

Tenerife, una de las islas más grandes del archipiélago canario, se alza como un destino ideal para cualquier época del año. Sin embargo, durante el verano, es quizá el momento que más turistas recibe gracias a sus encantos únicos. Dominada por el Teide y su impresionante parque natural y secundada por sus playas de agua turquesa y arena fina, esta isla descubre un paisaje natural único en el mundo que es digno de visitar una vez en la vida.
Cuenta, además, con espacios únicos como es la playa de las Teresitas, un arenal situado en San Andrés, al norte de Tenerife, y que emerge como uno de los destinos más emblemáticos y pintorescos de la isla. Con su característica arena dorada, y sus aguas tranquilas y cristalinas, esta playa se diferencia notablemente del resto de playas volcánicas de la isla.
Tanto es así, que este arenal no siempre fue como se conoce hoy. Originalmente, la playa estaba compuesta por arena negra, típica de las playas volcánicas de la isla. En 1973, se llevó a cabo un proyecto ambicioso que implicó la importación de 270.000 toneladas de arena sahariana para transformar su apariencia. Este proyecto también incluyó la construcción de un rompeolas artificial que protege la playa de las corrientes y el oleaje, creando así un espacio de baño seguro y apacible para los visitantes.
Una playa muy familiar

A lo largo de sus 1,3 kilómetros de longitud, el viajero puede disfrutar de una playa ideal para el baño, donde los más pequeños pueden jugar entono a las palmeras y árboles que la adornan. A su vez, cuenta con una serie de servicios que la hacen muy accesible y cómoda para los turistas, incluyendo duchas, baños, bares y restaurantes. Además, hay zonas habilitadas con sombrillas y hamacas que pueden ser alquiladas por quienes buscan un mayor confort.
El entorno de la playa también contribuye a su atractivo. Las Teresitas está rodeada por la vegetación típica de la zona, con palmeras y árboles que proporcionan sombra natural. Además, la proximidad del macizo de Anaga, declarado Reserva de la Biosfera por la UNESCO, añade un trasfondo montañoso espectacular, ofreciendo oportunidades para senderismo y exploración de la naturaleza.
Hay que destacar también el fácil acceso que incluye, ya que está bien conectada por carretera con Santa Cruz de Tenerife, la capital de la isla, y se puede llegar en coche en unos 10 minutos. Además, hay servicios regulares de autobuses que conectan la playa con otros puntos de la isla, facilitando el acceso a aquellos que no disponen de vehículo propio. Para quienes llegan en coche, la playa dispone de amplios aparcamientos gratuitos, lo que facilita la visita incluso en los días de mayor afluencia. Esta accesibilidad contribuye a la popularidad de Las Teresitas, convirtiéndola en una opción preferida tanto para escapadas rápidas como para largas jornadas de descanso.
Cómo llegar
Desde Santa Cruz de Tenerife, el trayecto tiene una duración estimada 15 minutos por la carretera TF-11. Por su parte, desde La Laguna el viaje es de alrededor de 30 minutos por las vías TF-5 y TF-11.
Últimas Noticias
Los castillos más impresionantes de A Coruña: de imponentes fortalezas al borde del mar a murallas que cuentan batallas
Estas construcciones reflejan la importancia militar e histórica de la región

Uno de los mercados de Navidad más bonitos de Europa se encuentra en esta ciudad declarada Patrimonio de la Unesco
El festival de invierno y Navidad de Brujas transforma la ciudad medieval con luces espectaculares, mercados navideños y una pista de patinaje

Este es el pueblo más bonito de Valencia: un castillo árabe a casi 1.000 metros de altura, una iglesia del siglo XIII y rutas de senderismo
La localidad ha sido recientemente incluida en la lista de Los Pueblos más Bonitos de España, siendo la primera de Valencia en obtener este reconocimiento

El mercadillo navideño que parece sacado de un cuento: lleno de nieve y bajo un viaducto en funcionamiento
Este mercado alemán es uno de los más especiales de Europa gracias a su atmósfera única y su ambiente festivo

Estas son las ciudades más estresantes del mundo, según un estudio
Estos destinos se enfrentan a retos donde la masificación turística y la sostenibilidad se convierten en problemas principales




