La DGT establece nuevas restricciones para conductores mayores de 65 años

La DGT opta por restricciones individualizadas para conductores mayores de 65 años, adaptando el permiso su vigencia al estado físico y mental de cada persona y reforzando los controles médicos

Guardar
La DGT establece nuevas restricciones
La DGT establece nuevas restricciones para conductores mayores de 65 años (Heute.at)

La Dirección General de Tráfico (DGT) ha decidido dejar atrás la retirada automática del permiso de conducir por edad y apuesta por un modelo de restricciones individualizadas para los conductores mayores de 65 años. Se trata de una medida que, según datos oficiales, afecta ya a unos 250.000 conductores en un país donde más de cuatro millones de personas superan esa franja de edad y siguen al volante.

El cambio de rumbo de la DGT surge tras estudios que indican que los conductores senior no protagonizan más accidentes que otros grupos, ya que compensan la posible merma en los reflejos con una conducción más prudente y la experiencia que da el tiempo. Bajo esta premisa, la regulación ya no se basa solo en la edad, sino en las necesidades concretas de cada persona.

Así funciona el nuevo sistema

Las restricciones se aplican de forma personalizada y se reflejan mediante códigos numéricos en el reverso del permiso de conducir. Entre las limitaciones figuran la prohibición de circular de noche o en condiciones de baja visibilidad, restricciones geográficas - solo se puede conducir en zonas concretas - y la obligación de llevar acompañante en trayectos largos. Además, los informes médicos pueden establecer el uso obligatorio de gafas o audífonos.

Estas condiciones buscan equilibrar la seguridad en carretera con el derecho a la movilidad. “Estamos intentando apelar mucho a la autorresponsabilidad de la gente mayor, sobre si reúne o no reúne condiciones, en lugar de perseguirlos. La línea con los mayores está muy clara”, ha insistido Pere Navarro, director general de Tráfico, durante un desayuno informativo de Executive Forum. Ahí mismo puntualizaba que no se va a limitar la conducción por cuestiones de edad, sino por el estado físico y mental de la persona: “Nunca se va a limitar el permiso de conducir por razones de edad. Será por las condiciones físicas, pero no por la edad. Tú haces la prueba, tú ves el resultado”.

La DGT sopesa además acortar el periodo de vigencia del permiso: desde los cinco años actuales a solo dos a partir de los 65 años, aunque la medida aún está bajo debate. Lo que sí ha cambiado ya es el plazo de renovación, que se reduce para aumentar la periodicidad de los reconocimientos médicos. Así, los permisos para coches y motos pasan a renovarse cada cinco años tras cumplir los 65 y, en el caso de los permisos profesionales (como los de camión o autobús), cada tres años a partir de esa edad.

Estas revisiones buscan detectar cualquier patología o deficiencia que, aunque no impida la renovación inmediata, pueda agravarse con el tiempo. Si el reconocimiento médico lo indica, el periodo de validez del nuevo permiso puede acortarse. A partir de los 70 años, además, los conductores quedan exentos de pagar la tasa correspondiente, teniendo que abonar únicamente el reconocimiento médico.

El trámite de renovación sigue siendo sencillo. Basta con acudir a cualquier Centro de Reconocimiento de Conductores autorizado para completar los exámenes médicos correspondientes, obtener la fotografía y abonar las tasas requeridas. Las personas mayores de 70 solo pagan el reconocimiento médico. Tras iniciar el trámite, se entrega un permiso provisional válido para circular hasta que el definitivo llega por correo al domicilio en cuestión de semanas.

Para quienes prefieren atención presencial, las jefaturas provinciales permiten realizar estos trámites sin necesidad de cita previa para mayores de 65, siempre que la gestión sea personal. Eso sí, el canje de permisos extranjeros sigue exigiendo cita previa por la verificación con el país de origen.

El debate social sobre si debe haber una edad máxima para renovar el permiso de conducir permanece activo. En este contexto, desde la DGT se remarca la apuesta por un sistema que pone el foco en la salud física y mental de cada persona, apelando tanto a la vigilancia médica como a la responsabilidad individual. “Creemos en la responsabilidad de cada conductor y que este decida por sí mismo si está en condiciones de conducir o no”, ratificó Pere Navarro, dejando claro que la política de Tráfico no pasará por restricciones automáticas, sino por adaptaciones basadas en evaluaciones profesionales y personalizadas.