Este martes, los sindicatos UGT, CCOO, CSIT-Unión Profesional y CSIF firmaron con la Presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, tres acuerdos laborales que afectan a más de 40.000 empleadas y empleados públicos de la Administración General de la región -según los agentes sociales-: El Acuerdo Sectorial del Personal Funcionario, el Convenio Colectivo del personal laboral y la Carrera Profesional para todo el personal del ámbito de aplicación de estos dos acuerdos laborales.
Unos acuerdos que entrarán en vigor el próximo 1 de enero y que tendrán validez durante un periodo de 4 años (hasta el 31 de diciembre de 2028), para el que el Ejecutivo autonómico invertirá 60 millones de euros.
“Se trata de la primera vez en la historia de la Administración autonómica que se ha diseñado un modelo sistemático, general e integrado para valorar el trabajo realizado, aplicable a la totalidad del personal al que afecta, suponiendo por ello un salto cualitativo en la modernización del empleo público y la mejora de los servicios prestados a los ciudadanos”, han destacado desde el Gobierno de la comunidad.
Principales cambios introducidos en los acuerdos
Una de las principales novedades que introduce el convenio es la implementación de un sistema de carrera profesional para todo el personal del sector de administración y servicios. Así lo explicó la presidenta del Ejecutivo madrileño, el día de la firma de los acuerdos en la Real Casa de Correos, sede del Gobierno regional, donde afirmó: “Queremos modernizar nuestro modelo de Administración, apostar por un nuevo sistema de evaluación laboral, que tenga en cuenta la excelencia, el talento y el esfuerzo de nuestros funcionarios”.
Además, Ayuso confirmó que las evaluaciones van a tener una incidencia directa en las retribuciones: “Cada empleado público va a tener sus objetivos medibles y proporcionados, y quienes destaquen van a ver su esfuerzo recompensado”.
En este sentido, según añadió UGT en un comunicado de prensa, este modelo de carrera será de participación voluntaria, gestionado de manera individual, con criterios claros, objetivos y evaluables. Además, será gradual, con remuneración acorde al nivel alcanzado, consolidable e irreversible, salvo en caso de sanción disciplinaria.
Otra de las novedades introducidas es la que concierne al entorno laboral inclusivo. Según destaca UGT, con los nuevos acuerdos se garantizará un ambiente de trabajo respetuoso, igualitario y libre de discriminación, incorporando cláusulas específicas para proteger a las personas del colectivo LGTBI.
Desde CSIT-Unión Profesional destacan que también se ha avanzado en el compromiso de “dar mayor agilidad a la convocatoria y desarrollo de los procesos selectivos, que permiten mantener el límite de temporalidad por debajo del 8%, afianzar más de 600 plazas de promoción interna, garantizar la movilidad voluntaria y permanente con un nuevo sistema de concurso de traslados, mantener la posibilidad de jubilación parcial hasta 2028, incrementar algunos complementos retributivos en casi un 10%”.
Y es que este acuerdo regula aspectos como la jubilación parcial (que se mantiene), la movilidad (con un concurso de traslados abierto), la formación (se desarrollarán nuevos itinerarios formativos, integrados con el modelo de carrera), la jubilación forzosa (con la obligación de jubilarse a los 70 años para el personal laboral, siempre que cumplan con los requisitos de cotización para obtener el 100% de la pensión) o las bolsas de contratación (que permanecerán activas de forma continua).