La captura la hicieron a la media hora de juego los fanáticos. Rápidamente hicieron hincapié en lo que estaba ocurriendo dentro del terreno. La diferencia entre unos y otros. Muchas veces una foto no es una muestra fiel de la realidad, aunque en este caso bien podría ser una pintura más o menos precisa de lo que ocurre dentro del vestuario. De un lado, Diego Pablo Simeone y sus muchachos unidos, escuchando las indicaciones para comprender cómo continuar el partido. Del otro, Quique Setién y una formación dispersa, inconexa.
La reacción de lo que estaba ocurriendo fue inmediata en redes sociales. “Cholismo”, destacaron sus fanáticos en las plataformas virtuales. Aquella palabra que se creó en el 2014 para definir con precisión la filosofía de trabajo del entrenador del Atlético de Madrid. Aunque tal escena no sirvió tanto para realzar, en este caso, los métodos del DT argentino. La foto del momento fue un argumento más que los simpatizantes tuvieron a la hora de hablar del tenso vínculo que estaría viviendo el cuerpo técnico que asumió en enero de este año con el plantel del Blaugrana.
“Filosofía Ibai Llanos: “Si la pausa dura 60 segundos, yo me quedo hasta el 61″, escribió el columnista de Diario Marca Nacho Palencia sobre esta escena, retomando las palabras del Youtuber que es una de las personalidades del momento en España. La escena fue el disparador para su descargo: “En ese momento el Atlético luchaba en el Camp Nou por no perder la distancia con el Sevilla, aguantar la tercera plaza y dejar en bandeja la Liga a su eterno rival, el Real Madrid. Todos unidos, bien juntos y tratando de mostrar que al fútbol no solo se juega con los pies. A su izquierda, el todopoderoso Barça de Leo Messi. Un conjunto que se cae muy poco pero que no sabe levantarse, mostrando que solo reconocen ser equipo cuando todo funciona. La imagen es significativa y aunque bien es cierto que segundos antes estaban formando una ‘piña’ más o menos decente, no tardaron ni dos segundos en disolverse. El Atleti no”.
Esto también destacó el periodista Javier Gascón desde el medio catalán Mundo Deportivo a partir de la imagen viral: “Eder Sarabia, que no se había levantado del banquillo hasta entonces, salió. Setién ya estaba de pie. Messi llegó el último, dando pasitos cortos, cada vez más cortos, tanto que casi no llega y se queda sin agua. Pero Sarabia ya sabía a quién no se debía dirigir y a quién sí. Y, claro, eligió a Riqui Puig para taladrarle la oreja. Setién habló con Vidal, que también recibió alguna indicación de Eder al final. El resto, pues eso, se refrescó. El dibujo que se veía desde arriba sí era indicativo. Círculo perfecto el del Atlético, todos alrededor de Simeone, muy cerca, los soldados pendientes de su general en el ejercito colchonero. Un ‘huevo’, por decir algo, en el Barça, con los jugadores más dispersos y separados de sus entrenadores, que no estaban en el centro”.
La mecha que expuso un malestar fueron los resultados desde que se reinició el campeonato con el Barça líder y cinco puntos más que el Real Madrid tras la victoria contra Mallorca. Luego del éxito en el debut, vinieron dos triunfos y tres empates que le permitieron al Merengue arrebatarle la cima, con la chance de escaparse a cuatro unidades si el jueves vence al Getafe como local. El 2-2 frente a un Celta peleando por no descender fue el detonante: desplante de Messi al colaborador de Setién en pleno campo de juego también durante un período de hidratación y los rumores de tensión entre el plantel y el equipo técnico en el vestuario.
El nuevo 2-2 frente al Colchonero no fue la excepción, aunque esta vez el interruptor de la bomba se visualizó a partir de la suplencia de Antoine Griezmann. El francés apenas jugó el tiempo adicionado por el árbitro, ya que el DT decidió lanzarlo al campo de juego con el reloj marcando los 90 minutos reglamentarios. “Hablaré con él, no le pediré disculpas pero entiendo que pueda sentirse mal”, se justificó Setién en conferencia. Minutos antes, el hermano del atacante había sido ácido desde las redes sociales: “¿En serio? 2 minutos. Me dan ganas de llorar”.
Del otro lado, Simeone tuvo una respuesta contundente sobre ese acontecimiento. “¿Te ha sorprendido lo poco que ha jugado Antoine Griezmann en el partido? ¿Qué sólo ha salido para los últimos cinco minutos?”, le preguntaron desde el equipo periodístico. “Sin palabras”, afirmó y se marchó de la entrevista.
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