El vicepresidente de Brasil está aislado por haber estado en contacto con un funcionario infectado de coronavirus

Hamilton Mourão y su esposa permanecerán están en cuarentena en su residencia oficial a la espera de los resultados de los análisis de COVID-19, previstos para el lunes. El episodio coincide con un agravamiento de la pandemia en el país y la renuncia, el viernes, del segundo ministro de Salud por divergencias con el presidente

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El vicepresidente de Brasil, Hamilton Mourao, durante la ceremonia de juramentación del entonces ministro de Salud de Brasil, Nelson Teich, en el Palacio Planalto en Brasilia. 17 de abril de 2020. REUTERS/Ueslei Marcelino
El vicepresidente de Brasil, Hamilton Mourao, durante la ceremonia de juramentación del entonces ministro de Salud de Brasil, Nelson Teich, en el Palacio Planalto en Brasilia. 17 de abril de 2020. REUTERS/Ueslei Marcelino

El vicepresidente brasileño, Hamilton Mourão, se sometió el sábado a un examen de Covid-19 y fue puesto en aislamiento en su residencia oficial después de que se confirmara que un funcionario que estuvo cerca de él durante la semana padece el nuevo coronavirus, informó el gobierno en un comunicado.

Según la información, Mourão, de 66 años, y su esposa, Paula, fueron examinados de inmediato después de la confirmación del resultado positivo del funcionario. Ambos permanecerán aislados en la residencia oficial de Jaburu a la espera del resultado de sus exámenes.

El vicepresidente de la República no trabajará el próximo lunes 18 de mayo, esperando el resultado de las pruebas, programados para ese día”, agregó la vicepresidencia sobre el general de la reserva del Ejército brasileño.

Pese a que no tiene síntomas de la enfermedad ni es considerado como un caso sospechoso, el vicepresidente canceló todas las actividades previstas en su agenda oficial para el próximo lunes.

El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, se dirige a la prensa este viernes, en el Palacio do Alvorada, en Brasilia (Brasil). EFE/ Joédson Alves
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, se dirige a la prensa este viernes, en el Palacio do Alvorada, en Brasilia (Brasil). EFE/ Joédson Alves

El pasado martes, en obediencia a una decisión judicial, el presidente brasileño, Jair Bolsonaro, divulgó los resultados de los tres exámenes que se hizo para verificar si contrajo la enfermedad en un viaje oficial a Estados Unidos en marzo pasado luego de que al menos la mitad de su comitiva resultara infectada.

Los tres exámenes, que el líder ultraderechista se negaba a divulgar y que se practicó usando seudónimos, dieron negativo.

La divulgación de los resultados fue exigida ante la Justicia por el diario O Estado de Sao Paulo bajo el alegato de que, por tratarse del jefe de Estado, tienen “interés público”, pese a que Bolsonaro argumentó a lo largo del proceso que eran de una exclusiva “índole privada”.

El gobernante es uno de los mandatarios más escépticos sobre la gravedad de la pandemia, ha llegado a calificar al COVID-19 como una “gripecita” y alega que el 70 % de los brasileños contraerá la enfermedad y que “muchos morirán” por más de que las autoridades adopten medidas de distanciamiento social.Con esa convicción, Bolsonaro ha violado de forma reiterada todas las recomendaciones para evitar aglomeraciones y ha censurado las cuarentenas impuestas por los gobiernos regionales y municipales.

Foto de archivo. Un trabajador de la salud, con traje de protección y máscara, transporta a un hombre sospechoso de estar infectado con coronavirus en el Hospital Estatal y de Emergencia Delphina Rinaldi Abdel Aziz, en Manaos, Brasil, 16 de abril, 2020. REUTERS/Bruno Kelly
Foto de archivo. Un trabajador de la salud, con traje de protección y máscara, transporta a un hombre sospechoso de estar infectado con coronavirus en el Hospital Estatal y de Emergencia Delphina Rinaldi Abdel Aziz, en Manaos, Brasil, 16 de abril, 2020. REUTERS/Bruno Kelly

La decisión de Mourao de aislarse coincidió con el agravamiento de la pandemia en Brasil y se produjo un día después de la renuncia del ministro de Salud, Nelson Teich, por sus divergencias con Bolsonaro en torno a la estrategia para combatir el COVID-19.El antecesor de Teich, Luiz Henrique Mandetta, un férreo defensor de las medidas de distanciamiento social, fue destituido el mes pasado por iguales divergencias con Bolsonaro.

Brasil, el sexto país con más casos del coronavirus SARS-CoV-2 en el mundo, registró el viernes 15.305 nuevos casos de COVID-19 en un único día, una cifra récord que elevó el número de contagiados a 218.223, así como 824 nuevas muertes, con lo que el total de víctimas llegó a 14.817 en casi dos meses.

Las previsiones indican que contagios y muertes seguirán saltando de forma exponencial en este país de 210 millones de habitantes y que el pico sólo se producirá en las próximas semanas.

Con información de Reuters y EFE

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