El Hospital de Molina del Segura en Murcia indemnizará con 190.000 euros a un paciente por negligencia en una operación

A pesar de que el paciente presentaba suficientes signos de alarma tras la intervención, señala la sentencia, no se llevó a cabo una actuación inmediata. La operación se realizó en 2019

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Instrumentos para operar. (Imagen Ilustrativa Infobae)
Instrumentos para operar. (Imagen Ilustrativa Infobae)

El Hospital de Molina del Segura deberá indemnizar con 190.000 euros a un paciente al que le ocasionaron daños médicos tras una operación realizada en 2019, cuando el hombre tenía 65 años, según ha informado este miércoles la Asociación ‘El Defensor del Paciente’.

El paciente, diagnosticado de estenosis de canal, hernia discal y radiculopatías de grado moderado, se sometió a una cirugía hace cinco años en este centro concertado de la sanidad pública y tras la misma sufrió “uno de los riesgos habituales más graves, un hematoma epidural causante de compresión medular, que exigía una reintervención urgente para descomprimir” la zona, explican desde la asociación en un comunicado.

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Sin embargo, pese a los síntomas que el paciente presentó desde el primer momento en el posoperatorio, “la dejadez del personal sanitario fue completa”, asegura el letrado Ignacio Martínez, especialista en derecho sanitario, por lo que cuando días después el hombre volvió a ser intervenido, “ya no se pudieron evitar los daños”, como debilidad muscular en el pie, alteraciones de la sensibilidad, un intenso dolor crónico e incontinencia, entre otros. Por todo ello, el abogado interpuso una demanda contra la aseguradora de este hospital y ahora la sentencia estima los argumentos de la misma.

La negligencia “resulta acreditada”

“La actuación negligente del equipo de neurocirugía resulta acreditada”, indica el texto de la sentencia, donde se señala que había suficientes “signos de alarma” tras la operación del paciente “que debían hacer sospechar de una mala evolución e implican la necesidad de una actuación inmediata”. Además, añade, en el TAC que se realizó al paciente se puso de manifiesto la sospecha de un hematoma epidural, “señalando el perito que esta sospecha, junto con el conjunto de síntomas previos, requería la necesidad urgente de su evacuación”. “La no realización de la intervención quirúrgica para evacuar el hematoma determinó la mala evolución y la irreversibilidad de las lesiones”.

La sentencia también indica que “resulta acreditada la mala praxis del equipo de neurocirugía del hospital asegurado y el nexo de causalidad entre la mala praxis y las lesiones sufridas por el demandante”.

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