El blanqueo que acumula cada día más dólares y el crecimiento de los depósitos en pesos trajeron euforia al mercado

Con los ánimos calmados y el índice de menores subsidios por desempleo a la vista, los inversores mejoraron su percepción sobre las declaraciones del titular de la Reserva Federal, Jerome Powell, que señaló que el recorte de tasas fue profundo para alejar los riesgos de una recesión. Las Bolsas de Nueva York y del mundo se contagiaron de la euforia. No hubo rojos en los mercados del planeta.

Lo mismo sucedió en los países emergentes y la Argentina no fue la excepción. Ahora por delante queda saber si la baja de tasas norteamericanos desde ahora hasta fin de año será de 0,50% o 0,75%.

Los inversores ignoraron que los bonos del Tesoro norteamericano tuvieron una fuerte caída que elevó su tasa de retorno a 3,74% desde 3,68% anterior y 3,60% del martes. Este aumento de tasa de los bonos considerados los más seguros del planeta, todavía no impactó negativamente en los bonos del mundo.

La Argentina profundizó la leve alza del día anterior y los grandes ganadores fueron los bonos soberanos con precios en los títulos de referencia que están cada vez más cerca de 60% y tuvieron suerte dispar. El AL30D con legislación argentina aumentó 0,76%, pero el AL35D subió 2,26%. El Global 2030, que se rige por los tribunales de Nueva York, subió 1,49% y la joya de la corona, el Global 2035, 2,11%. La generalizada suba de los títulos de la deuda derrumbó el riesgo país en 62 unidades (-4,5%) a 1.301 puntos básicos, el nivel más bajo desde que asumió el nuevo Gobierno.

Pero como todo subió y bajó al mismo tiempo, no se sabe quien contagió a quién. Ante la suba de los bonos soberanos, sucedió lo lógico, bajó el dólar. Lo que nadie imaginó es que la magnitud de la caída iba a llevar al MEP a perforar el piso de los $1.200 y comenzaron a aparecer esperanzas de una convergencia con el oficial que ponga fin al cepo. De hecho, hubo dos medidas que lo aliviaron. Se permitirá operar valores negociables, (bonos en dólares o cable) a los que hayan tomado los dólares para comprarlos mediante caución. Además, se elimina el preaviso a la Comisión Nacional de Valores (CNV) por operaciones de compra y venta mayores de USD 200 millones en el CCL.

En este escenario, el MEP perdió $8,98 (-0,7%) y cerró en $1.197,74. El contado con liquidación (CCL) bajó $15,46 (-1,25%) a $1.217,79. El “blue” sorprendió con una caída de $20 (-1,6%) a $1.240 y es el dólar más caro. La brecha ahora está en 27,5%.

Según el trader Nicolás Cappella de Invertir en Bolsa “en la práctica, no debería tener mucha injerencia, ya que las empresas que querían operar por montos grandes, enviaban la nota a CNV y listo. Pero como dijimos, se festeja la desregulación”.

Pero la verdad sea dicha. La columna que sostiene la euforia es el blanqueo que hace lucir más a las buenas noticias como fue el caso de los superávit gemelos (fiscal y comercial) de agosto, al tiempo que siguen llegando novedades de aumento de los depósitos en pesos y dólares y la apertura de nuevas cuentas para blanquear divisas. En una semana los depósitos en moneda local crecieron más de $2,4 billones y los depósitos en dólares aumentaron USD 382 millones en un día por el blanqueo.

Por ahora es un círculo virtuoso porque está haciendo bajar las tasas de los bonos emitidos en dólares por las empresas. Si el riesgo país baja algo más, al Gobierno se le abre la posibilidad de captar dólares con un bono de corto plazo y tiene una excelente oportunidad para liberarse del cepo. No puede desaprovechar esta renovación del voto de fe.

El informe de la consultora F2 de Andrés Reschini señaló que mientras el dólar tuvo una leve baja frente a las 6 principales monedas del mundo “Brasil sigue sólido y tras la suba de tasa SELIC el real continuó apreciándose y el peso argentino mostró un comportamiento similar”.

En tanto en el Mercado Libre de Cambios (MLC) se operaron USD 317 millones, un monto considerable, y el Banco Central compro USD 34 millones. Las reservas subieron USD 116 millones por el ingreso de dólares a los bancos y están en USD 27.129 millones. La de ayer fue la cuarta rueda consecutivas de compras. Si el BCRA comprara hoy USD 45 millones quedaría saldado su déficit en el MLC.

F2 señala que “los futuros ajustaron con mayoría de bajas, aunque la más profunda fue de 0,25%. Las tasas implícitas no dejaron diferencias relevantes respecto a la rueda previa y siguen despegadas por debajo de la curva de rendimientos de LECAP”.

Las LECAP tuvieron alzas de 0,18% en los plazos más cortos y de 0,3% en los más largos que rinden hasta 4%. Los bonos CER siguen con poca demanda y con precios de ocasión que muestran tasas de retorno de 10% en los más cortos que tientan a recomprarlos.

La Bolsa, por supuesto, adhirió a la euforia. Los negocios alcanzaron a más de $60 mil millones. El Merval de las acciones líderes aumentó 1,76% y se destacó Telecom con un aumento de 5,80%, seguido de Banco Macro con 3,80% y Pampa Energía con 3,40%.

Los ADR -certificados de tenencia de acciones argentinas que cotizan en las Bolsas de Nueva York- tuvieron una rueda verde. Acá Telecom subió 6,6% y Banco Macro, 5,6%.

Para hoy se espera que continue el ritmo de subas, pero con más cautela aunque las recomendaciones de la mayoría de los analistas es “comprar” cuando se trata de bonos y acciones.