra de desconsideración o desconocimiento de sus logros.

A esta polémica se suma la historia de Plaza, quien ha trabajado con la psicóloga Paulina Sánchez frente a problemas personales, incluido el consumo de alcohol, llevándolo incluso a realizar una “manda” en la Basílica de Guadalupe. “Brandon Plaza... perdió en los cuartos de final contra el colombiano Jhon Garrido”, fracaso que se suma a la serie de decisiones cuestionadas alrededor de la selección mexicana de taekwondo.

Más allá del tatami, Ruiz critica la falta de comunicación y consideración humana de los responsables federativos, mencionando específicamente al presidente de la Federación, Raymundo González, y a los entrenadores Alfonso Victoria y David Davis. “A César Rodríguez nunca pudieron darle la cara”, afirmó, evidenciando un trato que considera injusto y despersonalizado hacia el atleta.

La situación de Rodríguez contrasta agudamente con el apoyo recibido por otros deportes dentro del mismo contexto nacional. Ruiz lamenta la diferencia de trato y recursos, mencionando cómo los deportes acuáticos han logrado salir adelante “sin apoyos”, a diferencia del taekwondo, que a pesar de contar con los recursos, enfrenta crisis por decisiones federativas.

Esta situación deja a Carlos Sansores y Daniela Souza como “los dos únicos sobrevivientes del taekwondo en París 2024″, una circunstancia que pone en relieve los desafíos y la dinámica interna del equipo nacional de taekwondo frente a la competencia olímpica. La carta publicada por Ruiz subraya no solo el perjuicio deportivo, sino también el impacto psicológico y emocional en Rodríguez, un daño que considera irreparable y para toda la vida.

Finalmente, es importante destacar que la representante hace una distinción entre sus declaraciones y la postura de César Rodríguez. Asegura que sus opiniones son personales y que Rodríguez, “siempre ha sido un atleta disciplinado y que nunca se ha quejado de las injusticias que vive dentro de su deporte”, una afirmación que refuerza la imagen de Rodríguez como un deportista comprometido y profesional, aun en medio de controversias.