“Axel va a hacer todo lo que esté a su alcance para llegar a una unidad por el Partido Justicialista”, decían en en el entorno del gobernador bonaerense Axel Kicillof. Luego llegó un comunicado del gobernador en el que dijo que Quintela no era su candidato, e hizo hincapié sobre sectores de su fuerza política, con quienes a veces tiene diferencias pero también “un recorrido común, afecto y coincidencias”, que lo criticaron mucho y acompañaron “poco”. Según pudo saber Infobae, una vez conocido el comunicado del gobernador y la presentación de la lista de Cristina Kirchner, el diálogo entre el gobernador y la ex presidenta no se había concretado. La relación entre ambos ya no es la misma y menos que menos el vínculo entre el mandatario provincial y La Cámpora.
Las consecuencias del desentendimiento pueden empezar a somatizar a partir de cómo termine la disputa por el PJ y lo que miran en adelante dirigentes tanto que rodean a Kicillof como en el kirchnerismo es el 2025. ¿Si no hay unidad por el PJ, cómo se arman las listas del año que viene en la provincia de Buenos Aires, que es el epicentro electoral del peronismo? Tras el comunicado del mandatario bonaerense, en La Cámpora optaron por no contestar y limitarse a la presentación de la lista que lleva a CFK como candidata.
Infobae había contado que desde la mesa política que rodea a Kicillof y que estuvo a cargo de la organización del acto en Berisso por el Día de la Lealtad, una de las líneas a las que apostaban era que el año entrante este sector tenga representación propia en las listas legislativas provinciales y en los 135 municipio. Es decir, listas que respondan directamente a Kicillof o a su tropa.
El escenario actual retroalimenta esta línea. Kicillof sigue apostando por la unidad, pero en La Cámpora presionaron en las últimas horas de manera explícita para que el gobernador diga que apoya a Cristina Kirchner. Finalmente eso no sucedió. “Cristina está en el corazón del pueblo, también en el mío y no tengo que rendir examen de ese sentimiento”, pareció contestar a los embates de la dirigencia que impulsa a CFK a la PJ.
“El silencio de Axel es doloroso, no sé cómo entre Cristina y Quintela no sabe a quién elegir”, dijo la senadora nacional Anabel Fernández Sagasti; una de las espadas de La Cámpora en el Senado. Los testimonios se replicaron en distintas entrevistas y hasta en actos por el Día de la Lealtad.
Otra de las dirigentes que también se posicionó en esta línea fue la intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza. La jefa comunal del distrito de la Tercera sección electoral no asistió al acto en Berisso -en rigor ningún intendente referenciado plenamente en CFK lo hizo- y encabezó su acto por el Día de la Lealtad en su distrito. Allí, no dudó qué decir: “Que Kicillof hable con Quintela, que es su candidato a presidente del PJ y le diga que acompañe a Cristina”, pidió según consigna el sitio El Termómetro.
También planteó: “Si alguien enfrenta a Cristina nosotros también los vamos a enfrentar”. Y agregó que le llamaba la atención “que -Kicillof- no se dé cuenta que para ponerle freno a Milei la única posibilidad es con Cristina”.
La ex presidenta fue tajante este viernes durante un encuentro en el gremio de SMATA. “Los Poncio Pilatos y los Judas en el peronismo no van más”, expresó junto al sindicalista Ricardo Pignanelli que conduce el gremio de mecánicos y autopartistas y que fue elegido para integrar la lista que ya presentó Cristina Kirchner. El apuntado fue Axel Kicillof. No quedaron dudas cuando deslizó: “El que tiene que hablar con Quintela es Axel, que es el que lo apoya; porque sus ministros son los que están buscando avales para él”. Quien se ocupó de juntar avales para la candidatura del gobernador de La Rioja para la presidencia del PJ fue la agrupación La Patria es el Otro que lidera el ministro de Desarrollo de la Comunidad bonaerense, Andrés Cuervo Larroque; quien durante años fue un soldado de CFK al frente de la conducción de La Cámpora y hoy construye políticamente para ungir a Kicillof.
Kicillof habló a través de su comunicado. “En virtud de los reiterados ataques públicos que se han hecho durante los últimos tiempos, me gustaría agregar algunos comentarios. Quintela no es mi candidato. Es un error pensar que se trata de un dirigente al que yo ‘subo o bajo’, pero sobre todo es un gran error atacarlo”, deslizó.
Pese a que la propia ex presidenta había dicho tiempo atrás que los agravios en la política “vencen a los seis meses”, la discusión interna que atraviesa por estas horas el peronismo parece encaminar un quiebre profundo que viene fagocitándose -al menos en la provincia de Buenos Aires- desde antes de los cierres de listas de las elecciones del año pasado. Lo reconoció el propio Máximo Kirchner cuando luego de un encuentro del PJ bonaerense en Monte Hermoso advirtió: “Creo que hay una exageración en algunas cosas respecto del cierre de listas que poco le interesan a la gente y lo que hay que ver es el comportamiento de cada compañero que ha ido en cada lista, sea como intendente, intendenta, concejal, diputado, y cómo representa a lo que se comprometió”.
Más allá del tramo electoral hacia el año que viene, en la provincia de Buenos Aires se exterioriza cierta incertidumbre sobre el devenir de la interna y hasta dónde puede llegar. En el Gabinete bonaerense hay cuatro ministerios que comanda La Cámpora: Justicia, Ambiente, Salud y el Instituto Cultural; además de otros organismos de peso como el IOMA y el Instituto de Previsión Social (IPS).
Quienes conocen a Kicillof plantean que el gobernador “no va a mezclar la interna con la gestión diaria”; es decir pedir lealtad o renuncias. “Axel no va a hacer eso, no es su estilo”. Mientras que uno de los argumentos que esbozaban desde en La Cámpora para decir que no había interna ni intenciones de “limar” a Kicillof era justamente la presencia de integrantes de la organización que comanda Máximo Kirchner en el Gabinete bonaerense.
La conversación sobre este asunto cobró vuelo, al punto que Kicillof lo incluyó en su comunicado del sábado por la tarde: “Sobre quienes forman parte del gabinete, estoy orgulloso del trabajo que vienen haciendo y que deseo que sigan realizando”.
En la lista de Cristina Kirchner no figura ninguno de los ministros bonaerenses de La Cámpora: Martín Mena (Justicia), Daniela Vilar (Ambiente), Nicolás Kreplak (Salud) o Florencia Saintout (Instituto Cultural). Sí están algunos intendentes peronistas que no participaron del acto que encabezó Kicillof por el Día de la Lealtad en Berisso: Mariel Fernández (Merlo), Federico Otermín (Lomas de Zamora), Gustavo Menéndez (Merlo) y Leonardo Nardini (Malvinas Argentinas).
El gobernador buscará esta semana dejar atrás la discusión interna y volverá con fuerza a la agenda pública. El martes se inicia la campaña de vacunación de dengue con una actividad en La Plata. El miércoles visitará Punta Indio y Castelli; el jueves también tiene actividad de gestión y el viernes al mediodía participará en La Plata de la apertura del Encuentro Anual Futuro Memoria, que se llevará adelante en la República de los Niños.