Aryna Sabalenka, la íntima amiga de Paula Badosa que hace apuestas en sus entrenamientos y le pega más fuerte que Sinner, Djokovic y Alcaraz

El Mutua Madrid Open está a punto de dar el pistoletazo de salida con los partidos de primeras rondas. Un año más, la capital española reunirá a las grandes estrellas del ranking de la ATP y del WTA, quienes tratarán de hacerse con el título madrileño. Aryna Sabalenka, con la corona de mejor jugadora del mundo, luchará por volver a levantar la copa madrileña, esa que ya conoce bien y que ya ha alzado en varias ocasiones al cielo de Madrid. Tras caer en Stuttgart, la bielorrusa aterriza en España con ganas de victoria, aunque para ello puede que tenga que volver a ganar a su íntima amiga, Paula Badosa.

La relación entre Paula y Aryna viene de lejos, cuatro años exactamente. Ambas coincidieron en Los Angeles y desde entonces comenzó su amistad. Una amistad que ni la rivalidad que conlleva la competición ha podido romper. Es habitual verlas juntas por los torneos o por redes sociales. Y es que Paula estuvo al lado de Sabalenka cuando esta pasaba por uno de sus momentos más duros, la muerte de su novio. El pasado 19 de marzo, mientras participaba en el Masters 1000 de Miami, falleció de manera trágica su exnovio Konstantin Koltsov, con quien tenía una relación cercana.

Inicialmente, las autoridades sospecharon que la causa de su muerte podría haber sido un suicidio al caer desde el balcón del edificio donde estaba. Sin embargo, la autopsia confirmó que Koltsov, exjugador de hockey sobre hielo, murió debido a un trombo que afectó un órgano vital. Pese a esta pérdida, Sabalenka ha continuado compitiendo, apoyada por su familia, su equipo técnico y sus amigas más cercanas, incluyendo a la tenista Paula Badosa.

“Ella es una de mis mejores amigas. Ayer hablé mucho con ella. Esta mañana lo mismo. Entonces sé por lo que está pasando. Conozco toda la situación, lo que está pasando”, aseguró entonces la tenista española. A pesar de la situación, Sabalenka no dejó de competir. Y es que, si algo define a la tenista bielorrusa, es que le gusta ganar siempre, incluso en los entrenamientos.

Las apuestas en los entrenamientos y una potencia mayor que la de Alcaraz o Djokovic

La propia Aryna confesó en una ocasión que incluso durante los entrenamientos trata de dar un rendimiento similar al del partido oficial. Para ello, utiliza junto a su entrenador un método poco convencional de apuestas. “Cuando disputo algún set con la tenista frente a la que entreno, mi entrenador y yo nos jugamos dinero”, detalló en una rueda de prensa para sorpresa de los periodistas. “Una vez llegué a perder 5.000 dólares, pero hace poco gané mucho también. Es algo que me ayuda a trasladar la presión de mis partidos a los entrenamientos y prepararme para esas sensaciones”, añadió.

Además, es la tenista que más fuerte le pega a la pelota de toda la WTA. Una potencia que le han ayudado a situarse en lo alto del ranking mundial. “Sabalenka tiene el servicio más potente y la derecha más potente del circuito en este momento”, decía la china Qinwen Zheng. Y razón no le faltaba. Durante el pasado US Open, las estadísticas de la bielorrusa no dejaron a nadie indiferente: era la tenista que más fuerte golpeaba de derecha de todo el torneo, por encima de todas las mujeres y, aquí viene lo sorprendente, también de todos los hombres.

Según los datos, Sabalenka golpea la pelota a 129 kilómetros por hora, mientras que Carlos Alcaraz, el más potente de los hombres, lo hace a 127 km/h; Jannik Sinner, a 126 km/h; y Novak Djokovic, a 122km/h. “He visto esas estadísticas y no me puedo creer que le pegue tan fuerte. Y me siento un poco incómoda estando ahí arriba, golpeando incluso más fuerte que los hombres. Son estadísticas realmente interesantes”, consideró entonces la tenista.

Ahora, con el inicio del Mutua Madrid Open, Sabalenka será de una las favoritas a llevarse el título, solo por detrás de Paula Badosa, que juega en casa. La tenista bielorrusa sabe bien lo que es ganar en Madrid. Lo hizo en 2021 y en 2023 y este 2025, espera volver a levantar la copa al cielo madrileño.