
Marcelo Viera y Clarice Alves forman una de las parejas más consolidadas del mundo deportivo. El futbolista y su mujer llevan juntos más de dos décadas y se conocieron cuando ambos eran tan solo unos adolescentes. A lo largo de los años han conseguido formar una familia, ya que tienen dos hijos en común. A pesar de haber tenido que abandonar su Brasil natal para mudarse a España por el trabajo de Marcelo, estos han conseguido seguir unidos pese a las adversidades.
Ambos se enamoraron siendo muy jóvenes y el mejor amigo de Marcelo fue el principal vínculo de unión, ya que es el hermano de su esposa. El exfutbolista del Real Madrid, hace unos años, contaba en el programa de La noche D de Dani Rovira, cómo surgió la chispa entre ambos. Este decía: “Yo conocí a su hermano cuando teníamos 13-14 años, jugando al fútbol sala en Brasil, en Río de Janeiro. Y entonces mi amigo tenía una hermana que era muy guapa y tal, y yo le pedía ayuda, pero no me ayudaba nada”, en referencia a Clarice.
Poco a poco se fueron conociendo mejor y según cuenta Vieira: “Luego nos fuimos conociendo, nos hicimos muy amigos, vimos que teníamos en común otras cosas, disfrutar de estar juntos pero no como amigos, y ahí fue empezando”. En 2008 Marcelo y Clarice se dieron el “sí, quiero” en Río de Janeiro. Ambos se han apoyado en sus proyectos profesionales de futbolista y de actriz.

Una vida vinculada a la actuación
Clarice Alves siempre ha tenido claro que quería dedicarse al mundo de la actuación. Perseguir sus sueños ha dado resultado, ya que a lo largo de los últimos años se ha convertido en una actriz muy reconocida en Brasil, su país natal. A pesar de que desde 2006 ha vivido en España junto a su familia, la artista ha viajado cuanto ha sido necesario para poder seguir sumando proyectos a su carrera profesional.
Desde muy joven actuaba en obras de teatro y a día de hoy ha participado en cortometrajes y largometrajes como en la película Urubú, dirigida por Alejandro Ibáñez. Comenzó cuando tenía tan solo 12 años, formando así parte de la Casa e Companhia de Artes Avancini donde estuvo hasta los 17 años. Asimismo, aunque no dejó su pasión de lado, es graduada en Asesoría de Imagen Personal.
Una vida discreta
A pesar de que su marido Marcelo sea un deportista muy reconocido a nivel internacional, ella y su familia siempre han intentado llevar una vida tranquila y discreta. Dejando sus asuntos más privados en un discreto segundo plano, la brasileña cuenta con más de 700 mil seguidores en redes sociales, donde comparte sus proyectos, momentos familiares y las fotografías de portadas de medios de comunicación para los que posa.

En su visita al programa de Rovira en Televisión Española, Clarice también confesó que en la capital española ella y Marcelo siempre han hecho vida normal: “Hacemos de todo. Con los niños vamos al cole, de paseo, vamos al parque, vida normal y corriente. No dejamos de hacer nada. La verdad es que vamos por el centro, hacemos de todo. Con nuestros perros salimos un montón”.
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