Una mujer compra un anillo por seis euros en una tienda y meses después lo vende por una fortuna: “Un golpe de suerte”

La mujer encontró la pieza junto a otras muchas alhajas en una caja etiquetada como “joyas basura”

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Anillo. (Pexels)
Anillo. (Pexels)

Imagina que vas un día a una tienda benéfica y te compras un anillo (aparentemente de bisutería) por unos pocos euros y acabas descubriendo que vale una fortuna. Puede parecer el inicio de una película de sobremesa de domingo y, sin embargo, se trata de un caso de la vida real que le ocurrió a una señora británica, tal y como recoge el diario The Sun.

La mujer, de 58 años, acudió durante la época navideña a un pequeño comercio de caridad de la zona de Bromley. Tras darse un paseo por los pasillos, enseguida se sintió atraída por una pieza algo escondida. “Me encantan las cosas brillantes y me llamó mucho la atención”, relata. Detalla que lo encontró junto a otras muchas alhajas en una caja que tenía una etiqueta en la que se leía “joyas basura”. Pensando que se trataba de una pieza de bisutería, se hizo con el anillo por sólo 5,5 libras (unos 6,6 euros).

No obstante, no tardaron en decirle que el anillo, que tenía un enorme diamante de 2,3 quilates, era mucho más valioso que un artículo de segunda mano y que su precio podría ascender hasta las 8.000 libras en una subasta.

“Alguien se habría dado cuenta”

Anillo. (Pexels)
Anillo. (Pexels)

La mujer, que no se creía del todo lo que le habían comentado, optó por llevarlo a Londres para tasarlo. “Quería tasar un colgante de ópalo y decidí llevar el anillo en el último momento. No pensé que pudiera ser real”, cuenta. Supuso que si fuera así, alguien antes que ella se habría percatado de su valor. “La piedra era tan grande que pensé que nadie podría pasarla por alto si fuera un diamante de verdad”, añade. Sin embargo, tras evaluar el año, los expertos le comentaron que la supuesta piedra falsa era en realidad un diamante con un valor estimado de entre 7.000 y 8.000 libras.

Sonia Jackson, la tasadora de Hansos Auctioneers, que comprobó la pieza, le aseguró que se trataba de “un diamante de verdad”. “Se quedó asombrada, llevaba meses con el anillo y pensaba que era una bisutería con una piedra falsa”, comenta.

“Creo que tienes que sentarte”

Cuenta que cuando la llamó para comentarle la buena nueva, le dijo: “Creo que tienes que sentarte”. La experta le afirmó que estaban ante una sortija de “alta calidad”, “una auténtica joya”. “Dicen que los diamantes brillan y este lo hace de verdad”, añade Jackson. Al enterarse de la gran noticia, la mujer aseguró que era “el mejor golpe de suerte” que había tenido nunca. “Estoy encantada, oyes hablar de cosas así, pero nunca piensas que te puede pasar a ti”, comenta.

La mujer recuerda que solo llevó el anillo en un par de ocasiones, pero que nada más descubrir su verdadero precio no volvió a ponérselo porque le preocupaba perderlo. Añadió que había decidido venderlo para después invertir ese dinero en la educación de su hija, añadiendo que no se iba a gastar “ni un céntimo” en sí misma. “Tengo todo lo que necesito”, afirma.