Durante la madrugada del 17 de septiembre de 2025, el Servicio Sismológico Nacional (SSN) registró actividad sísmica en varias regiones del país, aunque la mayoría de los movimientos fueron de baja o moderada magnitud y no se reportaron daños.
El sismo más fuerte ocurrió a las 05:56 horas, con una magnitud de 4.1, ubicado a 76 kilómetros al sureste de Salina Cruz, Oaxaca, y tuvo una profundidad de 7.2 kilómetros. Este temblor fue el de mayor magnitud de la jornada, según el reporte emitido por el SSN.
Antes de este evento, también se detectó otro sismo de 3.9 grados a 108 kilómetros al sureste de Salina Cruz, Oaxaca, a las 04:59 horas, con una profundidad de 16.9 kilómetros. Además, entre la 01:00 y las 06:00 horas, los sensores captaron movimientos de entre 2.0 y 3.9 grados en estados como Chiapas, Guerrero, Colima, Michoacán, Veracruz, Baja California y Jalisco.

Varios de estos sismos fueron superficiales, localizados a profundidades menores a 20 kilómetros, lo que usualmente implica que pueden sentirse en las cercanías del epicentro, principalmente si ocurren en zonas pobladas. Ejemplos de estos movimientos incluyen temblores cerca de Pichucalco, Chiapas (2.5 y 2.1 grados); Tecpan, Guerrero (3.2 grados); y Tecomán, Colima (3.3 grados).
Otros eventos significativos que se reportaron fueron:
Según la información del Servicio Sismológico Nacional, todas las réplicas registradas durante la noche y madrugada estuvieron por debajo de magnitud 4.5, rango en el que rara vez se producen daños materiales.
El reporte detalla también las localizaciones y profundidades exactas de cada evento, lo que facilita el monitoreo por parte de las autoridades de Protección Civil. Los datos se comparten para mantener a la población informada sobre la actividad sísmica diaria y fomentar la cultura de la prevención en zonas de alta sismicidad del país.

Un sismo de 4.1 de magnitud se registró en el municipio de Salina Cruz ubicado en Oaxaca, según informó el Servicio Sismológico Nacional (SSN).
México está ubicado en una zona sísmica, debido a que debajo del territorio nacional se encuentran cinco placas tectónicas: Caribe, Norteamérica, Pacífico, Rivera y Cocos. Por tal motivo, la interacción constante entre estas cinco placas ubican al país en una zona de alta sismicidad.




