Terminó polémica por el oratorio del aeropuerto El Dorado, se queda

La polémica con el oratorio del aeropuerto El Dorado inició cuando por medio de sus redes sociales comunicaron que el espacio iba a ser remodelado, pensando en la reestructuración que le permita a personas de otros cultos ingresar al sitio. Posteriormente, al comunicado, las reacciones por parte de políticos y ciudadanos no se hicieron esperar e inclusive se presentaron manifestaciones en la ciudad por lo notificado. El día de hoy se anunció que el oratorio se conserva.

Luego de que se llevara a cabo una reunión entre OPAIN S.A Concesionario del Aeropuerto Internacional El Dorado y la iglesia católica, se concluyó definitivamente que el oratorio ubicado en el aeropuerto se queda. Poniéndole fin a una decisión que causó una gran polémica en el país.

En el encuentro que llevaron a cabo, el presidente de Opain y el monseñor Juan Vicente Córdoba definieron que el espacio que tienen los católicos para orar antes y después de cada vuelo será conservado. Con la intención de pensar en las personas que profesan otras religiones se creara otro espacio en el que ellos puedan ingresar y reflexionar como inicialmente lo comunicaron.

Pese a que ya se tomó la decisión de dejar el oratorio. El hecho generó en la ciudad de Bogotá y en parte del país distintas teorías en las que se afirmaba que debido a la llegada de Gustavo Petro a la presidencia de Colombia la iglesia católica iba a ser atacada. Hecho que desmintió Opain, resaltando que la decisión nada tenía que ver con el actual mandatario y que, por el contrario, fue una determinación que tomaron los administrativos del aeropuerto El Dorado.

Por su parte, la senadora del Centro Democrático María, Fernanda Cabal hizo un llamado por medio de sus redes sociales para alertar a la comunidad católica sobre el atropello del actual gobierno a la fe, poniendo diferentes ejemplos en los que argumentaba sobre un posible ataque a la iglesia católica en Colombia.

La senadora concluyó su mensaje con una invitación a los feligreses para unirse en oración, pero también a alzar la voz por lo ocurrido, para evitar que Colombia pase por lo que, aparentemente, pasa en Nicaragua, donde presuntamente la religión católica está siento perseguida y atacada.

Con el comunicado del día de hoy se termina con la polémica del oratorio y finalmente, la comunidad católica podrá seguir asistiendo al oratorio como lo hacía anteriormente.

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