Por decirles “gordos, perezosos y barrigones” a los bomberos, Rodolfo Hernández tendrá que pagar $45 millones

Tras su inimaginable éxito en las elecciones presidenciales (donde fue vencido por el hoy jefe de Estado Gustavo Petro), su fugaz paso por el Senado de la República y alguna que otra controversia más, el nombre de Rodolfo Hernández volvió a salir a la opinión pública. Esta vez porque, luego de dos años de litigio con un bombero, deberá indemnizarlo con millonaria multa.

Resulta que, en el 2019, cuando Hernández aún era alcalde de Bucaramanga, se despachó contra el Cuerpo de Bomberos de la ciudad y los tildó de barrigones, gordos, perezosos y hasta borrachos. Esas declaraciones le causaron una demanda penal en su contra que, recientemente, rindió frutos en su contra: deberá pagarle 45 millones al integrante de esa institución, Crystian Yohanny Pinzón.

Además, la multa que el dirigente de la Liga de Gobernantes Anticorrupción deberá asumir también es para la hija del bombero Pinzón, Carla Yaneth Pinzón, quienes fueron víctimas, según dijeron en su denuncia, de bullying y matoneo por cuenta de los dichos del entonces alcalde de la capital santandereana.

Así lo resolvió, en las últimas horas, el Juzgado Quinto Administrativo Oral de Bucaramanga que, en última instancia, falló en contra del excandidato presidencial por ocasionar perjuicios morales al padre y a su hija cuando, en el programa ‘Hable con el alcalde’, hizo esos serios señalamientos contra los funcionarios que apagan los incendios en la ciudad.

El fallo del tribunal obliga a la Alcaldía de Bucaramanga a que le pague los 45 millones a las víctimas por los daños psicológicos ocasionados. Sin embargo, una vez la administración municipal entregue los fondos deberán cobrarle al ingeniero la suma a saldar.

De acuerdo con la demanda contra el entonces mandatario santandereano, luego de que Hernández arremetió contra ellos, los bumangueses también comenzaron a insultarlos y, cuando iban a atender emergencias, los trataban con los mismos calificativos que les había dicho el ingeniero.

Tras estos señalamientos, el bombero denunciante desarrolló depresión y requirió exámenes psiquiátricos que evidenciaron que, en efecto, tenía trastornos por cuenta de las agresiones verbales. Así lo determinó el psiquiatra Juan Carlos Ramos Rodríguez, en 2019: Pinzón “sufre de sentimientos de impotencia, sensación de burla a su trabajo profesional, personal, lo cual le reactiva síntomas anímicos, apareciendo tristeza, ansiedad, ira, agresión, ira, depresión, autoestima y problemas de adaptación”, destacó el tribunal.

La hija de la víctima, además, aseguró que producto de los insultos a su padre, esta también se había visto seriamente afectada. Así quedó estipulado en el reciente fallo contra el hoy excongresista:

Entonces, el hombre afectado recibirá 30 millones y su hija, 15. Este dinero, por los perjuicios psicológicos y morales ocasionados por quien casi se convierte en presidente de Colombia en los pasados comicios presidenciales. Además, se le ordena disculparse con las víctimas a nivel nacional, para reparar y limpiar su nombre.

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