El despliegue de la Guardia Civil ante el aumento de la llegada de menores migrantes a nado: colaboración con Marruecos y demanda de falta de medios

El pasado 2 de agosto, 54 niños llegaron a las orillas de Ceuta en una noche

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Una lancha de la Guardia
Una lancha de la Guardia Civil. (Antonio Sempere/Europa Press)

En la última semana, se ha producido un crecimiento del número de menores que llegan nadando a las orillas de Ceuta. El sábado 2 de agosto, 54 niños fueron rescatados en las playas o mientras trataban de alcanzar la arena. A lo largo de estos siete días, este escenario se ha replicado durante varias noches, obligando a la Guardia Civil a realizar un mayor despliegue en la costa de la ciudad autónoma.

La ‘Operación Feriante’, que coincide con las fiestas de la ciudad, se caracteriza por la especial actuación de la Guardia Civil, al ser una época con especial presencia de intentos de entrar a la Península. Muchas personas lo hacen vía terrestre, ocultas en camiones en gran parte de los casos, pero otras optan por cruzar a nado.

Ante esta situación, el Instituto Armado ha realizado un gran despliegue de medios y unidades en las aguas ceutíes, aunque asociaciones como Jucil Nacional (Justicia de la Guardia Civil) denuncian la falta de recursos. La colaboración de las autoridades marroquíes es clave para controlar las entradas masivas de migrantes menores de edad.

Rescate de más de 50 menores migrantes llegados vía marítima a Ceuta (@KARIMPRIM)

Menores rescatados

El peligro al que se enfrentan los niños, principalmente de origen magrebí, que se lanzan al mar para conseguir llegar a Ceuta es enorme. Muchos de ellos tienen edades en las que todavía no cuentan con una gran capacidad para nadar, a lo que se suma la posibilidad de un momento de temporal u oleaje. Después de esos 54 menores del 2 de agosto, la noche del día 6 otros ocho niños fueron rescatados por la Guardia Civil de la ciudad autónoma.

Más allá del océano, durante los días festivos de Ceuta, algunos migrantes tratan de aprovechar para llegar a la Península por otros lugares. Este año, la cifra ha sido más baja que en otras ediciones, con tres menores extranjeros no acompañados que han sido encontrados ocultos entre las atracciones tratando de entrar a los camiones que cruzan el Estrecho.

Trabajaban en condiciones infrahumanas en dos fábricas ilegales de tabaco en Málaga y Córdoba.

El despliegue y la ayuda marroquí

Ante esta situación, la Guardia Civil ha desarrollado un importante despliegue. Según informó El Faro de Ceuta, durante la noche del 6 de agosto, emplearon a todas las unidades de su servicio marítimo (Semar), junto a los Grupos Rurales de Seguridad (GRS), una unidad de apoyo y seguridad ciudadana, y una intervención añadida desde la Comandancia de Cádiz.

El periódico ceutí cifra en tres las embarcaciones empleadas por parte del Semar, junto a los medios de los GRS. Además, la Gendarmería Real marroquí trabaja en su lado de la frontera, y también se habrían desplegado buques de la Marina de Marruecos. La Guardia Civil llegó a pedir apoyo a Salvamento Marítimo, mientras que Cruz Roja se encargó de los cuidados de los menores rescatados.

Este jueves, la costa de Ceuta cercana a la frontera del Tarajal amaneció cubierta por decenas de flotadores negros en el mar. Cuando las autoridades marroquíes o españolas localizan a los migrantes en el agua, muchos de ellos abandonan los salvavidas, que permanecen dispersos y a la deriva en la superficie marítima.

Dentro del Semar, los GEAS (Grupo Especial de Actividades Subacuáticas), entre otros, se encargaron de retirar los flotadores. La imagen de un mar lleno de flotadores simboliza el drama del efecto migratorio en la frontera de Ceuta, como ha destacado el secretario provincial de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) en Ceuta, Rachid Sbihi.

Agentes de la Gendarmería Real
Agentes de la Gendarmería Real marroquí y Fuerzas auxiliares (Antonio Sempere - Europa Press)

La aportación desde el lado marroquí fue determinante. Guillermo Lorenzo, secretario general de Jucil, explicó en Cope que sin la participación de la policía marroquí habría sido irremediable la masiva llegada de menores, pues han sido los gendarmes de ese país los que han rescatado la mayor parte de menores antes de llegar a Ceuta.

Demandas de falta de medios

Los secretarios de Jucil y AUGC coinciden en sus denuncias de la necesidad de recursos de la Guardia Civil para afrontar el dilema migratorio. Según publicó Europa Press, Rachid Sbihi lanzó una petición de “auxilio” al Ministerio del Interior, asegurando que se necesitan 200 nuevos agentes para “reforzar las patrullas de costa, el servicio marítimo, GEAS y otras unidades”. Hace casi un año, trasladaron esta necesidad a la delegada del Gobierno, sin obtener todavía la respuesta esperada.

“Todos los veranos el mismo patrón. Llevamos años denunciando este fenómeno de los nadadores, que se intensifica en esta época, cuando aprovechan la niebla densa característica en nuestra ciudad para arrojarse al mar, poniendo en grave riesgo su vida y la de los guardias civiles que acuden a su rescate”, continuó el secretario ceutí.

En cuanto a Jucil, en su perfil de redes sociales aseguran que “la Guardia Civil se ahoga en Ceuta” ante la falta de medios con los que abordar esta situación. Esto no es una novedad, pues en otras zonas del país se han realizado demandas similares, como en Cádiz, en el contexto de la lucha contra el narcotráfico.