Las reservas internacionales brutas del Banco Central disminuyeron en USD 220 millones, a USD 40.356 millones, con la incidencia de la baja del oro (-1,3%) y del yuan chino (-0,2%) respecto del dólar norteamericano.
Los contratos de dólar futuro concluyeron con bajas generalizadas en un rango de 0,5% a 1,4%, según datos de la plataforma A3 Mercados. Los contratos más operados fueron los de menor plazo. Para fin de julio finalizó a $1.266,50 (baja de 6,50 pesos o 0,5%) y para fin de agosto quedó a $1.305,50 (baja de 8,50 pesos o 0,7%).
El interés abierto en esta plaza -que opera en pesos en base a la evolución del tipo de cambio oficial- alcanzó un nuevo récord en la era Milei de 6.595,2 millones de dólares.
En una jornada estable para el dólar en general, la cotización blue terminó sin cambios a $1.310 para la venta, tras operaciones a un máximo de $1.315 por la mañana. Con un dólar mayorista a $1.258,50, la brecha cambiaria se ubicó en el 4,1 por ciento.
El dólar minorista finalizó sin variantes a $1.275 para la venta en el Banco Nación, El Banco Central informó que en el promedio de entidades financieras el dólar al público terminó a $1.277,43 para la venta (baja de 89 centavos) y a $1.232,51 para la compra.
En una ronda de negocios con USD 410,8 millones en el segmento de contado, el dólar mayorista ganó dos pesos o 0,2% este miércoles, a $1.258,50 para la venta. El tipo de cambio oficial mantiene un ascenso de 53,50 pesos o un 4,4 por ciento.

El mercado de futuros de dólar alcanzó en las últimas jornadas una marca inédita para la administración de Javier Milei. El interés abierto -la cantidad de posiciones abiertas en esa plaza- creció hasta superar los 6,5 millones de contratos, un reflejo de la inquietud por la volatilidad cambiaria y el rol más activo del Banco Central de la República Argentina (BCRA) en este segmento, en medio de un mercado todavía agitado tras el accidentado fin de las LEFI que sacudió al dólar oficial.
El precio del dólar mayorista sumaba 5,50 pesos o un 0,4%, a 1.262 pesos. El billete mayorista se mantiene lejos del reciente máximo intradiario de 1.295 pesos. A lo largo de julio el tipo de cambio oficial gana 57 pesos o 4,7 por ciento.

Desde mediados de 2020, los avisos de alquileres publicados en dólares en la Ciudad de Buenos Aires comenzaron a ganar terreno y alcanzaron su punto máximo en diciembre de 2023, cuando la espiral inflacionaria dificultaba establecer precios. Sin embargo, esta tendencia empezó a revertirse e impacta en los niveles de demanda.

La liquidación final de divisas del agro para aprovechar la baja temporal de retenciones gatilló una importante caída del tipo de cambio oficial, que pasó ayer de $1.300 a $1.275, una caída de 1,4%. Los dólares financieros también operaron en baja y cerraron incluso debajo de estos niveles.

El mercado mira a los bancos. Los culpan de la falta de liquidez por sobrecomprarse en la licitación de Bonos del Tesoro. Tras la liquidación del viernes —tuvieron que pagar las LECAP y BONCAP que adquirieron el miércoles— se encontraron con falta de pesos y salieron a prestarse entre sí a supertasas a un día. Se enrareció el sistema y ayer parece haber llegado el fin de la historia, porque se deshicieron de dólares para hacerse de pesos y en la plaza de bonos aparecieron compradores que hicieron subir los precios de las LECAP y BONCAP, lo que permite que bajen sus tasas. A mayor precio, menor tasa. Hoy el mercado debería operar aliviado en este sector, pero sigue existiendo el riesgo político, así que la anormalidad va a ser cotidiana.


