Bernie Sanders: “Ganarle a Biden va a ser un camino difícil”

Reapareció Bernie Sanders. Con las campañas prácticamente paralizadas por la crisis desatada por la pandemia del coronavirus, el contendiente demócrata a la Casa Blanca había estado fuera del ojo público por varios días. A raíz de la diferencia que Joe Biden le ha sacado en número de delegados (1153 contra 861), y considerando que el panorama político está complicado con postergaciones de las elecciones primarias en varios Estados, la presión para que Sanders cancele su campaña crece a cada hora. Varios miembros de su equipo habían negado que Sanders estuviera considerando renunciar, pero recién hoy lo escuchamos de su boca.

En entrevista con la radio pública nacional, el social-demócrata afirmó que su campaña sigue firme y reinventándose para ser prácticamente en su totalidad digital. Sin la posibilidad de hacer eventos masivos, ni de sacar a sus colaboradores a tocar puertas para hablar con votantes, o de realizar elegantes encuentros de recaudación de fondos, las campañas se han reducido a foros digitales y entrevistas por video-llamada. Bernie Sanders dijo estar adaptándose a los tiempos que corren y dispuesto a hacer los cambios que hagan falta. Sin embargo, reconoció que no tiene una pelea fácil. “Por delante tenemos un camino complicado para ganarle a Biden”, aseguró.

El candidato también se refirió al posible debate demócrata del mes de abril. Ayer escuchábamos a Biden decir que cree que ya hubo suficientes debates, pero Sanders tiene otra idea. Según el Senador por Vermont, en medio de la crisis sanitaria y económica que enfrenta el país por el coronavirus, “hoy más que nunca necesitamos debates serios acerca de temas de enorme importancia”. La última palabra al respecto del encuentro entre los candidatos la tendrá el comité nacional del Partido Demócrata, que hasta ahora no se ha pronunciado al respecto.

Sanders también contó que buena parte de los esfuerzos de su campaña están puestos en la primaria de Nueva York, que será el 28 de abril. El Estado es el más afectado por la crisis del coronavirus, y Bernie Sanders cree que su campaña puede aportar un punto de vista diferente a la difícil situación.

Otra batalla que parecería estar perdiendo Sanders es la del apoyo de los sindicatos. Cuatro años atrás, Sanders consiguió que varios sindicatos poderosos (que tradicionalmente apoyan al Partido Demócrata) se alinearan a él en lugar de seguir a Hillary Clinton. Hoy la situación es otra. La popular Asociación Nacional de Educadores, los Trabajadores de Comercio e Industria de la Comida, la Federación Americana de Maestros y el sindicato de Trabajadores Públicos Federales, Estatales y Municipales ya se sumaron a las filas de Joe Biden. Estos son cuatro de los más grandes y poderosos sindicatos del país. En circunstancias normales su apoyo implicaría eventos llenos de gente vitoreando el nombre del candidato. Hoy, el apoyo se traduce en una espalda virtual importante a la que se suman conocidas voces en los medios de comunicación hablando a favor de Biden.

El Presidente de la Asociación de Trabajadores Públicos, Randi Weingarten, metió presión a Sanders declarando que cree que el Senador siempre ha sido una persona inteligente que va a entender que Joe Biden se ha ganado la nominación demócrata. Más allá de la dureza de las palabras de este líder sindical, el hecho de que los representantes de los trabajadores no estén con Sanders deja sin validez a uno de los argumentos principales del Senador, que siempre se ha presentado como la voz de los trabajadores.

De todas maneras, si hay algo que Bernie Sanders ha demostrado en los últimos 30 años que lleva en la política es que las cosas las hace a su manera. Y, al menos hoy, fue claro: piensa seguir adelante con la contienda aunque sabe que no lleva las de ganar.

MÁS SOBRE ESTE TEMA: