La Procuraduría General de la Nación hizo un fuerte llamado a la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (Anla) para que se revoque la suspensión del trámite administrativo de licenciamiento ambiental del pozo Komodo-X1, un proyecto emblemático de exploración de gas en el Caribe colombiano que lleva 70 días suspendido.
Esta medida, solicitada el 26 de julio de 2024 por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, tiene como objetivo someter el proyecto a un análisis más profundo debido a su alta complejidad técnica y ambiental. Sin embargo, la Procuraduría advierte sobre los riesgos económicos y sociales que podría acarrear la falta de suministro de este recurso en medio de la creciente demanda energética del país.
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Impacto económico y energético
En un contexto donde la crisis hídrica afecta la producción de energía y los niveles de los embalses están en descenso, la Procuraduría resalta la importancia de llevar a cabo la perforación del pozo Komodo-X1. “La prolongada suspensión del proyecto podría tener graves consecuencias para la economía y la seguridad energética del país”. Además, se enfatizó la necesidad de diversificar las fuentes de energía para garantizar el abastecimiento de recursos para transporte y uso domiciliario en Colombia.
La iniciativa de exploración en el bloque COL-1, donde se ubica el pozo, es considerada fundamental no solo para Ecopetrol, sino también para la economía nacional. De acuerdo con información proporcionada por la vicepresidente de Exploración de Ecopetrol, Elsa Jaimes Romero, la perforación del pozo Komodo-1 se había planeado para finales de 2024. “Esto es icónico para el país el poder decir que tendremos un pozo perforado a esa profundidad. Estaremos cerca de los 4.000 metros debajo de la superficie del mar para llegar al suelo marino y ahí para abajo vamos a seguir perforando”, mencionó Jaimes.
No obstante, la suspensión del trámite ha generado incertidumbre. A pesar de que la evaluación técnica del estudio de impacto ambiental ya había sido completada por las autoridades competentes antes de la decisión de suspender el proyecto, la Anla todavía no ha tomado una resolución sobre la solicitud de licencia ambiental.
La Procuraduría, a través de Gustavo Guerrero, procurador delegado para Asuntos Ambientales, Minero Energéticos y Agrarios, expresó su desconcierto por esta situación. “Esta Procuraduría no comprende la razón por la cual continúa suspendido el trámite, por cuanto no se evidencian condiciones drásticas que ameriten la interrupción de la actuación y la pronta decisión de esta solicitud de licenciamiento ambiental”, afirmó Guerrero.
Compromiso e inversión en el proyecto
Es importante señalar que, Ecopetrol ha realizado una inversión superior a 35 millones de dólares en actividades preparatorias para el desarrollo de Komodo-X1. Esta cifra no solo refleja el compromiso de la empresa con el proyecto, sino que también representa un significativo aporte al patrimonio nacional. La falta de avance en la obtención de la licencia ambiental podría resultar en pérdidas económicas considerables, tanto para la empresa como para el país.
El anuncio de la Procuraduría también coincide con un momento crítico en la política energética de Colombia, donde se busca acelerar la transición hacia fuentes de energía más diversificadas y sostenibles. El proyecto Komodo-X1 no solo representa una oportunidad para aumentar la producción de gas, sino que también puede contribuir a mitigar la dependencia de fuentes tradicionales de energía en el país.
Con la presión creciente sobre el sistema energético nacional, la solicitud de la Procuraduría se presenta como un llamado urgente al Gobierno para que reconsidere su posición respecto al licenciamiento ambiental. La reactivación del proyecto Komodo-X1 podría ser clave para asegurar el suministro energético en los próximos años, a medida que Colombia enfrenta desafíos significativos en su capacidad de generación de energía.