Ronaldinho lleva casi un mes preso en el edificio de la Agrupación Especializada, un grupo táctico de la Policía Nacional de Paraguay, por ingresar junto a su hermano (Roberto Assis de Moreira) con pasaportes falsos en el país sudamericano. Aunque detrás subyace un motivo más profundo: la sospecha de una trama dedicada al lavado de dinero, con Dalia López, la dueña de la fundación que lo convocó a Asunción (y que aún se encuentra prófuga) como principal apuntada.
Aunque ya se produjeron múltiples arrestos alrededor de este caso, el ex Barcelona continúa privado de su libertad y su panorama sigue siendo poco alentador. Ante este escenario, Dinho intenta pasar de la manera más amena su tiempo en prisión.

Una de las vías de escape que encontró el campeón del mundo en Corea-Japón 2002 para abstraerse fue el deporte. El periodista paraguayo Hernán Rodríguez filtró a través de sus redes sociales dos videos en los que se puede observar a Ronaldinho desplegando su talento en el voley.
El brasileño, que supo ganar el Balón de Oro como mejor futbolista del planeta, demostró su habilidad con las manos al disputar algunos partidos en la modalidad 3 vs 3 de una especie de voley playero.
Esta no es la única disciplina con la que el ex Milan, Barcelona y Paris Saint Germain pasa sus días en Asunción. Tras las constantes solicitudes de los reclusos, el ‘10’ accedió a jugar al fútbol sala con sus compañeros de prisión. En el primer partido que disputó, Ronaldinho convirtió cinco goles y regaló seis asistencias en la victoria 11 a 2 de su equipo.
Vale destacar que sólo participó de amistosos y no del torneo interno, integrado por reclusos y agentes de seguridad. El mismo tuvo como premio para el campeón un cerdo de 16 kilos para degustar entre los vencedores.
Mientras aguarda definiciones sobre su caso, Dinho también tiene como pasatiempo partidos de piki-voley (una especie de fútbol tenis, pero con la red a la altura que se utiliza en voley).
Según informó ABC, el oriundo de Porto Alegre hizo pareja con un oficial primero en actividad que presta servicios en la Agrupación Especial. Sus rivales -dos ex policías- cuentan con un interesante prontuario.
Yoni David Mereles Martínez, de 33 años -el que lucía una camiseta de Cerro Porteño-, fue condenado a 10 años de prisión por robo. Édgar Ramón Ramírez Otazú, de 36, cumple una sentencia de 18 años por asesinato.
El piki-voley no es un deporte que le es ajeno al surgido de Gremio y campeón de la COpa Libertadores con Atlético Mineiro. Ronaldinho es amigo de Fernando Lugo, quien fue campeón mundial de la disciplina en 2016 y lo visitó en la cárcel. “Él está muy bien, no le falta nada ahí. No está encerrado y siempre está afuera compartiendo momentos con los muchachos. Él es un tipo muy humilde”, le contó a Infobae.
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