La CDMX se convirtió en la segunda ciudad más cara para vivir en América Latina

De acuerdo con el Global Wealth and Lifestyle Report 2022, los bienes y servicios se encarecieron 7.5 por ciento en el lapso de un año

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Vista elevada de los modernos edificios de Paseo de la Reforma y Polanco (Getty Images)
Vista elevada de los modernos edificios de Paseo de la Reforma y Polanco (Getty Images)

La Ciudad de México es la segunda urbe donde es más caro vivir en América Latina, de acuerdo con el Global Wealth and Lifestyle Report 2022 de Julius Baer.

En este informe se analizó, entre abril de 2021 y abril de 2022, los estilos de vida de las personas con alto poder adquisitivo (más de un millón de dólares al año) en todo el mundo, utilizando una cesta de bienes y servicios que refleja sus patrones de consumo.

En este sentido, la CDMX pasó del puesto número 23 al 22 en el ranking mundial. Esto significa que los bienes y servicios se encarecieron 7.5 por ciento en el lapso de un año.

Por ejemplo, el 75 por ciento de los artículos medidos por la compañía aumentó su etiqueta, pero el fenómeno fue más notable en artículos tecnológicos, donde se disparó 64 por ciento, mientras que el de un coche cayó 31 por ciento.

Volatilidad en los bienes y servicios en CDMX (Captura de pantalla: juliusbaer)
Volatilidad en los bienes y servicios en CDMX (Captura de pantalla: juliusbaer)

La joyería también redujo su etiqueta con una caída del 1.6 por ciento, pero los bolsos de mujer aumentaron sus precios lo aumentó 9 por ciento; el calzado femenino subió 13 por ciento y los trajes de hombre engordaron su etiqueta 5 por ciento.

Además, los servicios de abogacía aumentaron 46 por ciento.

“El incremento de los costes de vida ha causado que los más ricos se planteen sus hábitos de consumo y sus prioridades. En un escenario de incertidumbre, la gente valora cada vez más las experiencias y las conexiones personales frente a las posesiones, y la pandemia ha intensificado el interés por la salud, el bienestar y la seguridad financiera”

Cabe mencionar que la ciudad más costosa para vivir en la región es Sao Paulo, Brasil, que se catapultó nueve puestos, quedando en la posición 12.

Vista de Sao Paulo, Brasil (Foto: Reuters)
Vista de Sao Paulo, Brasil (Foto: Reuters)

No hubo otra ciudad mexicana que apareciera en la lista de 25 urbes.

El oro se lo llevó Shanghái, China, igual que en el informe de 2021, pero es una de las pocas ciudades que no ha modificado su puesto este año. Y es que Londres, Inglaterra, ha escalado seis puestos, hasta situarse en la plata; mientras que Tokio, Japón, se ha desplomado otros seis números, hasta el octavo, principalmente a causa de la debilidad del yen.

A pesar de los cambios, Asia continúa siendo el continente con más peso en el ranking y América no figura entre el top 10 del mundo. Nueva York, Estados Unidos, apareció en el lugar 11.

Así es como quedó el ranking completo:

Shanghái, el centro financiero de China (Foto: Reuters)
Shanghái, el centro financiero de China (Foto: Reuters)
  1. Shanghái (China)
  2. Londres (Inglaterra)
  3. Taipéi (Taiwán)
  4. Hong Kong
  5. Singapur
  6. Mónaco
  7. Zúrich (Suiza)
  8. Tokio (Japón)
  9. Sídney (Australia)
  10. París (Francia)
  11. Nueva York (Estados Unidos)
  12. Sao Paulo (Brasil)
  13. Milán (Italia)
  14. Dubái (EAU)
  15. Bangkok (Tailandia)
  16. Barcelona (España)
  17. Fráncfort (Alemania)
  18. Miami (EEUU)
  19. Yakarta (Indonesia)
  20. Vancouver (Canadá)
  21. Manila (Filipinas)
  22. Ciudad de México (México)
  23. Johannesburgo (Sudáfrica)
  24. Bombay (India)

El reto de adquirir una vivienda en la CDMX

Interior de un departamento en colonia La Nopalera, en la alcaldía Tláhuac (Foto: Cuartoscuro)
Interior de un departamento en colonia La Nopalera, en la alcaldía Tláhuac (Foto: Cuartoscuro)

Para millones de capitalinos, comprar una casa o un departamento en la CDMX es un sueño inalcanzable debido a que el costo de las propiedades es muy alto y los salarios no aumentan.

La gente se ve obligada a rentar, lo cual es cada vez más difícil porque muchos arrendatarios ponen requisitos casi imposibles de cumplir para un ciudadano común y porque es necesario invertir casi la mitad del sueldo, cuando la ONU-Habitat estima que los gastos relacionados con la vivienda no deberían superar el 30 por ciento.

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