Un camarero cuenta el caso de una familia con padres y abuelos que se fue sin pagar de un bar: “El niño de 9 años se asomaba a la puerta para proponer salir corriendo”

En estas situaciones, la policía no tiene la autoridad para exigir que el cliente pague en el momento, pero sí puede actuar conforme a la ley

Guardar
Una familia de seis personas
Una familia de seis personas hizo un "simpa" después de comer en un bar.

Irse sin pagar de un bar o restaurante, acuñado en la jerga coloquial como “hacer un simpa, es una práctica más habitual de lo que uno puede pensar. Y es que más allá de una broma de adolescentes que se van sin pagar la Coca-Cola, en ocasiones, esta práctica cruza límites para nada agradables para los camareros y trabajadores de la hostelería. Testigo de ello es la cuenta de TikTok de @eldel_barr.

Dicho perfil comparte historias y anécdotas “que nos pasan en los bares con un toque de humor”. En uno de ellos, explican uno de los casos de simpa más sonados con que se han encontrado hecho por una familia completa de seis personas. “Había una pareja, un matrimonio, con dos niños; uno de más o menos 8-9 años y una niña de dos años en un carrito”. A estos cuatro, se le sumaban los abuelos, “los papás de uno de los dos adultos”.

Después de comer, cuando llegó la hora de pagar la cuenta, el niño “se compinchó con sus padres o sus abuelos” y asomándose a la puerta, esperó el momento ideal en que los trabajadores estuvieran distraídos para avisar a los adultos: “ya, ya, es el momento de irnos”. Ahí, la familia entera se levantó y salió corriendo, dejando la cuenta de la comida sin pagar.

Según explican desde @eldel_barr, este nivel de detalle lo conocen gracias al resto de clientes que había sentados alrededor, quienes quedaron sorprendidos frente a estos inusuales hechos. El propietario de este bar salió corriendo detrás de la familia, pero llegó un punto en que pensó “para qué voy a seguir corriendo si aunque los pille y llame a la policía no va a pasar absolutamente nada”. De esta forma, la familia se salió con la suya dejando la cuenta al descubierto.

En estas situaciones, la policía no tiene la autoridad para exigir que el cliente pague en el momento, pero sí puede actuar conforme a la ley. Sin embargo, emprender acciones legales por la cuantía que suele suponer este tipo de delitos, no es rentable para el establecimiento, ya que el tiempo y gastos derivados del proceso pueden ser superiores a los beneficios del pago de la factura.

La ley sobre el <i>simpa</i>

En España, la práctica del simpa puede ser sancionada en base al Código Penal, puesto que se considera un delito de apropiación indebida o estafa, dependiendo de las circunstancias del caso. En términos legales, el simpa implica el hecho de disfrutar de un servicio o producto sin abonar el precio correspondiente, lo cual está tipificado como una infracción contra el patrimonio.

Cuánto cuesta comer en el restaurante de Arguiñano: todo el mundo dice lo mismo sobre el precio.

En el caso de identificar a los clientes responsables del simpa y llevar a cabo la denuncia, según el Código Penal, podría tener consecuencias graves para los infractores. Si la cuenta no excede los 400 euros, la pena consistiría en el pago de una multa económica. En cambio, si la cuenta supera los 400 euros, el hecho se consideraría un delito grave de estafa, lo que podría llegar a acarrear penas de prisión.