Por el coronavirus, el subte de Nueva York dejará de prestar su servicio durante todo el día por primera vez en la historia

Estará cerradp entre la 1 y las 5 de la mañana para ser desinfectado. Se presume que la medida será temporal pero la fecha de reapertura es una incógnita hasta el momento

Compartir
Compartir articulo
El subterráneo de Nueva York. Foto: REUTERS/Lucas Jackson
El subterráneo de Nueva York. Foto: REUTERS/Lucas Jackson

Que la pandemia de coronavirus ha alterado la vida de la ciudad de Nueva York es innegable, pero que la nueva víctima del COVID-19 iba a ser el hasta ahora intocable subterráneo ha resultado una sorpresa para muchos.

En su conferencia de prensa diaria, el Gobernador Andrew Cuomo anunció que a partir del próximo miércoles 6 de mayo, el medio de transporte estará cerrado entre la 1 y las 5 de la mañana. El cierre se presume será temporal pero la fecha de reapertura es una incógnita hasta el momento. Es la primera vez en la historia que este emblemático medio de transporte no funcionará las 24 horas los 7 días de la semana por un período prolongado de tiempo en la historia. Ni siquiera después de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001, con el radical cambio en los controles de seguridad, se había tomado esta decisión.

Cuomo se sumó con su anuncio a un pedido hecho a comienzos de semana por el alcalde de la ciudad de Nueva York, Bill de Blassio, quien declaró que la higiene del subterráneo era su mayor preocupación para combatir la transmisión del virus. Según explicó Cuomo, estas cuatro horas diarias le permitirán a los empleados del sistema de transporte desinfectar todos los vagones. De lo contrario, hasta ahora, la desinfección profunda podía hacerse solo cada 72 horas.

“Sabemos que el virus puede vivir hasta por días en las superficies, por eso combatirlo a diario es vital en esta lucha”, explicaba Cuomo.

El gobernador del estado de Nueva York, Andrew Cuomo. Foto: REUTERS/Mike Segar
El gobernador del estado de Nueva York, Andrew Cuomo. Foto: REUTERS/Mike Segar

Los trenes subterráneos son el principal medio de transporte en la ciudad de Nueva York. Antes de la pandemia, 5 millones y medio de personas lo usaban a diario. Con las limitaciones para salir de los hogares, la cifra de quienes usan este transporte se redujo un 90 por ciento, pero que aún da la importante suma de 450 mil viajantes por día. Se calcula que unas once mil personas viajan en estos trenes durante la madrugada. Para ellos pondrán a disposición autobuses y camionetas.

La limpieza de los vagones no sólo es necesaria por los pasajeros, sino también por los empleados. El sistema de transporte, que combina subterráneos y autobuses, emplea a 55 mil personas. Hasta el jueves, 96 de ellos fallecieron a consecuencia del COVID19.

Otro problema asociado al cierre de los subterráneos es el de los desamparados. Centenares de personas sin hogar se albergan en los pasillos de las estaciones durante la noche. Para la limpieza profunda deben sacarlos. La ciudad ofrece albergues, pero la mayoría de estos refugios no tienen la capacidad de ofrecer espacio para el distanciamiento social.

Algunas fundaciones de protección de los desamparados ya han comenzado una campaña para pedir que se encuentre otra solución para las personas sin hogar.

Según las declaraciones del Gobernador, la intención es reestablecer el servicio normal apenas se solucione el problema de la pandemia. Pero como no hay una fecha en el corto plazo para pensar en superar la crisis, algunos temen que el servicio cortado pase a ser una nueva realidad.

En redes sociales se está divulgando un correo electrónico de uno de los miembros de la Autoridad Metropolitana de Transporte de Nueva York, Andrew Albert, que se filtró de una conversación privada, donde se queja por haberse enterada por televisión del cierre. Además, Albert esboza la teoría de que esta medida es la excusa que los políticos buscaban hace años para ahorrar en transporte público y dar un servicio más limitado.

Más sobre este tema: