Frenan cerca de 40 millones de pesos en cocaína ocultos en tanques de combustible

Agentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) decomisaron un cargamento de 412.26 libras (186 kilos) de cocaína que iban ocultos en los tanques de combustible de un tráiler que pretendía ingresar a Estados Unidos por el cruce fronterizo de Otay Mesa.

De acuerdo con un comunicado de la CBP, durante la mañana del 22 de mayo los oficiales encontraron 160 paquetes, envueltos en cartón y bolsas de plástico, que tras ser sometidos a pruebas químicas se logró comprobar que se trataba de cocaína.

La incautación se produjo cuando el conductor del tráiler, un hombre de 35 años, solicitó ingresar a Estados Unidos, por lo que fue sometido a una revisión detallada de él y del vehículo; fue entonces que los agentes de la CBP detectaron un compartimiento oculto en los tanques de combustible que no correspondía al momento de la fabricación de los mismos.

La garita de Otay Mesa se encuentra entre Tijuana y San Diego, uno de los principales cruces de drogas vía terrestre de México a Estados Unidos, por lo que fue ahí donde las autoridades norteamericanas decidieron lanzar en octubre pasado la llamada Operación Apolo.

Al comparar el cargamento de cocaína frenado en la frontera de Tijuana con otros golpes al narco similares, se estima que el valor de la droga podría alcanzar los 37 millones 200 mil pesos en el mercado ilegal.

En dos eventos diferentes registrados en Indio, California, oficiales de la Patrulla Fronterizo informaron sobre el decomiso de 80 libras (36 kilos) de metanfetamina y fentanilo en una de las carreteras que conecta con la ciudad de Tijuana, Baja California.

El primer cargamento fue descubierto durante la mañana del 15 de mayo en la carretera Interestatal 10, a la altura del Golf Center Parkway, donde detuvieron a una mujer que conducía una camioneta (con dos menores de edad) en la que transportaba 29 libras (13 kilos) de fentanilo.

La droga estaba fabricada en pastillas azules marcadas con la leyenda M-30 e iba escondida en una caja sellada que contenía estantes y que la mujer (ahora detenida) se negó a dar su consentimiento para que la inspeccionaran, por lo que después de la llegada de un binomio canino, las autoridades lograron comprobar la existencia de la droga.

El segundo decomiso se produjo cuando oficiales interceptaron dos vehículos, también en la Interestatal 10, que se detuvieron a cargar combustible en una gasolinera y después de una inspección de rutina encontraron en la cajuela varios paquetes envueltos en celofán con características propias de a metanfetamina: fueron 51 libras (23 kilos) de cristal.

Sin especificar la identidad de los conductores, la CBP indicó que ambos tenían órdenes de arresto en su contra, por lo que fueron puestos a disposición de las autoridades competentes para que inicien con los trámites para su extradición.

La CBP indicó que sólo el cargamento de fentanilo era suficiente para asesinar a la población entera de Indiana, pues calcularon que las dosis letales aseguradas podrían ser suficientes para acabar con 6.8 millones de personas, por lo que celebraron el golpe que dieron al narco y que también significó una perdida de varios millones de dólares.