La ONU advirtió del impacto “potencialmente grave” del regreso de trabajadores migrantes a sus países

Esta situación pone a los gobiernos, especialmente los de Asia y África

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Migrantes esperan un tren en India. REUTERS/Amit Dave/File Photo
Migrantes esperan un tren en India. REUTERS/Amit Dave/File Photo

La Organización Internacional del Trabajo (OIT) ha advertido este miércoles de que el regreso de los trabajadores migrantes a sus países de origen en un “lapso breve de tiempo” puede tener un impacto social y económico “potencialmente grave” en el marco de la pandemia de la COVID-19.

El organismo, que ha hecho hincapié en la necesidad de reintegrar a las personas que vuelven en el mercado laboral de sus países de origen, estima que “decenas de millones de trabajadores migrantes” de países de ingresos bajos y medianos que han perdido su empleo durante la pandemia del coronavirus se ven forzados a regresar a sus hogares.

Esta situación pone a los gobiernos, especialmente los de Asia y África, “en alerta”. Además, la situación de los mercados laborales de estos países ya era “frágil” antes del coronavirus.

“Una crisis potencial dentro de otra crisis”, ha zanjado la directora del Departamento de Condiciones de Trabajo e Igualdad de la OIT, Manuela Tomei, que ha insistido en que el regreso de estas personas se produce en países que “ya están lidiando con una economía débil y un desempleo creciente”.

Así, una de las principales preocupaciones de la OIT es la “limitada” capacidad de estos países para reintegrar a un elevado número de personas, ya que “a menudo no cuentan con políticas y sistemas que garanticen una gobernanza eficaz de la migración laboral y planes de reincorporación sin tropiezos, incluso para el perfeccionamiento y el reconocimiento de las competencias laborales”.

Migrantes en Italia.  Laila Sieber/Sea Watch/Handout via REUTERS
Migrantes en Italia. Laila Sieber/Sea Watch/Handout via REUTERS

Asimismo, la OIT se ha mostrado “preocupada” por la falta de protección social y los escasos recursos materiales de los migrantes atrapados en los países de acogida, lo que les impide comprar alimentos o alojarse. También ha puesto el foco en la falta de distanciamiento físico si viven en espacios reducidos.

El organismo de la ONU calcula que hay 164 millones de trabajadores migrantes repartidos por todo el mundo. Casi la mitad de ellos son mujeres y el total representa el 4,7 por ciento de la fuerza de trabajo mundial.

No obstante, también ha destacado que el regreso de los trabajadores migrantes puede conllevar aspectos positivos, ya que traen competencias o talentos que pueden servir de ayuda para recuperar las economías de sus países de origen.

Estos migrantes traerán consigo talentos y nuevas competencias laborales, y en algunos casos capital, que podrán dar apoyo a los esfuerzos que se realicen en sus países de origen con miras a una mejor recuperación”, ha valorado la responsable del Departamento de Migración Laboral de la OIT, Michelle Leighton. “Debemos ayudar a estos países a aprovechar la oportunidad”, ha añadido.

A juicio del organismo, la clave para liberar este potencial es el establecimiento de sistemas de retorno e integración ordenados y basados en los derechos, el acceso a la protección social y el reconocimiento adecuado de las calificaciones.

En este sentido, las ayudas a la reintegración también servirían para reducir las tensiones en las comunidades en las que se teme que los migrantes sean portadores del virus o se les percibe como una amenaza precisamente por la posible competencia con los trabajadores locales.

Con información de Europa Press

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