Estas son las predicciones del ex presidente López Mateos que AMLO citó en su conferencia

Un nuevo ex presidente de México se sumó a la lista de los mandatarios admirados por López Obrador, Adolfo López Mateos, quien escribió una carta durante el acto de nacionalización de la industria eléctrica

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El presidente López Obrador habló
El presidente López Obrador habló de un ex presidente y su carta sobre la nacionalización de la industria energética (Foto: Cuartoscuro)

La admiración del presidente Andrés Manuel López Obrador por sus antecesores Benito Juárez y Lázaro Cárdenas es conocida porque en múltiples ocasiones lo ha manifestado. Pero este jueves se agregó a esa lista un ex mandatario más, Adolfo López Mateos, quien nacionalizó la industria eléctrica en 1960.

López Mateos se desempeño como presidente de México de 1958 a 1964. Durante su gobierno se crearon el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), el Museo Nacional de Antropología, uno de los más importantes del país. Pero la nacionalización de la industria eléctrica y una carta al pueblo de México parecen ser la razón por la que López Obrador lo admira.

En su conferencia de prensa matutina de este jueves, AMLO pidió que se leyera en voz alta la misiva escrita por López Mateos. La carta data del 27 de septiembre de 1960 y fue escrita en el acto de nacionalización de la industria eléctrica. “Pueblo de México. Les devuelvo la energía eléctrica, que es de la exclusiva propiedad de la Nación, pero no se confíen porque en años futuros algunos malos mexicanos identificados con las peores causas del país intentarán por medios sutiles entregar de nuevo el petróleo y nuestros recursos a los inversionistas extranjeros.

Adolfo López Mateos antes de
Adolfo López Mateos antes de ser presidente fue Secretario de Trabajo y Previsión Social durante el gobierno de Adolfo Ruiz Cortines (Foto: Wikipedia)

“Ni un paso atrás, fue la consigna de Don Lázaro Cárdenas del Río, al nacionalizar nuestro petróleo. Hoy le tocó por fortuna a la energía eléctrica. Pueblo de México, los dispenso de toda obediencia a sus futuros gobernantes que pretendan entregar nuestros recursos energéticos a intereses ajenos a la Nación que conformamos”, escribió el ex presidente.

En las líneas siguientes, López Mateos dejaba en claro que no ignoraba el atraso del país en temas tecnológicos y administrativos. “Sería necio afirmar que México no requiere de la capacitación tecnológica en materia eléctrica y petrolera”, pero para él eso no justificaba que los accionistas de empresas públicas fueran extranjeros.

“Cuando un gobernante extranjero me pregunta si hay posibilidad de entrar al negocio de los energéticos o a la electricidad, le respondo que apenas estamos independizándonos de las invasiones extranjeras que nos vaciaron el país. Pero que en tanto los mexicanos sí queremos invertir en el petróleo americano o en su producción de energía eléctrica, por si quieren un socio extranjero" remató.

La nacionalización de la industria eléctrica se hizo con la finalidad de aumentar el nivel de electrificación, pues a principios de 1960 apenas el 44% del país tenía servicio de luz. Durante esa década se incrementó 50% la inversión pública destinada a obras de infraestructura, sobre todo plantas generadoras.

El presidente López Mateos recibió
El presidente López Mateos recibió de visita en el país a John F. Kennedy y su esposa Jacqueline (Foto: Wikipedia)

Para López Obrador, López Mateos “fue un buen presidente” como también Adolfo Ruíz Cortines y Lázaro Cárdenas, así lo expresó después de que leyeran la carta. Sin embargo, la administración de López Mateos tuvo episodios de represión.

Los primeros años de su gobierno lidió con el movimiento ferrocarrilero de Demetrio Vallejo y el de maestros, en ambos casos hubo un número de despidos. El 22 de mayo de 1962, el líder agrario Rubén Jaramillo y su familia fueron asesinados.

El presidente dijo que López Mateos fue muy respetado como mandatario. Contó una anécdota de cuando su homólogo estadounidense John F. Kennedy vino a México, “le dio un trato de mucho respeto. Le trajo de regalo, entre otras cosas, un grabado del presidente [Benito] Juárez que tenían en Estados Unidos. Encontré ese grabado y lo tengo en la oficina”.

También recordó que él inició con la entrega de los libros de textos [gratuito] y hubo oposición. Los conservadores de entonces no querían que se entregaran los libros de texto. Y se logró establecer la entrega".