La curiosa reacción de tendero cartagenero al que le pidieron vender media papa: “Es culpa de nosotros ”

En la costa Caribe, según explica, esta práctica se ha convertido en un alivio para las familias que viven del diario

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En su tienda, Keylor vende productos por partes desde los 500 pesos por comodidad de su clientela - crédito @lord_keylor
En su tienda, Keylor vende productos por partes desde los 500 pesos por comodidad de su clientela - crédito @lord_keylor

Por comodidad de su clientela, las tiendas de barrio en Cartagena venden productos al menudeo; es decir, por partes, porque muchas familias viven al día. Keylor Guerrero da cuenta de ello en su negocio, hasta donde llegan habitantes de La Heroica para comprar productos en bolsa desde los quinientos pesos.

Sin embargo, en días recientes uno de ellos lo dejó sin palabras al pedirle que le vendiera media papa. Así lo habría descrito a través de su cuenta en la plataforma TikTok, en donde suma videos con hasta dos millones de interacciones.

“Oigan, yo acepto que vengan y me pidan $500 de azúcar, $500 de aceita, $500 de salchichón, 1.000 pesos de frijoles, 1.000 pesos de lentejas, lo que ustedes quieran, eso yo lo acepto. Pero lo que no voy a aceptar es que vengan, y es que tengo una rabia porque la gente se pasa de loca... ¿Cómo se le ocurre a alguien que yo voy a coger una bendita papa, la voy a partir por la mitad y luego voy a ponerme a venderla? No se puede ¿Qué voy a hacer con la otra mitad de la papa?, ¿Me la como así cruda?”.

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A pesar de negarse es probable que siga recibiendo peticiones por el estilo - crédito @lord_keylor / TikTok

Este comportamiento, admite, sería culpa de los mismos tenderos que han dado a torcer el brazo con casi cualquier producto que distribuyen en bolsas pequeñas para luego venderlo a un precio menor:

“La gente aquí se mete unos cule’ viajes, unas loqueras. Yo no sé. Pero ¿saben algo? Eso es culpa de nosotros por andar vendiendo al menudeo y lña gente piensa ue porque uno les vende lo mínimo de lago, uno va a vender cualquier cosa al mínimo”.

Frustrado, pero tratando de ver con humor lo ocurrido, Keylor intentó bromear al respecto e imaginó situaciones hipotéticas que, como van las cosas, podrían convertirse en petición de alguno de sus clientes: “Solo falta que yo le quite al rollo un cuadrito de papel higiénico y lo venda o destape una gaseosa y la venda por chorritos. Traten la seriedad, traten la seriedad, me hacen el favor”.

¿De dónde viene la cultura del menudeo en la costa Caribe?

En un video publicado en mayo del 2023, Keylor explicó a sus seguidores: “Muchas personas no me cree cuando les digo que aquí vienen a comprar $500 de azúcar y $500 de aceite y me preguntan si realmente eso existe, porque en su ciudad no se ve”.

Ambas cantidades, $500 de azúcar y $500 de aceite, podrían describirse como una cuarta parte de las bolsas transparentes en las que las tiendas de mascotas venden los peces de acuario. “Muchas personas vienen a comprar $500 de azúcar porque, realmente, sirve cuando van a hacer un jugo o alcanza, incluso, para hacer varias veces café”.

Esta práctica inició, únicamente con productos de la canasta básica que subían de precio - crédito @lord_keylor / TikTok

El menudeo empezó únicamente a realizarse con los productos de la canasta básica que, por cuestiones externas a las tiendas de barrio, fueron subiendo de precio. Sin embargo, con el tiempo, esta práctica se ha extendido a casi cualquier producto que no necesite estar sellado para la venta:

“Los $500 de aceita la gente los utiliza más que todo para hacer el arroz, fritar los huevos, etc. Yo, realmente, me pongo a analizar y sale más caro comprar de a poquito todos los días, a comparación de comprar un tarro grande de aceite, pero bueno. Aquí en la costa todo lo compran menudeado, también dependiendo de los ingresos diarios que tiene cada familia, pero es bastante curioso como las personas comprar pequeñas cosas de cada producto”.

Desde entonces, Keylor advertía las ocurrencias de su clientela, pero la media papa lo llevó a retomar el tema con un mensaje claro sobre el respeto por su oficio y algo de humor: “Ustedes, probablemente, no me crean. Pero hay veces que vienen personas a comprar medio pimentón o a comprar medio pepino, un cuarto de lechuga; o sea, la mitad de la mitad de una lechuga y créanme que es bastante sorprendente, así como cuando compran $200 de vinagre”.

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