Estudiante de la UACJ murió víctima de un atentado; la universidad exigió una investigación

Por más de 10 días José Alejandro se debatió entre la vida y la muerte

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Los familiares de José Alejandro señalaron que no saben cuál pudo ser el motivo de la agresión (Foto: Especial)
Los familiares de José Alejandro señalaron que no saben cuál pudo ser el motivo de la agresión (Foto: Especial)

Las aspiraciones de José Alejandro Quiñones, un estudiante de Ingeniería Industrial del Instituto de Ingeniería y Tecnología (IIT) de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez (UACJ), fueron eclipsadas tras un atentado que lo condujo hasta su muerte. Sus familiares, amigos, compañeros y la universidad han lamentado su deceso y exigido acción por parte de las autoridades para castigar a los responsables.

Los hechos ocurrieron la noche del pasado 10 de julio, cuando el estudiante de Ingeniería fue sorprendido en su negocio por un delincuente que portaba un arma de fuego. El sujeto presuntamente le habría exigido que le entregara sus pertenencias. En el acto, José Alejandro fue agredido con el arma, recibiendo un balazo en el estómago, por lo que tuvo que ser llevado a urgencias hasta el Hospital 35 del Seguro Social.

Allí fue internado en terapia intensiva para ser tratado. Unos días después sus familiares recurrieron a redes sociales para pedir donadores de sangre O negativo para el joven.

Los interesados se comunicaron con la madre y hermana del joven a través de algunos números telefónicos que dejaron públicos, pues hasta el 13 de julio se encontraba delicado.

La UACJ lamentó los hechos ocurridos y exigió a las autoridades a realizar investigaciones (Foto: Captura de pantalla)
La UACJ lamentó los hechos ocurridos y exigió a las autoridades a realizar investigaciones (Foto: Captura de pantalla)

“Mi hermano sigue en terapia intensiva, pero es fuerte y está luchando por su vida. Les pedimos que lo tengan presente en sus pensamientos y oraciones y esperamos pronto poder compartirles buenas noticias”, escribió su hermana Nadia en redes sociales el 19 de julio.

Sin embargo, tras varios días debatiéndose entre la vida y la muerte, José Alejandro, de 24 años de edad, falleció. El desafortunado suceso ocurrió en terapia intensiva el pasado 20 de julio.

La familia señaló desconocer el motivo de la agresión, por lo que apuntan a que simplemente el joven estudiante estaba en el lugar y momento equivocado.

Esta tarde, la UACJ emitió un comunicado en sus redes sociales lamentando el hecho e instando a las autoridades a realizar la investigación correspondiente para detener y sancionar a los responsables de la violenta muerte del joven.

“Lamentamos la muerte violenta del estudiante José Alejandro Quiñones Nevárez. Un abrazo solidario a su familia. La UACJ insiste ante las autoridades para que realicen una investigación clara que lleve a sancionar a los responsables”, escribió la universidad a la que pertenecía José Alejandro.

En el municipio de Ciudad Juárez, Chihuahua, ha habido un repunte de violencia en los últimos años (Foto: Reuters)
En el municipio de Ciudad Juárez, Chihuahua, ha habido un repunte de violencia en los últimos años (Foto: Reuters)

En tres horas, la publicación en Facebook recibió más de mil reacciones, fue compartida 67 veces y recibió varios comentarios, entre los que se puede leer a algunos de sus compañeros y conocidos lamentando lo ocurrido.

De acuerdo con datos del pasado enero, el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), la violencia en el municipio fronterizo de Ciudad Juárez, en los últimos años, ha registrado un repunte en los casos de homicidio doloso.

De enero a noviembre del 2015 se abrieron 247 carpetas de investigación. Para los primeros 11 meses del 2016 se registraron 421 carpetas de investigación; para el mismo periodo del 2019 se contabilizaron 1,195 averiguaciones por homicidio.

Además, en marzo de este año se registraron 159 asesinatos, 175 en abril y 108 hasta el pasado 20 de mayo. Se estima que en esa ciudad hay más de 100,000 consumidores de drogas ilegales y más de 20,000 adictos, lo que la convierte en una zona prolífica para el narcomenudeo.

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