Las clases universitarias en Francia empezarán sin restricciones de aforo

Los expertos confirmaron que un 80% de los estudiantes ya recibió al menos una dosis y el 63% finalizó la pauta de vacunación

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Las clases de la universidad en Francia empezarán con todos los estudiantes. EFE/EPA/IAN LANGSDON/Archivo
Las clases de la universidad en Francia empezarán con todos los estudiantes. EFE/EPA/IAN LANGSDON/Archivo

El inicio del curso universitario en Francia se hará sin restricciones de aforo, de forma que la totalidad de los estudiantes podrán ir a clase respetando las reglas de seguridad del protocolo sanitario, como llevar mascarilla.

En una entrevista publicada este martes por Le Parisien, la ministra francesa de la Enseñanza Superior, Frédérique Vidal, subraya que el comienzo del curso “será lo más normal posible” con el 100 % de los alumnos en las clases.

Vidal explica que en la inmensa mayoría de los casos las aulas y los anfiteatros tienen plazas de sobra, pero cuando eso no ocurra, los responsables universitarios podrán desdoblar las salas o retransmitir las clases en otros espacios para repartir a los estudiantes.

Si hay un brote con más de tres positivos en una misma unidad de enseñanza durante un periodo de siete días, la Seguridad Social se encargará de la identificación de las personas que han estado en contacto con los infectados y con ellos se aplicará la regla general establecida por las autoridades francesas.

Estudiantes en una universidad francesa. LUC NOBOUT / ZUMA PRESS / CONTACTOPHOTO
Estudiantes en una universidad francesa. LUC NOBOUT / ZUMA PRESS / CONTACTOPHOTO

Eso significa que un estudiante identificado como contacto de un positivo si está vacunado no tendrá que aislarse y podrá continuar asistiendo a las clases. Si no está vacunado o es positivo, su aislamiento durará siete días y el alumno podrá seguir los cursos a distancia.

La ministra subrayó que para ir a clase no se exigirá el certificado sanitario, que se ha hecho obligatorio en Francia para muchas actividades de la vida social, como ir al cine, al teatro, a un espectáculo e incluso para tomar algo en un bar o en un restaurante.

No obstante, el certificado será necesario para participar en actos festivos universitarios organizados por las asociaciones de estudiantes o en las actividades culturales y deportivas que reciban público exterior a las universidades. También en los coloquios o seminarios científicos con más de 50 participantes.

El Gobierno francés prevé la instalación de centros de vacunación en los campus universitarios, pilotados por las autoridades sanitarias, para incitar a que se inmunicen los que no lo hayan hecho y facilitarles las cosas.

La policía dispersaba una concentración de jovenes en la ribera del Sena, en París, el pasado domingo. EFE/EPA/YOAN VALAT
La policía dispersaba una concentración de jovenes en la ribera del Sena, en París, el pasado domingo. EFE/EPA/YOAN VALAT

Vidal señala que un 80 % de los estudiantes ya han recibido al menos una dosis y el 63 % han finalizado la pauta de vacunación. Cuando empiecen las clases a mediados de septiembre, calcula que ese porcentaje habrá subido al 80 %.

Con respecto a los estudiantes extranjeros (son 370.000 de un total de unos 2,8 millones), la ministra afirma que si están vacunados podrán acceder “sin problemas” a las universidades.

Los que lleguen de países considerados en rojo por Francia por un alto nivel de circulación de la covid, habrán de registrarse en la Seguridad Social para que se vacunen rápidamente. Los centros universitarios se encargarán de vigilar que lo hacen.

Las escuelas

La vuelta a las clases en Francia a partir del próximo 2 de septiembre se hará con mascarilla obligatoria en los espacios cerrados pero sin la imposición del certificado sanitario que tanto se ha generalizado en el país, ni para los alumnos, ni para los profesores ni para los padres.En una entrevista publicada este domingo por Le Journal du Dimanche, el ministro de Educación, Jean-Michel Blanquer explica que no se requerirá el certificado -que atesta haberse vacunado, haber superado la covid o tener un test negativo de menos de 72 horas- porque “la escuela debe mantenerse accesible a todos”.

De hecho, el curso se iniciará con todos los alumnos en clase y con una campaña de vacunación en todos los centros escolares que permitirá que puedan inmunizarse todos los mayores de 12 años que así lo quieran.

Por ahora ya son más del 55 % del grupo de los que tienen entre 12 y 17 años los que han recibido al menos una dosis, un porcentaje “alentador” para el ministro, que recuerda que se partía de cero al finalizar el curso pasado.

Colegio en Francia. EFE/EPA/IAN LANGSDON
Colegio en Francia. EFE/EPA/IAN LANGSDON

A diferencia de lo decidido en Italia, en Francia no se exigirá la vacunación de los profesores, un colectivo que en su “inmensa mayoría” -subraya- está inmunizado o en proceso de estarlo.

Lo que se ha previsto es que, bien equipos móviles de sanitarios se desplacen a las escuelas para vacunar allí o bien que los centros organicen desplazamientos a centros de vacunación para los estudiantes voluntarios.

En caso de contaminación en clase, se aplicará la misma regla que para la población genera. Eso significa que los casos contacto de un alumno infectado tendrán que aislarse durante siete días y seguir las clases a distancia salvo que estén vacunados, ya que entonces podrán seguir acudiendo a clase.

En primaria, como los alumnos no tienen todavía edad para vacunarse, cuando uno de ellos se contamine se cerrará toda la clase durante siete días.

Los alumnos mayores de 12 años que no estén vacunados podrán participar en salidas escolares e incluso ir a piscinas y bibliotecas -donde ahora se necesita el certificado sanitario- a condición de que esos equipamientos estén reservados para los escolares.

Sin embargo, en actividades en las que estén mezclados con otra población, como visitas de museos, habrán de tener el certificado sanitario cuando se requiera.

(con información de EFE)

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