María Asunción Aramburuzabala, la mujer más rica de México, revela su mayor arrepentimiento... y no fue en los negocios

María Asunción Aramburuzabala, considerada la mujer más acaudalada de México, compartió en una conferencia que uno de sus mayores arrepentimientos fue haberse casado a los 18 años, antes de terminar la preparatoria

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María Asunción Aramburuzabala, presidenta de
María Asunción Aramburuzabala, presidenta de Tresalia Capital, compartió una reflexión sobre su juventud. Foto: Cuartoscuro

María Asunción Aramburuzabala, presidenta de Tresalia Capital y Abilia, es reconocida como una de las empresarias más influyentes de México y la mujer más acaudalada del país, de acuerdo con estimaciones de Forbes. Heredera del histórico Grupo Modelo, la ejecutiva ha tomado importantes decisiones en su carrera empresarial y personal. Sin embargo, en una entrevista compartió cuál es una de las elecciones de juventud de las que se arrepiente.

Durante una conversación con el inversionista y creador de contenido Oswaldo “Oso” Trava, Aramburuzabala reflexionó sobre el significado del arrepentimiento y reveló que casarse a los 18 años, antes de concluir la preparatoria, es una de las decisiones que cambiaría si pudiera.

“No por mi exmarido, porque la verdad es un tipazo de primera y seguimos siendo buenos amigos, sino porque yo no estaba capacitada para casarme a los 18 años”, explicó.

La empresaria recordó que terminó el último año de preparatoria en el Colegio Alemán y después ingresó al Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) para estudiar Contaduría. Sin embargo, señaló que el matrimonio temprano limitó oportunidades académicas y personales:

La empresaria señaló que hubiera
La empresaria señaló que hubiera preferido retrasar su matrimonio para estudiar en el extranjero.

“Creo que hubiera sido mucho mejor no casarme tan joven, haberme ido a estudiar al extranjero, haber hecho mi maestría, haber conocido otras cosas”, comentó.

Aramburuzabala, quien estuvo casada por 20 años y es madre de dos hijos, destacó que su experiencia no la considera un fracaso, ya que mantuvo una relación positiva con su expareja. Aun así, subrayó que, en retrospectiva, preferiría haber retrasado esa decisión.

También compartió que su interés académico inicial era estudiar Ingeniería Química en la UNAM, pero el matrimonio hizo difícil concretar ese objetivo:

“A lo mejor pude haber estudiado en Estados Unidos, haber hecho mi maestría, pude haber encontrado otro camino”, añadió.

Hoy, Aramburuzabala es una de las figuras empresariales más destacadas del país, con inversiones estratégicas en sectores como bienes raíces, tecnología y finanzas, consolidándose como referente en el ámbito corporativo mexicano.