Caitlin Simmers, una surfista estadounidense de 18 años, acaba de inscribir su nombre en los libros de historia del surf al convertirse en la campeona mundial más joven de la World Surf League (WSL). La deportista alcanzó este récord al superar a la campeona reinante, Caroline Marks, en las finales celebradas en Lower Trestles, un conocido punto de surf en el sur de California.
Antes de llegar a la final, Simmers había dominado la temporada de la WSL, consiguiendo tres victorias en el tour, lo que la posicionó como la principal candidata al título, según reseñó CNN.
En la final, Marks comenzó ganando el primer heat con holgura, pero Simmers respondió con dos impresionantes maniobras de nueve puntos en el segundo heat. En la tercera y decisiva ronda, un impresionante recorrido que le otorgó una puntuación de 8.33 fue suficiente para garantizarle la victoria y el campeonato mundial.
Simmers, natural de Oceanside, llegó a este decisivo evento a escasos 20 minutos de su ciudad natal, lo que le dio una ventaja emocional significativa. Al referirse a su triunfo, recordó el esfuerzo y trayectoria que la llevaron a este punto, destacando que desde sus primeros pasos en la competición siempre había aspirado a ser campeona mundial. Según declaró al sitio web de Red Bull, este logro se siente “surreal”.
“Hoy he tenido la suerte de mantenerme en el momento y elegir las mejores olas, y me alegro de haber podido lograrlo y hacerlo. Ha sido un día increíble”, celebró Simmers en declaraciones citadas por CNN.
El formato de las finales de la WSL requiere que los surfistas clasificados en los puestos quinto y cuarto se enfrenten inicialmente, y el ganador avance para competir contra el tercero en el ranking. Esta dinámica continúa hasta que el último competidor desafía al surfista de mayor puntuación de la temporada en una serie al mejor de tres heats, que decide al campeón mundial.
Marks, como segundo sembrado y campeona del mundo en el año anterior, fue quien se ganó el derecho de enfrentarse a Simmers en la gran final. A pesar de su dura competencia, Marks no pudo igualar las últimas maniobras de Simmers, quien mantenía una actitud resuelta, enfocada en surfear de la manera que siempre deseó, sin recurrir a maniobras defensivas.
El reconocimiento de Simmers no se detuvo en alcanzar el título, sino también en romper el récord de la campeona anterior, la cinco veces campeona mundial Carissa Moore, quedando ahora como la ganadora del título mundial más joven.
Al ser consultada sobre su nuevo récord por Red Bull, Simmers mostró respeto y admiración por Moore, destacando su impacto y comparando su relación personal, en términos de camaradería y consejos, con la de una hermana mayor.
“Tuve el privilegio de conocer a Carissa en el último viaje que hicimos, a Tahití. Me lo pasé muy bien con ella, y nos dio muchos consejos a Caroline y a mí. Carissa era un poco como una hermana mayor, fue genial verla súper relajada con nosotras. Sentí que todas estábamos muy cómodas con nosotras mismas y que nos lo pasábamos muy bien entre nosotras”, declaró.
El evento no solo celebró la coronación de Simmers, sino también la victoria en la categoría masculina. John John Florence, de Hawái, alcanzó su tercer campeonato mundial al vencer al brasileño Ítalo Ferreira. Este triunfo reafirma la sólida posición de Florence en el mundo del surf profesional.