Por qué la carrera de Adán Augusto López debería terminar mañana si la 4T tuviera decencia, según Loret de Mola

En su más reciente columna Historias de Reportero, publicada este martes bajo el título “Está saliendo toda la pudrición”, el periodista Carlos Loret de Mola lanza una acusación contundente: Adán Augusto López Hernández, exsecretario de Gobernación y figura clave de Morena, estaría políticamente acabado si la 4T tuviera un ápice de decencia.

La revelación parte de reportes de inteligencia del Ejército mexicano, emitidos desde 2021, cuando Adán Augusto era gobernador de Tabasco. En dichos documentos se señala que Hernán Bermúdez, entonces secretario de Seguridad Pública del estado y hombre de total confianza del gobernador, era en realidad un doble agente: funcionario de día, líder criminal de la organización La Barredora por las noches. Este grupo delictivo estaba involucrado en extorsión, narcotráfico y tráfico de migrantes.

Lejos de ser castigado, Adán Augusto López fue promovido al gabinete federal como secretario de Gobernación y posteriormente como coordinador de Morena en el Senado. Bermúdez, por su parte, fue protegido por un manto de impunidad.

El pasado sábado, el comandante del Ejército en Tabasco, Miguel Ángel López, confirmó que existe una orden de aprehensión contra Hernán Bermúdez, aunque ya habría huido del país y se encontraría en Brasil. Todo apunta a que se le permitió escapar, lo cual compromete aún más a quienes ocuparon los cargos más altos del gobierno tabasqueño y federal en ese periodo.

Según Loret de Mola, si Morena insiste en usar el caso Calderón-García Luna como bandera de lucha anticorrupción, está obligada a reconocer la gravedad del dúo Adán Augusto-Bermúdez, una versión “local” de la misma podredumbre institucional.

Además, señala que los vínculos de Adán Augusto no terminan en ese expediente. La trama de tráfico de influencias y enriquecimiento ilícito en la que también está involucrado el senador y sus allegados suma elementos que lo colocan contra la pared. Sin embargo, el expresidente Andrés Manuel López Obrador no solo no lo sancionó, sino que lo arropó como su “hermano” político, lo impulsó como presidenciable y lo mantuvo al frente de la seguridad nacional.

“Si la 4T fuera decente, Adán Augusto López no tendría vida política a partir de mañana”, insiste el columnista. Pero la realidad es otra: Adán Augusto sigue consolidado como figura dominante en el Senado, repartiendo contratos y colocando a sus operadores políticos en posiciones clave, especialmente con miras a las elecciones estatales de 2027.

Como epílogo demoledor, Loret cita al actual secretario de Gobierno de Tabasco, José Ramiro López Obrador, quien al referirse al caso Bermúdez sentenció: “Ahí está saliendo toda la pudrición… hasta donde tenga que llegar.” La respuesta, dice Loret, está clara: debe llegar al Senado... y al rancho de su hermano en Palenque.