A partir de mañana 24 de abril, el litoral peruano experimentará un aumento significativo en la intensidad de las olas, que podrían alcanzar hasta el doble de su tamaño habitual, según un aviso emitido por la Dirección de Hidrografía y Navegación de la Marina de Guerra del Perú. Este fenómeno se extenderá hasta el domingo 27 y podría afectar de manera importante a las zonas costeras.
La dirección detalló que, desde la tarde de este jueves, se presentará un oleaje anómalo proveniente del suroeste que se intensificará a lo largo de los días, alcanzando su máxima fuerza en la noche del 25 de abril. Este evento podría generar riesgos tanto para las actividades marítimas como para las comunidades cercanas al mar.
Según el aviso especial n.° 16, los efectos serán más notorios en el litoral norte, desde Tumbes hasta Salaverry, donde el oleaje empezará siendo ligero y se incrementará a moderado a partir del jueves, llegando a su máxima intensidad en la noche del 25.
En el litoral centro, que abarca desde Salaverry hasta San Juan de Marcona, se espera un fenómeno similar, aunque con algunas variaciones en los horarios. Por ejemplo, entre Salaverry y Chancay, el oleaje pasará de ligero a moderado el jueves y alcanzará su máxima fuerza la noche del viernes 25. Al sur de Chancay, en la zona de San Juan de Marcona, el oleaje se intensificará desde la mañana del jueves.
Finalmente, en el litoral sur, comprendido entre San Juan de Marcona y Tacna, el oleaje comenzará ligero el jueves, pero se incrementará a moderado el viernes, alcanzando su máxima magnitud en la mañana de ese día. Se prevé que el fenómeno pierda fuerza a partir de la tarde del domingo 27.
Clasificación del estado del mar
La Dirección de Hidrografía y Navegación ha detallado que este tipo de oleaje se clasifica como “anómalo”, un término que se refiere a olas con mayor energía que las normalmente observadas en las costas del Perú. El oleaje moderado, por ejemplo, se refiere a olas que alcanzan hasta el doble de su altura habitual, lo que puede generar condiciones peligrosas en algunas áreas.
El mar será considerado de oleaje ligero cuando las olas sean hasta un 50 % más grandes que lo habitual, mientras que el oleaje moderado implica olas que duplican el tamaño de las características normales. Por otro lado, el oleaje fuerte se refiere a alturas de olas entre dos y tres veces superiores a las condiciones habituales, y el oleaje muy fuerte superaría tres veces las alturas normales. Este tipo de oleaje es particularmente riesgoso, no solo para las actividades marítimas, sino también para quienes se encuentren en la playa.
La recomendación de la dirección de la Marina a las autoridades competentes y a la población es tomar precauciones para evitar accidentes, especialmente en las zonas costeras con playas abiertas o semi-abiertas, que son las más vulnerables a estos fenómenos.
El organismo continuará con el monitoreo constante del comportamiento del mar, realizando actualizaciones para asegurar que se tomen las medidas preventivas adecuadas.
Recomendaciones del Indeci
Ante este fenómeno, el Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci) emitió una serie de recomendaciones de preparación para mitigar los riesgos asociados con el oleaje. También hizo un llamado a las autoridades locales y regionales para que informen a la población sobre las medidas de seguridad a seguir, evitando la exposición innecesaria a las condiciones del mar y protegiendo a quienes realizan actividades en la costa.
En particular, el Indeci sugirió suspender las actividades portuarias y de pesca durante el periodo de oleaje anómalo, así como asegurar las embarcaciones y retirar las flotas pequeñas hacia tierra firme. También se aconseja evitar realizar deportes acuáticos, recreativos o campamentos cercanos a la playa mientras dure el oleaje de mayor intensidad.
La alerta también incluye el monitoreo continuo de los eventos meteorológicos y oceánicos por parte del Centro de Operaciones de Emergencia Nacional (COEN), que coordina con las autoridades locales e Hidrografía para mantener a la población informada sobre cualquier cambio en las condiciones del mar. Este trabajo en conjunto tiene como objetivo proporcionar información actualizada y facilitar la toma de decisiones para garantizar la seguridad de quienes habitan o visitan las zonas costeras del Perú.
Vigilancia constante
La Dirección de Hidrografía y Navegación seguirá supervisando de cerca el comportamiento del mar, con el objetivo de proporcionar información precisa y oportuna. La vigilancia continuará durante todo el periodo de oleaje anómalo para asegurar la protección de las personas que habitan o realizan actividades en el litoral peruano.
Las autoridades y los organismos de seguridad continúan trabajando de manera coordinada para minimizar los riesgos derivados del oleaje anómalo, y se espera que, con la colaboración de la población, se puedan evitar incidentes que pongan en peligro el bienestar de los habitantes de las zonas costeras.
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