Los extraños gestos de fastidio de Mbappé en plena goleada del PSG que se hicieron virales

El delantero francés, que falló un penal, tampoco festejó su gol ante el Montpellier

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El delantero se molestó al no recibir un pase de un compañero

Este sábado Kylian Mbappé se mostró inusualmente fastidioso en la goleada del París Saint-Germain (PSG) por 5-2 ante el Montpellier. El delantero, autor de uno de los tantos, fue tendencia en las redes sociales después de que terminó el partido por una imagen suya que se hizo viral y que expuso su malestar en el campo de juego.

Cerca del final de la primera mitad, Vitinha encabezó un contragolpe por el centro del campo y en lugar de abrir a la izquierda para Kiki, optó por continuar su carrera hacia el otro lado. Al notar eso, el número 7 frenó, se dio vuelta e hizo un claro gesto de enojo con su brazo. Evidentemente, él entendía que la jugada debía continuar por su lado.

Cabe señalar que Mbappé falló un penal y luego, en el segundo tiempo, cuando marcó el 4-1 parcial no lo gritó. Sus compañeros corrieron a abrazarlo, pero el Joven Maravilla agachó la cabeza, en otro gesto de sus evidentes molestias por el juego.

*Mbappé no festejó su gol ante el Montpellier

Quien fue consultado al respecto fue su compañero, el italiano Marco Verratt en zona mixta, quien minimizó lo sucedido en el terreno del Parque de los Príncipes: “Kylian es un jugador que siempre quiere hacerlo todo bien. Creo que con el penal fallado estaba enfadando un poco, pero eso es normal, es un gran jugador, siempre quiere marcar la diferencia”. En este sentido, agregó: “Cuando falla en algo, se decepciona, eso es normal. Pero después lo demostró, ya con el primer gol en el que fue decisivo, luego con su gol. Pero eso es un placer cuando está enojado porque significa que le importa mucho”

El técnico del equipo, Christophe Galtier, también habló en Canal + sobre los gestos de fastidio de Mbappé: “Veo la acción, es al final del primer tiempo. De nuevo, Kylian había jugado 45, 60 y 30 minutos en la preparación, su último juego fue hace tres semanas. Automáticamente, supe que iba a costar a nivel físico”. Y describió el malhumor del futbolista como “anecdótico”.

Es un competidor, quiere ser bueno, quiere ser bueno rápidamente. Pero un gran futbolista no es intermitente, lleva un poco de tiempo recuperar el 100% de sus habilidades atléticas. Cuando esté al 100%, marcará aún más la diferencia. Son jugadores a los que les gusta marcar, que quieren marcar, que atacan... es un poco normal que esté... no defraudado pero un poco bajito físicamente en comparación con sus compañeros”.

El diario L’Equipe catalogó estas actitudes como “sorprendentes” y detallaron: “En varias ocasiones lo vimos con la cabeza baja o los ojos al cielo, las manos en las caderas. Como desconectado de lo que sucedía sobre el terreno, perdido en sus pensamientos”. El periodista José Barroso de ese medio afirmó que en el Parque de los Príncipes se habló que carga con algunos “problemas personales” y hasta advirtió que en esta última semana “se mostró molesto en el Camp des Loges”.

En un equipo como el PSG, plagado de estrellas y con antecedentes de conflictos en los vestuarios, este tipo de gestos de Mbappé que fueron minimizados por Verrati y por Galtier no parecen contribuir demasiado al clima de un club que pretende ganar la Champions League por primera vez en su historia.

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